SxS ATRAPANDO UN GUERRERO

Capítulo I

¿Qué tan difícil puede ser encontrar a una mujer sola en el espacio?

Jodidamente imposible.

Sasuke aplastó su puño contra la gran consola rectangular de la inmensa nave espacial que tenía al mando. Las naves Zargonnii fueron construidas para manejar la ira de un guerrero. No hubo daño alguno al equipo; las luces parpadeaban entre el panel negro, pero se estabilizaron con parpadeos y pitidos alternándose al fondo. Unos pocos gruñidos de otros guerreros en cubierta se hicieron eco de las quejas de Sasuke. Todos los hombres estaban nerviosos.

El espacio vacío miraba a Sasuke a través de la ventana oblonga que pasaba junto a la consola y podía ver su reflejo. Sus ojos rojos ardían con la intensidad de sus pensamientos rodeados por su larga ceja que iba desde un lado de su cuello, pasaba sobre sus mejillas altas cerca de sus orejas, atravesando su frente y hasta el otro lado de su cuello hasta rematar hacia el pelo sobre sus hombros. Su pelo largo le palmeaba mientras estaba en el modo de batalla. Su ancho pecho estaba desnudo excepto por la generosa cantidad de pelo grueso que lo cubría; no llevaba camisa. Los labios llenos de color azul de Sasuke se separaron ligeramente a medida que su aliento se aceleraba con su ira. Medía más de dos metros, era musculoso y aterrador como el infierno. O eso le decían las hembras humanas.

Durante semanas, Sasuke y algunos de sus hombres habían buscado en los cielos y otros planetas siempre que había una calma durante la guerra que se desataba entre las galaxias. Había una sola mujer en particular que intentaba encontrar. Samui.

-"¿Te has estremecido, Sasuke?"

-"Estaba pensando en Samui"- le dijo Sasuke a Obito, quien vino a ponerse a su lado. Obito se estremeció notablemente.

-"Oh, eso"

Obito era casi tan alto como Sasuke. Dos reflejos se reflejaban ahora contra la oscuridad del espacio y las luces parpadeantes de la consola. Ambos parecían irritados.

-"Sí, eso. Ha desaparecido, joder. No hay avistamientos, ni rumores, ni una pista o un susurro en la galaxia. Esa mujer en particular causaría revuelo. Quienquiera que la haya tenido sabría que la quiero y estaría encantado de complacerla entregándomela, incluso aunque sea a un puto enemigo. No hay nada sobre ella. ¿Sabes la única razón que se me ocurre? Debe haber ido a otro plano de existencia. Kakashi y su compañera humana Hanare afirman que hay mundos dentro de otros mundos. Hemos estado buscando durante mucho tiempo. No hay rastro de la pequeña humana"

-"Lástima que no pueda gritarnos. Su boca es lo suficientemente grande"- refunfuñó Obito.

Sasuke estuvo de acuerdo. Samui, la bocazas, había sido una espina clavada en su costado desde que Kakashi y Naruto encontraron a seis hembras humanas viviendo en un iglú en el moribundo planeta Tierra. La hembra había estado bajo el cuidado de Sasuke durante una semana, pero él se sentía responsable por ella. Gracias a su sanador, Kakashi, que fue quien se la entregó. Maldito fuera el guerrero. Las hembras humanas fueron transferidas del planeta a otra de las naves de Sasuke, una nave que había volado en pedazos. Después de la batalla espacial con los renegados Tonans y los Gorgano, los guerreros de Sasuke y las hembras que salvaron de la Tierra anegada se dispersaron por el universo. Su última nave fue aniquilada. Todas menos una, fueron localizadas, y estaba volviendo loco a Sasuke.

-"¡Qué me jodan!"- gritó Sasuke. -"No tengo ni idea de cómo buscar en diferentes dimensiones. Kakashi dijo que el guerrero de agua Kabuto lo envió a él y a Hanare a través de un pozo de agua al plano de existencia de los guerreros oscuros. Entiendo el razonamiento de los guerreros del agua; nuestras fuentes de agua son demasiado peligrosas para las hembras humanas debido a la escoria de los estanques que se comen la carne. Como los guerreros oscuros tienen el ADN de Kakashi, podemos conectarnos con ellos si es necesario. Pero su líder ha jurado que Samui no está allí, y yo le creo. Por lo que respecta a los guerreros del agua prácticamente no hay forma de llegar a ellos. Si Samui terminó allí, es como si estuviera muerta desde el aterrizaje. Incluso nuestros transbordadores, por muy fuertes que sean, aparentemente no soportan los golpes del agua. Con la guerra contra los Gorgano y los bribones Tonans y ahora el maldito Angano volador, necesitamos a todos nuestros guerreros. No puedo permitirme el perderme o quedar atrapado. Nuestros aliados han buscado cuando ha sido posible, pero no tienen tiempo para una hembra sola. Estoy perdido. Sólo puedo pensar en esa pobre arpía sola en algún lugar".