Painfully Sweet [YoonMin-JimSu]

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Hola~! 
Sé que me he demorado en actualizar :( pero he estado ocupada y no he tenido tiempo u-u
Ojalá les guste y eso pos kansj ♡

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—Ahm...—YoonGi no podía abrir la puerta del departamento, porque la boca del menor se pegaba a la de él sin dejarle escapatoria.—Déjame... Abrir...—Jimin le tenía firmemente agarrado de la cintura, impidiendo que se aleje.

El mayor sonrió cuando mordió el labio inferior del castaño, liberándose por fin de aquellos labios que no le dejaban escapatoria.

—¡Hyung!

—Lo siento, tú no me soltabas.—Se volteó para poder abrir y entrar a su hogar. Los brazos de Jimin se enredaron alrededor de su cintura, mientras depositaba tiernos besos en su cuello.

—Es que eres tan dulce, Suga-hyung, que no puedo dejar de besarte.—Se burlo el menor.—Eres como el azúcar.—YoonGi le pego en el brazo cuando lo comparo con aquella esencia dulce.

—Idiota. Ahora, suéltame... Quiero quitarme el abrigo.—Se quejó de forma infantil. Jimin le miro sorprendido, era la primera vez que lo veía hacer algo tan tierno. YoonGi no era de las personas que se quejaban infantilmente, pero ahora lo había hecho.—¿Qué?—Preguntó cuando volvió a liberarse por segunda vez.

—Nada.—Se quitó su abrigo y lo dejo junto al de su novio.—Suga.

—Dime.

—¿Tu padre vendrá esta noche?

—No lo creo, ¿por...?—Se quedó pensando un momento.—No.

—¿No, qué?—El menor le observo divertido.

—No, a todo lo que estés pensando.—Movió sus manos en forma de negación.

—Creo que no lo hemos hecho en la cocina, ¿o sí?—Dijo Jimin llevándose la mano a su mentón, en pose pensadora y caminando hasta Suga.

—¡Jimin!—Regañó el mayor con sus mejillas sonrojadas.

—Estoy bromeando, Hyung.—Levantó sus manos en señal de paz y río.

—Eres un...—Suga camino hasta la cocina en busca de un vaso con agua, dejando al menor en la sala de estar.

Idiota.

¿Quién se cree que es?

Aish, realmente este chico...

Revolvió sus cabellos frustrado por la confusión mental que tenía. No entendía, no lograba diferenciar entre las bromas de su novio. ¿Por qué jugaba así con él? Bueno, no es que quisiera hacerlo en cualquier parte de la casa, no...

¿A quien voy a engañar? Si que me gustaría hacerlo en cualquier lugar.

Soltó un suspiro agotador y fue en busca de Jimin.

—Vamos a mi habitación.—Le ordenó.

—¿Qué...?—Suga se colgó de su cuello, besando los labios de Jimin posesivamente. Esta era la primera que estaba tomando el control de toda la situación.