Capítulo 2.

3 0 0
                                    

Fukuoka.

- Yuuri, de verdad debes de dejar de lastimarte, ¿Que no entiendes? ¡Eres lo unico que me queda y yo a ti... no seas tan egoista!

- ...

- ¡ Y a no se que más hacer Yuuri, van 5 veces... ¡5 maldición!

- ¡ Nadie te pide que te quedes Mari... Largate! No necesito ni mierda de alguno de ustedes.

Mari, una alfa de 25 años, sale llorando, si, una alfa llorando a causa del 5o intento de suicidio de su hermano menor, tambien un alfa, que ahora desdichadamente se encuentra recostado en su cama y vigilado por Pichit y Otabek, sus dos mejores amigos omega y alfa respectivamente.

Yuuri solo ve por la ventana que ahora tiene barrotes, como si fuera una prisión, porque justo asi es como se siente, aprisionado en un cuerpo incompleto, no solo por la pierna que perdio sino por el corazón que murio en aquel pais gelido, victima de aquel fatidico accidente aereo.

Pero no, ese no era Yuuri, hasta hace 6 meses, era un alfa amable, carismatico, inteligente, varonil y aun a escasos días de su boda... acechado por ex amantes, tambien era un coqueto... al menos antes de que aquella pelirroja robara su corazón junto con aquel cafe con vainilla... Mila Babicheva, se conocieron una noche lluviosa y fria en San Petersburgo, el tenia una lesión en su brazo, fue victima de un cruel bache que lo mando de bruces al piso mojado del estacionamiento de una cafeteria, que serviria como primer escena de amor , esa tarde una nueva enfermera corria nerviosa rumbo a su turno, se habia quedado dormida por pasar la noche entre reportes y libros y para despertar se adelanto a tomar el cafe ya pagado por un galante alfa japones, y asi, sin disculparse, corrio olvidando su celular... como un caballero el salio para persuadir a la dama.

Quien termino siendo la doncella en apuros, fue el, para ser socorrido por la chica que dos años despues recibiria un anillo con un bello zafiro que adornaria su mano... Si hubo quien lo atrapara , la misma que habia casi obligado al parroco recordandole como fue ella una voluntaria demasiadas veces en tiempos dificiles para asi volver a robar pero ahora la fecha de su casamiento a alguna o algun atarantado omega con menos suerte o menor poder de persuación.

Banditas para corazones rotosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora