Capitulo 5

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Pasaron unas pocas horas y la primera que se despierta es Betty, está desconcertada ya que no sabe dónde está. Mira a todos lados y se da cuenta que está en la oficina de la presidencia.
En ese momento empieza a recordar todo lo que había sucedido en la noche con su jefe, sus mejillas empiezan a ponerse coloradas.
No puede creer todo lo que hicieron anoche, lo bien que la hizo sentir. Pero sabía que eso sería pasajero porque ella no era el target de él, no tenía ese cuerpo exhuberante que tienen las modelos o las mujeres que don Armando se llevaba a su cama.
Que pasaría ahora luego de la expectacular noche que ambos vivieron, o por lo menos, ella vivió.
No sabía como actuarían ahora, sería eso sí algo incómodo porque con sólo verlo, recordaría todo lo que habían hecho.

Se da vuelta y lo ve dormido plácidamente como un bebé, le da mucha ternura verlo así.
Le pasa su mano lentamente por su pecho, apenas lo roza ya que no desea que se despierte.
Armando la tiene abrazada tan fuerte que casi no se puede mover, ella siente que se derrite allí y que no le importaría morirse si lo hace en sus brazos que siempre le dan tranquilidad.
A los pocos minutos, Armando se despierta y la mira con una sonrisa en la cara.
Armando:" Buenos días Betty, como estás picarona? Cómo pasó la noche? A pesar obviamente de la incomodidad de éste sillón"
Betty:" Bastante bien don Armando, pero mucho más por estar a su lado" las últimas palabras se le salieron sin pensarlo, eso provocó que se sonrojara por completo. Eso hizo darle mucha ternura a Armando y abrazarla más.
Armando:" Que te parece si nos vamos a lavar picarona, podemos hacerlo aquí en mí baño"
Betty:" No me parece bien don Armando, si quiere usted se higieniza en su baño y yo en el de mujeres. Que le parece Dr?"
Armando:" La verdad que no me parece mí picarona, usted merece un mejor lugar para asearse reina. Así que venga a mí baño y no quiero un no por respuesta "
Betty:" Está bien don Armando, no lo voy a contradecir. Al final de cuenta, usted es mí jefe"
Armando:" En éstos momentos yo no soy su jefe Betty, sólo soy un hombre deslumbrado por su belleza y por todo lo que hemos vivido "
Betty:" Eso no es cierto"
Armando;" Si que lo es, usted no se va a imaginar todo lo que significó ésta noche para mí "
Se acerca a ella para darle un beso dulcemente.
Betty y Armando se separan sólo cuando sienten que ya no pueden respirar, es allí que él le dice;
Armando:" Vamos picarona que se nos va a hacer tarde y nos encontrarán así "
Betty:" Ay no, que vergüenza "

Se levantan y van juntos al baño, Betty fue la primera en higuienizarse y luego Armando. Mientras ella se estaba cambiando, él la miraba asombrado y a la vez admirado por el bello cuerpo que tenía. En ese instante, nota que su miembro está otra vez erecto y eso lo tiene asombrado. Si bien él siempre fue muy activo sexualmente, siempre repetía una segunda vez si había un juego previo, ya que eso lo exitaba demasiado.
Pero con Betty no le pasó lo mismo, con tan sólo una caricia ya se prendía como una candela.
Se le acerca por detrás y le afirma su miembro para demostrarle como lo tenía.
Armando:" Mire como me tiene dra Pinzón"
Ésta se pone muy colorada y él la ve por el espejo del baño, cada vez le gusta más verla sonrojandose.
Betty:" Don Armando! Ya es tarde, los empleados van a ingresar dentro de muy poco"
Armando:" Todavía falta picarona, así que quiero mí desayuno " le dice con una sonrisa pícara.
Entonces la besa en el cuello para mientras ir abriéndole las piernas y apoyarla en el lavabo, quedando sus pechos sobre éste.
Betty sentía frío ya que sus senos estaban desnudos en el mármol de ese baño tan bello.
Sintió que Armando le besaba su espalda para luego mojar con gel su cola y penetrarla enseguida fuertemente. Eso hizo que se sobresaltada un poco pero le gustaba mucho.
A Armando le encantaba escuchar como su pubis chocaba contra la cola parada de su Betty y eso lo exitaba demasiado. Empezó a aumentar las embestidas cada vez más y ambos gemian a más no poder.
Armando:" Ay Betty, me vuelve loco. Ahhhh le gusta, dígame si le gusta"
Betty:" Si don Armando, no pare. Siga dr por favor"
Armando:" Ahhh Betty, muévase "
Betty:" Ya no aguanto más, voy a terminar dr "
Armando:" Termine Betty, ahhhhhh"
No terminó de decir eso que sentía como Betty le daba un espasmo enorme que dió a lugar a un tremendo orgasmo. La dió vuelta para luego sentarla arriba del lavabo, colocarse el condón y penetrarla con de una gran embestida.
Aceleró cada vez más, le fascinaba sentir que la vagina de Betty estaba aún más estrecha por el gran orgasmo que tuvo.
Las embestidas eran muy fuertes, haciendo gemir y jadear a ambos, hasta que Armando ya no aguantó más y acabó dentro de ella para luego quedar laxos abrazados por un momento.

A los pocos minutos, se lavaron sus partes íntimas, Armando guardo en su maletín la prueba de esa noche de pasión y esa mañana caliente.
No sabe porque lo hizo, ya que jamás había hecho eso con sus conquistas. Le nació hacerlo y luego de que ambos ya estaban cambiados, fueron a la oficina y Armando pidió a cafetería, que ya estaban allí, dos desayunos a presidencia.
Se sentaron en el escritorio de Armando, él en su silla y Betty en la de enfrente. Platicaban cordialmente como siempre, no parecía que hubiera pasado algo entre ellos dos.
Armando quería saber más sobre ella, así que estuvieron charlando sobre sus infancias, sus gustos y ambos descubrieron que tenían muchas cosas en común. Sobre todo la música, les gustaba mucho el jazz.
Llegó la chica de la cafetería y se dispusieron a desayunar entre risas, se sentían muy a gusto juntos que se habían asombrado mucho.

Luego escucharon como las personas estaban ingresando a sus lugares de trabajo, en ese momento entra a su oficina Patricia Fernández.
Patricia:" Armando pensé que no habías llegado"
Armando:" Uy disculpa Patico que no te informé que llegué temprano para trabajar, ahora ve a la recepción y haz como que trabajas, OÍSTE PELITEÑIDA" le dijo esas dos palabras gritando.
Betty:" Don Armando, se que Patricia es bastante difícil de tratar. Lo sé por experiencia propia, pero no debería gritarle. Así se ganará que doña Marcela se enoje con usted "
Armando:" Es que me desespera Betty, pero tiene razón como siempre" le dice y le coge las manos, eso hace sonreír tímidamente a Betty.
Betty:" Bueno don Armando, me voy a mí oficina tengo que seguir trabajando. Es que sabe, mí jefe es un poquitico neurótico pero un gran jefe"
Armando:" Sólo neurótico? Dígame la verdad "
Betty(sonríe):" Bueno también es despalomado y gritón pero siempre es justo don Armando "
Armando (sonriendo):" Le faltó que también soy excelente amante" le dijo con carita pícara.
Betty:" El mejor doctor, ahora entiendo porque le dicen el tigre de Bogotá y también porque las mujeres que se acuestan con usted, no lo dejan tranquilo y se vuelven locas"
Armando:" Y usted también se volvió loca por mis huesitos Betty, es de esperarse ya que soy irresistible "
Betty:" También vanidoso por lo que veo, bueno me voy a trabajar dr "
Armando:" Antes de irse me daría un beso?"
Betty se acerca y ambos se besan tiernamente hasta que sus besos van aumentando la intensidad, pero deben separarse porque no pueden respirar.
Betty:" Dr que nos pueden ver"
Armando:" Perdón pero no puedo dejar de besarla, discúlpeme por favor "
Betty:" No se preocupe, a mí me encanta pero no es el lugar apropiado don Armando "
Armando:" Eso significa que volveremos a tener éstos encuentros?" Le dice con tono de súplica.
Betty:" No sé cómo lo haré, pero no puedo estar sin usted don Armando "
Armando:" Yo menos, no seguiré con Marcela. Le estoy haciendo daño y no se lo merece, como tampoco me merezco estar con alguien que no amo. Le parecerá una tontería pero lo que vivimos anoche, me dejó claro que no quiero perderlo nunca. Usted aceptaría ser mí novia, obviamente luego de que me separe de Marcela "
Betty:" Es lo que más deseo don Armando "
Se besan nuevamente y se va Betty a su oficina, donde con una bella sonrisa empieza a trabajar.
Lo mismo sucede con Armando, feliz y con una enorme sonrisa, empieza su jornada laboral.



Continuará

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