Spreen se había despertado, agarró a pelusa y fueron al local.
-dioss, me duele toda la espalda, veni pelusa vamos a mi oficina- dejó a su gata en el suelo y los dos caminaron hasta llegar a la oficina de spreen.
-bueno, voy a llamar a mariana para que venga y así atiende, porque yo voy a hablar con carre. Quédate acá si?- dijo el híbrido mientras acariciaba a su gata.
-miauu- "bueno👍"
Prendió su celular y buscó el contacto de mariana, quién contestó rápidamente.
-Mariana, vení acá ahora, me tengo que ir y no voy a dejar el local solo.
-ta bien jfe, ya llegó, deme 10 minutos
-bueno dale
Colgó y esperó los diez minutos.
-ya llegué jefe!!- dijo exhausto, había corrido para poder llegar bien, no quería que spreen se pusiera a gritar.
-fueron los diez minutos más eternos de mi puta vida... chau mariana, te dejó el local a cargo eh- dicho esto se fue a buscar a carre.
Para su suerte el más bajo estaba en su casa, con quackity y luzu.
-... podemos hablar nosotros dos solos?- dijo viendo a los otros dos.
-sisi, chicos pueden ir a cuidar a barry mientras spreen y yo hablamos?
-obvio mi rey, ven luzu vamos- agarró la mano del castaño y se fueron arriba.
Spreen no dejaba de mirar mal a luzu.
-bueno, para qué me necesitas amigo?
-ah si, carre ahora te voy a contar algo y necesito tu sincera opinión, sino te reviento la casa- dijo spreen, carre asintió y le dijo que se siente para poder hablar más cómodamente.
-mira, yo..yo últimamente estoy sintiendo algo raro con alguien, cada que estoy con él me siento feliz, raro y nervioso. Le dije lo mismo a pelusa y me dijo que hable con vos- carre estaba evitando reírse, le parecía gracioso y loco que hablara con su gata, aunque el aveces hablaba con barry cuando estaba aburrido y se ponía a bailar con él.
-oh...y quién es ese alguien?- preguntó, spreen estaba más que rojo.
-es...el boludito de quackity- susurró.
-qué??
-que es el boludo de quackity!!- dijo para después tapar su boca.
-no amigo sos un pelotudo, si quackity no te escuchó tenes a dios de tu lado- dijo carre para después reirse.
-qué yo qué pendejo!?- los dos se quedaron helados al escuchar esa voz.
-q-que? No hablabamos d-de vos!- respondió carre, mientras spreen asentía rápidamente.
-ayy no se hagan, díganme, por qué andaban hablando de mí??- se acercó a los dos argentinos.
-bueno, spreen perdona pero le voy a contar...lo que pasa es que spreen te odia- digo no! No te odia lo que pasa es que...- spreen lo miraba con ganas de matarlo, cada que carre hablaba la cagaba más.
-no es nada quackity, después te cuento- dijo spreen, haciendo que quackity se queje, para después irse al baño.
-de verdad que no podéis ser tan idiotas, yo actuó mil veces mejor- dijo con una sonrisa el español.
-tsk, cerra el orto vos, español de mierda- dijo spreen.
-tú no me dices que hacer, además, eres demasiado obvio como para darse cuenta de que estás enamorado, no es así lo que habías dicho carre?- spreen volteó a ver a su mejor amigo, quién estaba demasiado nervioso.
