Solo un seguidor

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Estaba el otro día con sueño, muy cansado luego de un arduo día escolar. Me fui a dormir, despidiéndome de mis padres, ya que la cortesía es lo último que se debe perder. Me eché a la cama, agotado. Con trece años me sentía como si tuviera una espalda de alguien de cincuenta.

Saqué mi celular el cual me regalaron de cumpleaños. Lo desbloquee y abrí yutub con la esperanza de que estuviera allí, haciendo directo. Desde hace tiempo que lo seguía, no paraba de mirarlo. Cada vez que subía un video lo visualizaba. Cada vez que prendía directo me quedaba viéndolo como si fuera lo último que he de apreciar.

No podía evitar sentir algo cada vez que veía su imágen de perfíl de aquel dibujo animado que tanto disfrutaba de pequeño. Desde que lo conocí, nunca volví a ver a mordecai de la misma forma, es como si su sola presencia me diera un nuevo paradigma de cómo apreciar el mundo.

Compuvideos o Juanito es un youtuber no muy conocido del cúal me enteré gracias a un amigo. No solía ver mucho yutub, pero desde que supe de él, no me he despegado de la plataforma.

Con el tiempo, sus videos ya no solo me empezaron a dar risa, sino que empezaba a sentir algo especial, es como si aquel que estaba detrás de esa divertida voz de loquendo me diera algo que sentir, algo por lo que caminar cada día.

Su voz, su preciosa voz era algo que penetraba mi corazón, al momento de prender un directo, al estar en vivo, su palabra me elevaba el alma hasta el infinito, no podía resistirme ante ello. Sin embargo siempre me limitaba a escribir un "jaja" o un simple "xd", las cuales no eran expresiones que me dejasen expresar (valga la redundancia) el amor que sentía por aquel sujeto.

Nunca me atreví a hablarle, pese a que he tenido la oportunidad de hacerlo. Sé en cuales servidores de discord está, pero nunca he podido atreverme a hablarle. Cuando se unía a un canal de voz en Ossa, yo me muteaba, no podía con las ganas que le tenía, me empecé a obsesionar, mis palabras no podían salir de mi boca cuando se unía.

En el fondo, yo sabía que nuestro amor jamás podría ser correspondido, el se declaraba cien porciento heterosexual. Eso sólo me angustiaba, nunca me he interesado en alguien más desde que lo conocí. Mis anteriores intereses amorosos se resumían en un par de chicas que me rechazaron por ser raro, así que tenía miedo que con Juanito fuera algo más de lo mismo.

Me derretía con él, suspiraba con él, Compuvideos era la razón de cada una de mis autoflagelaciones.

En fín, yo no podía resistirme, me llegó la notificación de que Juanito estaba en directo, por lo que no dudé ni un segundo en abrir yutub para ver su preciosa cara, con sus sensuales lentes e imaginarme cómo sería estar con él.

Ahí estaba, con sus ya mencionados lentes, bebiendo un vaso de noséquemierda. El vaso contenía un líquido blanco y espeso, leí en chat bastantes chistes con respecto a eso, Juanito mencionó un par de chistes riéndose del color de aquella extraña sustancia. Pero, a diferencia de los demás, yo no sentí un humor incontrolable, yo sentí como mi cosito, mi pajarito, mi varita mágica se comenzaba a parar.

La razón de mi erección era sencilla, pensaba que aquella sustancia provenía de un hombre, como los demás también pensaron. Pero a diferencia de los otros, sentía que provenía de mí. Compuvideos empezó a tomarsela, a tomarse aquella cosa líquida y viscosa que tanto deseaba que fuese lo que mencioné anteriormente, mi semen. Mi sustancioso y cuanticioso semen dentro de la boca de Compuvideos, salido directo de mi larga, gruesa y sudoroso pija, que no denotaba mi edad, nadie diría que venía de mí, un simple niño mexicano que le atraía ver a un adolescente un tanto mayor que él haciendo cosas y emitiendo opiniones derechistas sobre temas controversiales. Sencillamente no podía resistirme.

Fue entonces cuando saqué mi grueso miembro y comencé a acariciarlo. No tardé mucho en empezar a apretarlo con mis delgados dedos, a exprimirlo como si se tratase de un limón recién cortado. Mientras me imaginaba como sería el jugoso y esponjoso compupene de compuvideos. Lo estaba jalando hacia adelante y hacia atrás con una fuerza que no me imaginaba que proviniera de mí, con unas ganas incontrolables potenciadas con el solo pensamiento de que mi cum se está esparciendo en la deslizable garganta de compuvideos.

Fue entonces cuando sentí un hormigueo, eso fue porque sabía lo que se venía. Me pajee hasta que sentí como mi semen empezaba a salir de mi gran pija. Me vine, compuvideos seguía tragando esa compusustancia rara que tenía. Yo eyaculé en mi celular pensando en como se sentiría eyacular en la cara del sensual Juanito, el bello y espectacular compuvideos.

No pude resistirme. Como consecuencia de mi mente sucia, tuve que limpiar mi celular, es cúal estaba manchado con aquella excitante sustancia que tanto me predía, así que tomé un pañuelo y continué con la limpieza.

Para cuando ya había acabado, compuvideos ya había terminado su transmisión. Me puso algo triste, pero tomando en cuenta lo satisfecho que estaba, no le tomé mucha importancia.

Decidí prender el computador, era algo temprano para dormirse así que quise jugar un rato o hablar por discord. Me decidí por lo último, entré al servidor de Otro Server Sin Sentido Alguno para ver quien estaba en el chat de voz. Sólo había un par de sujetos que estaban jugando a lo suyo, así que decidí chatear un rato, spamiée un par de chistes y subí un par de memes, pero no hice mucho, la última frase que redacté fue; "tilín es mi jefe, el sech es mi pastor, y dios mi dios".

Me dispuse a dormir, pero antes de que decidiera acostarme me llegó una solicitud que me cambiaría para siempre:

"Juanito" solicitud de amistad entrante"

Mi relación con Compuvideos, una Historia de OssaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora