Más Gloria

13 0 0
                                    

Y como si ayer no fuera suficiente gloria hoy seguimos en la misma linea. juyendo después de cabecear un rato en la oficina pegada de una pared y sentada en una silla llego el amanecer y la hora de dar unas vueltas en el hotel a las 5 am., luego digitar un par de cosas que quedaron pendientes. En eso llego la hora de alejarme de aquel lugar al que no regresaría hasta el próximo martes. Lo cual amaba, porque en verdad eran como unas minis vacaciones.

Llegando a casa con todo el sueño del mundo y mucho mas, después que casi el chófer me lleva de regreso de donde salí, por quedarme dormida.... jajaja. Pero gracias a Dios abrí los ojos justo a tiempo. Ya en casa prepare todo para dormir, con la intención de levantarme en un par de horas, para ir a la iglesia a ver si me tocaba un poco mas de lo de anoche, pero que creen? no pude ni abrir bien los ojos cuando ya estaba durmiendo otra vez.

Entre medio de mi sueño y mis almohadas (duermo con varias, colocadas en todas partes), desperté por el timbre de mi celular, era un cliente que quería venir a buscar algo que necesitaba y yo muy emocionada le dije venga señor, no sin antes afinar un poco la voz para que no notara que estaba durmiendo (igual parece que lo noto, porque pidió disculpas por despertarme... ufff). Este apareció una hora mas tarde y yo muy emocionada le vendí un montón de cosas, en realidad me hizo la semana. En eso mamí llego y le vendimos un par de cosas mas y hasta un regalo de dimos por su gran compra.

Al poco rato le escribí a Marí, que algo grande acontecería en su iglesia y que no me lo perdería. Invite Andrea, pero ella con sus pies dentro de una batea nos dijo que noooo, que iría a la suya (si, estas tres mosqueteras creían fervientemente en un Dios que restaura, liberta y es hacedor de milagros).

Después de recibir a varios clientes mas que esperaban en turnos por ser atendidos y llegada la visita de la gerente del negocio en esta parte de mi país quien me motivaba para que decidiera ser supervisora al estilo de mamí. Dije ok, pero me cagaba del susto. No sabia como mantenerme, ni como hacerlo, todo el tiempo lo único que he hecho es vender. Así que solo moví mi cabeza y mire a mi madre, como diciéndole, yo corro pero tu me guiaras. Ella sin mutarse entendió de inmediato y comento algo al respecto.

Después de comer, me recosté un poco, no era que había comido tanto que digamos, pero lo que fue me sostuvo hasta que regrese a casa bien entrada la noche.

Ya a las 5 pm. estaba casi lista para salir a buscar a Marí para irnos a su iglesia, pero antes se me rompieron mis hermosas sandalias que hacia un año me había pagado ella. Saben que me causo, que era la segunda vez que se me rompían unos zapatos de camino a la iglesia de ella.

Nada, hermosas nosotras proseguimos al templo, donde al inicio todo era frió y desolado, como que me cuestionaba mirando a los cielos, pero y aquí que pasa, esta no es la iglesia que recuerdo (tenia casi un año que no iba allá). Las alabanzas, los coros, todo estaba como muerto. Después de reclamar y olvidarme de lo que acontecía, empezó a descender un pequeño destello de luz del mismo cielo, y fue como la puerta que se abrió para que la gloria de Dios empezara a descender. Y cuando menos lo pensamos ya lo que pasaba era innombrable, porque Dios y todos sus ángeles se habían hecho cargo del lugar, y hasta el que no quería tenia que meterse bajo la Shekina de Dios.

Terminado el servicio nos fuimos a casa de Marí a tertuliar un poco, y entre una cosa y otra recibí la invitación para ir a predicar el próximo martes en dicha iglesia. Yo titubeante y explicándoles los motivos por los que tal vez no iría les dije un medio si. luego de casi una hora allí, decidí irme a mi casa a ponerme al día con el wassapeo el cual andaba muy abandonado por mi durante todo el día, después debía poner al día un poco los escritos para ti amado diario, hasta caer rendida.


¡Dulces sueños querido diario!

EL DIARIO DE ISA

El Diario de IsaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora