Capítulo 3.

82 10 4
                                    

Me despierto sobresaltada, la luz del sol golpea mi rostro con fuerza, anoche se me olvidó cerrar las cortinas, sólo me dormí como si no hubiese un mañana.

Suena mi móvil, miro la pantalla y veo que es Molly. Seguro querrá que le cuente todo, pero no sé si me parece correcto contar lo que le ha pasado a Ean...

-¡Rose Amanda! Anoche no me escribiste ni llamaste, ya pensaba que Ean te había desvirgado.

Me sonrojo enojada ante lo dicho.

-Buenos días amiga, estoy bien gracias, ¿y tú?

-Bueno vale, perdón es que quiero saberlo todo.

-Y yo quiero saber desde cuando mi amiga es detective. Debes contarme como has contactado con Ean.

-Suelta una carcajada- pues es que tengo mis contactos, señorita Stam.

-Bueno, entonces nos vemos esta tarde, así me cuentas y viceversa.

-Vale, cuidate. Te envío un camión de besos.

-Vale, igual. Chao detective Patterson.

Ríe y cuelga.

Me tiro a la cama con brazos abiertos y con una sonrisa que abraza con júbilo mi rostro. Que feliz me siento.

Pienso en Ean, todo lo que le pasó fue poco después de haberme ido. Yo tenía 9 años recién cumplidos y él faltándole un mes para cumplir 10. Deseo saber más de su pasado, pero me aterra hacerle daño si él recuerda con lujo de detalle todo.

***

Salgo lista y ansiosa para ir a ver a Molly. Mi madre está sentada frente a la piscina fumando un cigarrilo. Aprieto los dientes. Joder, estoy cansada de decirle que no fume, pero lo hace.

-Hija, anoche no te vi llegar. ¿A dónde vas? -espeta mi madre.

-Voy a casa de Molly. -respondo con frialdad.

-Hija, no seas tan dura conmigo... Intento ahogar mis pensamientos con este humo que invade mis pulmones, y logra ahogar todo pensamiento triste mientras lo fumo.

-Vale, como digas, chao.

Y salgo furiosa de casa, sin esperar respuesta alguna de mi madre... Siempre es lo mismo.

Molly vive a 20 minutos de aquí, me iré caminando, me gusta caminar.

Conecto los auriculares al móvil, me los pongo a los oídos y empieza a sonar Take Me To Church, adoro esta canción.

My lover's got humor
She's the giggle at a funeral
Knows everybody's disapproval
I should've worshiped her sooner

Voy cantando en voz baja mientras voy en la calle. Un hombre como de cincuenta años me sonríe de forma un tanto pervertida. Hago una mueca de asco. Nunca me acostaría con ese enfermo. Viejo verde.

La imagen de Ean se cruza en mi mente. ¿Tendría mi primera vez con él? Quizá, no sé... Quizá él ya sea todo un experto y la cosa, y yo me ponga muy tímida. ¿Y si es virgen igual? Lo dudo. Es muy guapo, dudo totalmente de su virginidad, y eso me deprime un tanto.

Mi subconsciente me reprende de forma ágil. No debería de estar pensando en estas cosas.

Llego a casa de Molly y escucho su risa y la de un hombre, no se parece a la risa de su novio Arturo.

Toco el timbre y las risas cesan. Molly me abre la puerta con una sonrisa un poco incómoda.

-Este... -dice nerviosa- No creí que venías tan temprano, creí venías en eso del atardecer ya...

-Bueno, es que tengo una cita con Ean a las 19:00 -digo enojada.

Sale un chico alto, de piel oscura, musculoso y pelón.

-Cariño, ¿Pasa algo? -espeta el que al parecer es afroamericano.

-Y al parecer estás acompañada -le traspaso a Molly con la mirada- bueno, hablamos cuando puedas, no interesa.

-Rosi, puedo explicarlo, no te enojes.

-No me llames Rosi. Hasta luego.

Me giro sobre mis talones y me voy con paso rápido, dejando al afroamericano con expresión confusa y a Molly con el ceño levemente fruncido.

¡Que mierda! Es mi mejor amiga y yo no sabía de la existencia de ese hombre. Pobre Arturo, Molly le va a romper el corazón, él no merece eso, es un gran chico y la valora mucho.

Reprimo esos pensamientos de inmediato. Hoy es un día alegre, no lo voy amargar por nadie.

Llego a casa y miro el reloj. Apenas son las 16:10 y no tengo nada productivo que hacer, es sábado y solo me queda dormir. Programo alarma para las 18:00 y me tiro a esa cama que tanto anhelaba.

***
Mi alarma me sobresalta. Ya son las seis de la tarde. Bajo las escaleras y veo que mamá está entregada a la lectura de un libro, leo de lejos la portada y dice "El Alquimista", me alegro porque está sumamente pendiente a la lectura y no al fumar, al menos por ahora.

Decido no interrumpirle, y subo con cuidado las escaleras, sin hacer ruido. Me meto a la ducha y me baño.

Salgo y me seco el cuerpo y el pelo.

Me pongo ropa interior negra de encaje, unas pantimedias negras y un vestido corto color rosa pastel. Me coloco zapatos tacón alto negros, me rizo un poco el pelo, me pongo un poco de brillo en los labios, tomo mi bolso negro y mi chaqueta beige, y cuando voy bajando los escalones, el timbre suena. Ean ha llegado.

Me pongo nerviosa y mis piernas empiezan a temblar ¡joder, no me traiciones cuerpo! Abro la puerta y lo veo ahí parado, casi boquiabierto. Me recorre con la mirada de pies a cabeza ¿será que me he vestido mal?

-Estás preciosa, Amanda -sus ojos refulgen de amor.

Sube la temperatura en mi cuerpo cuando escucho que me llama así. Joder, no sé que me pasa.

-Tú también estás muy guapo, Ean -digo sonrojada.

Ean

Pero no creo que me vea tan guapo como ella, si tan solo ella se viera con los ojos que yo la veo.

-¿A dónde deseas ir?

-A donde tú quieras... -responde tímida.

-Sabia que dirías eso -ella sonríe- así que, ya tengo un sitio a donde llevarte, te va a encantar seguro.

Ella asiente extrañada pero sonriente. La tomo de la mano y nos encaminamos hasta el auto, le abro la puerta para que suba al asiento de copiloto, doy la vuelta y me subo al coche.

-Y, ¿que tal ha ido tu día? -pregunta ella sonriendo.

-Pues bien, terminaba de instalarme acá, si deseas te llevo mañana a mi piso y almorzamos ahí.

-Vale, entonces mañana iremos -se sonroja.

-¿Y tu día que tal?

Frunce el ceño un poco.

-Pues, tuve un encuentro un tanto incómodo con Molly, y no deseo hablar de ello, pero todo lo demás perfecto.

-Entiendo.

-Y, ¿como se han comunicado Molly y tú para armar la sorpresa? Es que según entiendo, no se conocían... -dice frunciendo el ceño.

-Bueno, es que da la casualidad de que su hermano se ha vuelto mi mejor amigo en la universidad entonces le hablé de ti, y me dijo que su hermana tenía una amiga con la misma descripción y nombre que le di, entonces me enseñó una foto tuya, y confirmé que hablábamos de la misma chica. Me puse en contacto con Molly hace un mes y decidimos dejarlo hasta tu graduación.

-Uau, cuanta casualidad divina todo esto -sonríe- Dios nos ha unido de nuevo...

-Sí, en efecto -me acerco y me da un casto beso, dejándome deseando más.
--------
Wolis preciosuras! Espero les haya gustado ñ.ñ creo que en el sgt capítulo habrá salseo ( ͡° ͜ʖ ͡°) okya

Besitos y abrazotes!

Celina.-

Primer, único y eterno amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora