Prólogo

22 2 0
                                    


Mis piernas flaqueaban, mis oídos pitaban, y la fuerte sensación de mareo superaba cualquier límite existente en mi cuerpo.

- ¿Donde? ¿Donde estoy? - manchas, colores distorcionados, era todo lo que mi vista captaba, y ese insesante pitido en mi oído que no paraba de recordarme lo frágil que me encontraba,

- ¡HEY! Llamen a los Anbu, hay que reportar lo que ha ocurrido, la Hokage se debe enterar - La voz de un hombre se escuchaba, era clara, fuerte y temerosa, no logro procesar lo que dice, me siento desorientada.

Mis piernas no dan más, sigo sin entender donde estoy, ¿donde esta mi familia?  ¿Donde estan mis padres? ¿Por que no estoy en mi hogar? 

- ¿Mamá? - espero alguna respuesta, pero solo siento susurros ¿que hago?. ¿Que debo hacer? - ¿Papá? - mi voz esta quebrada, quiero llorar, quiero llorar - ¡Mamá! ¡Papá! 

Mi vista esta mejorando, logro divisar con más claridad el vibrante sol, pero siento calor, demasiada calor, y mi vista sigue nublada, quizas por el llanto que no logro aguantar.

- Todos largo de aqui, no hay nada que ver - escucho una voz masculina cercana, un posible traje blanco y una gorra el mismo color, el ruido disminuye, la sensación de calor aumenta, siento que mi cabeza explotara - ¿Te encuentras bien? - siento la voz del hombre cerca, a la vez que ya no sostengo mi propio peso, termino por caer de rodillas, sintiendo el fuerte impacto en mis nervios.

¿tierra? ¿Por que estoy caminando sobre tierra? 

- ¿Como te llamas? ¿Sabes donde estas? - esa voz, se que me trata de tranquilizar, pero no puedo evitar asustarme más, me cuesta abrir los ojos, siento que me descanezco.

- ¿Mis padres? ¿Donde estan mis padres? - inevitablemente sale otro sollozo, mi garganta se cierra, se me escapa el aire y no logro formular otra palabra sin un hipido que hace doler mi pecho en busca de respirar - Quiero ir...me a mi hogar - no logre evitar los hipidos, pero su mano acariciando mi espalda logra calmar levemente mi cabeza, cubro mi rostro con mis manos.

Todo me arde, siento que mi cuerpo arde.

- Ayame, ve por agua, esta joven esta ardiendo.

- Enseguida.

Mi vista se siente más calmada, levanto mi vista en busca de entender donde estoy y poder volver a mi hogar.

- Esto no puede ser - susurro - esto no puede ser.

- Mira pequeña, tengo agua, bebela, ¿si? - veo la botella, trato de procesar lo que mi vista refleja. Inersicamente trato de sujetar la botella.

El calor vuelve a subir, nublando todo nuevamente.

Y luego, nada. Negro.

¿Por que estoy en Konoha?

¿Por que?

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 08, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Un adios en el risco || KakashiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora