- Hola, por favor pasen – decía feliz la mama de Daniel mientras entraban por la puerta - ¿Cómo han estado?, Daniel duerme pero... veo que tiene muchos amigos, el atrevido de Daniel duerme mientras sus amigos están aquí... lo voy a despertar
- ¡no. No. No! ¡no lo despierte por favor! – dijo apresurado Daniel mientras Su-ji y Jay entraban a la casa
- Se que es todo un desorden – no tuve tiempo de ordenar estas cajas... - dijo algo avergonzada la mama de Daniel
- No se preocupe, discúlpeme a mí, si la próxima vez traer un regalo, esto fue... inesperado – dijo algo nerviosa – debes estar cansada por el trabajo... nosotros podemos ayudarle con las cajas – sugirió Su-ji a lo que los chicos asintieron
- ¿Qué? Esta no es tarea para un invitado, me pagan 5 dólares al día. Je, je – conto alegre la madre de Daniel
- Ese es mi amigo, vive conmigo y... vine a ayudarlo con un problema
- Paso algo con Daniel – pregunto preocupada Su-ji
- Bueno...
Después de un rato Daniel grande se durmió y Daniel pequeño despertó saludando a los dos chicos
- Hoo... ¿hola?, me hablaron de ti, soy Daniel y vivo con Daniel, ja, ja si, nos llamamos igual – saludo Daniel a Jay quien le sonrió y le ofreció goma de mascar – hola Su-ji veo que acompañaste a Daniel
- Si, voy a visitar a unos amigos y a... mi mama – dijo algo más triste
- ¿eres de aquí? ¿nunca te había visto - pregunto curioso
- No, soy de Jiguk-Dang queda cerca, pero no llego directo a la ciudad – desvió la mirada esperando a que no le preguntaran más – y tú?, ¿estás bien?, Daniel nos dijo que tenías un problema
Daniel les conto el problema que tenia a los dos chicos mientras ellos le ayudaban a doblar las cajas, de como al llegar a la ciudad se había enfrentado a un abusador que le había robado su dinero y junto a el un billete de cinco dólares que para él era un amuleto
Ambos escucharon atentos a Daniel mientras Jay apretaba su mandíbula, por lo que había pasado
- Que imbécil – soltó Su-ji de repente – solo por ser fuerte se cree que puede hacer lo que sea – dijo enojándose – quisiera poder ayudarte también pero ya tengo planes
- No te preocupes – respondió nerviosos – Daniel me ayudara puedo confiar en el – entonces mañana te vas de la ciudad
- Si y no, voy a mi ciudad natal, pero me hospedare en un hotel aquí algunos días – observo las hora ya que se podía hacer tarde y no conocía la ciudad – tengo una... tenía una reservación
- Paso algo – vieron a Su-ji preocupados
- Cancelaron mi reservación – dijo mientras rascaba su cabeza y veía el teléfono con preocupación
- ¿es por que es muy tarde?, lo siento si no venias...
- No, no es eso, al parecer la cancelaron temprano – intento calmarlo – ahora tendré que buscar otro hotel aunque será algo difícil por la temporada
La chica se lamentaba mientras buscaba en su teléfono hasta que Jay toco su hombro para llamar su atención
- He, conoces un hotel – asintió con la cabeza, Su-ji soltó un suspiro de alivio – enserio gracias
Después de un rato, ambos se despidieron mientras se encaminaban al hotel, cuando llegaron Su-ji estaba sorprendida de lo que veía, era un Hotel demasiado lujoso pero antes de siquiera poder hacer algo Jay ya se encontraba delante de ella con una la llave de su habitación
- Jay... gra... gracias, pero – Jay comenzó a negar la cabeza mientras la chica comenzaba a decirle de que era demasiado, Jay inventaba escusas asta que ella se quedo pensando si aceptar o no – bueno... gracias Jay, enserio eres el mejor – pero cuando levanto la vista Jay había desaparecido como la última vez
Así fue como Su-ji subió a su habitación para poder descansar, al siguiente día iría a su ciudad natal y no había nada que la estresara mas que regresar al lugar donde había sido feliz y había vivido un infierno
Y mientras Daniel se enfrentaba a su miedo "logan Lee", Su-ji enfrentaría su pasado
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MI DESTINO - [Lookism y tu]
De Todo"Nadie puede quitarte tus recuerdos - cada día es un nuevo comienzo, crea buenos recuerdos todos los días." todos tienen nuevos comienzos pero nadie sabe que pasara, huyendo de recuerdos tristes y sobreviviendo a una vida que una vez le dio la espal...