“¡Callate!” El anciano le rugió enojado al CEO Xing; ya no estaba tan relajado como antes.
El CEO Xing parecía haberse dado cuenta de algo después de ser regañado.
Miró a su alrededor y vio a muchas personas señalándolos.
El CEO Xing inmediatamente se dio cuenta de que se había metido en problemas.
Sin embargo, no tenía la intención de reflexionar sobre sí mismo. En cambio, corrió enojado en dirección a Mimi. “¡Perra! ¡Todo es por ti!”
Mientras el CEO Xing hablaba, levantó el pie y estaba a punto de patear a Mimi.
Mimi cayó al suelo, luciendo débil. ¿Cómo podría esquivar a tiempo?
Antes de que el CEO Xing pudiera patear a Mimi nuevamente, lo patearon de costado.
“¡Ay!” El CEO Xing gritó y voló hacia un lado para mirar a Xing Min, quien lo había pateado.
El CEO Xing quería maldecir, pero debido a que la otra parte era Xing Min, solo podía tragarse sus maldiciones.
Xing Min miró al CEO Xing con frialdad. “¿Por qué? ¿Todavía quieres lastimar a alguien en Linglong? ¿Realmente no te tomas en serio la reputación de Linglong?"
El CEO Xing parecía que estaba a punto de llorar, pero sabía que era inútil que dijera algo ahora.
Se levantó del suelo e ignoró las huellas de su cuerpo. Llegó al anciano con pequeños pasos. “Papá, mira, de hecho estoy pensando en nuestro Linglong. Sé que es mi error esta vez. ¡Definitivamente no me atreveré a hacerlo de nuevo!”
El anciano miró al CEO Xing antes de decirle a Xing Min: “¡No nos avergoncemos aquí! ¡Si hay algo, ve a la oficina!”
Mientras el anciano hablaba, caminó primero hacia el ascensor privado.
Los pasos del anciano ya no eran tan firmes y pausados como antes. Incluso se tambaleó un poco.
El CEO Xing inmediatamente avanzó y apoyó el brazo del anciano.
El anciano sacudió la mano del CEO Xing con enojo.
El CEO Xing no se rindió y la ayudó de nuevo.
Xing Min miró la escena caótica frente a él, y su rostro ya sombrío se volvió aún más oscuro.
Le dio al gerente del hotel algunas instrucciones para limpiar el vestíbulo antes de tratar con los espectadores.
El gerente del hotel ya estaba familiarizado con esas cosas. Inmediatamente se puso a trabajar después de recibir el pedido.
Pero el gerente del hotel miró a Mimi, que estaba tirada en el suelo y se negaba a levantarse, y estaba en un dilema.
Xing Min se dio cuenta de que el gerente estaba en una posición difícil. Saludó a su asistente a su lado. Inmediatamente, un asistente se adelantó y levantó a Mimi del suelo.
Mimi estaba sorprendida. Antes de que pudiera gritar, el asistente la empujó hacia el ascensor.
Cuando Mimi finalmente reaccionó y quiso luchar, ya había sido empujada hacia el ascensor y ya no podía escuchar nada.
La farsa estaba llegando a su fin y Lin Yun ya no tenía la intención de quedarse aquí. Intercambió miradas con Wang Qi y planeó irse del hotel lo antes posible con su equipaje.
Lin Yun y Wang Qi caminaron uno al lado del otro. Justo cuando dieron unos pasos, escucharon a Xing Min gritar: “Señorita, por favor espere”.
Lin Yun y Wang Qi, naturalmente, sabían que Xing Min los estaba llamando. No tenía sentido fingir que no lo escuchaba.
Los dos se detuvieron y miraron a Xing Min, que se acercaba lentamente.
“Señoritas, lo que sucedió hace un momento fue el error de Linglong y les trajo una mala experiencia”. La voz de Xing Min era baja, diferente de la voz enojada que reprendió al CEO Xing hace un momento.
Wang Qi, que ya estaba de mal humor, naturalmente no pensaría que el asunto había terminado solo porque Xing Min se disculpó.
“Originalmente pensé que Linglong era un hotel de lujo y que las cosas sucias no deberían aparecer aquí”. Wang Qi expresó sus pensamientos sin rodeos.
“¡Por lo que parece, hay cosas tan sucias en todas partes! ¡Es realmente una revelación! No tenemos ninguna intención de seguir quedándonos. ¡Por favor, déjenos ir lo antes posible!”
Al escuchar la acusación de Wang Qi, la expresión de Xing Min no cambió en absoluto, como si llevara una máscara rígida.
“Ustedes dos no han terminado de resolver el asunto de hoy. Todavía necesito tu cooperación." El tono de Xing Min fue un poco autoritario.
¿Cuándo había escuchado Wang Qi las órdenes de los demás? ¡Casi nunca escuchó las palabras de su abuelo, y mucho menos a un extraño que no conocía en absoluto!
“¡Por qué deberíamos cooperar!” Wang Qi lo miró con sus ojos redondos y dijo con rectitud: “¡Míranos ahora! ¡Inmediatamente! ¡Inmediatamente!”
La impaciencia brilló en los ojos de Xing Min, pero rápidamente la ocultó. “¡Está bien! Haré arreglos para que alguien las lleve más tarde. Sígueme a la oficina para descansar un rato. Te informaré cuando esté hecho."
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°Erinnee°