-Tampoco está tan mal - Dijo Noe
-Bueno, tampoco creo que vaya a poder hablarle - Dije desilusionada
Noe y Alya seguían insistiendo en que fuera a hablar con Marco. No se me da bien hablar con gente mayor, y menos con alguien que me atrae. Pero aunque tuviese la oportunidad de poder establecer una conversación con él, me pondría muy nerviosa y empezaría a decir cosas sin sentido.
-No hay prisa, cuando puedas, busca alguna razón para hablarle - Me dijo Alya intentándome convencer.
-Bueno... está bien - Dije con una sonrisa traviesa en los labios.
¡-Bieen! - Dijeron las dos a la vez muy entusiasmadas
*Prrrrrrrrrr* - Era el ruido de la alarma de incendios
-Es la alarma de incendios? - Dijo Noe alarmada
-Creo que si, correr, debemos de reunirnos con los profesores. - Dije mientras les indicaba correr
-No debimos venir al baño en horario de clase sin permiso - Dijo Noe
-Ya no hay vuelta atrás - Dijo Alya
Corrimos las tres a la vez hacia nuestra aula donde estaban todos nuestros compañeros junto al profesor, el cual les estaba diciendo que hicieran una fila para ir bajando hacia el patio. Lentamente, nos fuimos incorporando a la fila sin que el profesor nos dijera nada.
-Uno, cinco, diez y seis, veinticinco... ¡Estamos todos! - Dijo el profesor
-Oyee, Javier! Falta un alumno de tercero! - Dijo mientras corría dirigiéndose hacia mi profesor, el cual se llama Javier
En su rostro, se mostraba nervioso y con miedo. Claramente, tenía miedo de que no se pudiese encontrar al alumno que falta. Pero, ¿y si era Marco? No creo, por lo que me contó Noe, es alguien que tiene miedo a ciertas cosas y no se metería en estas cosas, por lo cual no creo que pudiera ser él.
-¿Qué? ¿Quién falta? - Dijo mi profesor con miedo
-Es un chico de tercero que salió de clase antes de que sonara la alarma. Se apellida García. - Dijo el profesor
En ese momento mi celebro colapso, ¿cómo podría ser él? No pensé que él fuera la posibilidad de faltar en medio de un incendio.
Aunque, antes, cuando nosotras entramos al lavabo, me fije en que justo alguien entro al lavabo de chicos, y llevaba puestos unos cascos. Y que casualidad que el baño de chicos de tercero estén cerrados, por lo cual vienen al de segundo. Así que tampoco me sorprendería tanto si fuera él realmente.
Por instinto propio, fui corriendo hacia al baño en el cual debería de estar Marco. !- Ahora vuelvo! - Dije mientras corría lo más rápido posible antes de que fuera demasiado tarde.
-
-
Cuanto más rápido corría, más notaba el humo quemado. Finalmente, llegué hacia el pasillo de los baños, sin dudarlo entre al de chicos. Toque puerta por puerta gritando su nombre sin obtener ninguna respuesta, quedaba una sola puerta y finalmente me lo encontré ahí.
Estaba desmayado, seguramente debió respirar mucho oxígeno contaminado por el incendio, pero pude comprobar que seguía respirando. Me quedé mirando su bonito rostro, nunca lo tuve tan cerca de mí. Él llevaba unos shorts negros que mostraban sus largas piernas claras, llevaba un suéter negro que le quedaba bastante bien, su pelo castaño estaba muy revuelto. Rápidamente, volví a pensar en lo que tenía que hacer, cogerlo como pudiera y sacarlo del instituto. Será muy difícil por lo alto que es, pero lo intentaré.
Comencé a agarrarlo de los hombros intentándolo arrastrar asta llegar al menos al pasillo donde están todos los alumnos, así alguien me podría ayudar. Poco a poco iba avanzando asta llegar al pasillo. Grité fuertemente por ayuda, y el tutor de Marco vino tan rápido como pudo junto a mi profesor.
-Oh por dios, ¿dónde estaba? - Dijo mi profesor junto a mi tutor
-Estaba en el baño, pude arrastrarlo asta aquí. Creo que se ha desmayado, deberíamos de llevarlo a un hospital urgentemente. - Dije con miedo
-¿En el baño? ¿Cómo supiste que estaba ahí? - Dijo mi profesor
-No es el momento de explicaciones, llamar a una ambulancia - Dijo su tutor
-Tú ves junto a Javier a guiar a los alumnos hacia el patio, mientras yo llamare a una ambulancia- Dijo rápidamente e inmediatamente llamó a una ambulancia
-De acuerdo - Dijimos yo y mi profesor a la vez
Fuimos corriendo hacia al final del pasillo donde se encontraban todos los alumnos junto a los profesores sin saber qué hacer, ya que seguían pensando que aún faltaba un alumno. Se alegraron al vernos y les explicamos todo en un breve resumen, seguimos las instrucciones del tutor de Marco y finalmente conseguimos bajar hacia al patio con éxito. No faltaba nadie, todo el alumnado había evacuado el instituto, excepto Marco. Seguía preocupada por él, pero tenía la esperanza de que pudiese recuperarse.
ESTÁS LEYENDO
Tan juntos y separados
RomanceDaniela, descubre la atraccion que tiene hacia un chico de su nuevo instituto que va a un curso mayor que ella. Al principio solamente cruzan miaradas de vez en cuando, poco a poco empiezan a hablar.