FM 6.13 °•°•°•°•[[Yoonmin]]°•°•°•°

Tu sabes, Yo sé.

Lo mas importante para Jimin ahora, era su salud mental. Estaba decidido a preocuparse por si mismo. No es que ya no lo hiciera, con un padre ausente, una madrastra y hermanastra fastidiosa, con su madre fallecida hace muchos años ya, el era muy autosuficiente. Pero no imaginaba que llegaria a su vida tal persona. A descompaginar mas su desastre de vida. Como todo, al principio todo brilla, pero luego empiezas a notar los detalles y el brillo se vuelve oscuro.

Jimin podia ver sus pequeñas marcas en su piel, no le dolian. Eran parte de algo que el aceptó, pero enamorarse no era parte del trato y aunque sentia fuerte por Min Suga, ese tipo no valoraba sus sentimientos. En 3 semanas terminaria su contrato, y el estaria libre de deudas. O al menos eso creia.

-Muchas gracias...- dijo al mesero que le trajo su comida a la mesa. Habia hecho una parada en una gasolinera y decidió comer algo caliente. -Esto se ve sabroso, hace un tiempo que no como tan a gusto...- dijo. Ultimamente hablaba con el mismo.

Un par de kilometros adelante, en su destino, se encontraba el lugar donde deberia preparar su tienda de campaña. Comenzó a bajar las cosas de su auto, armo su tienda. Preparó un gugar para cocinar mas tarde. Preparó un café y se sentó frente al lago. Observó por largo tiempo y se descubrió llorando.

-Mamá... Te extraño mucho. Estoy seguro que no estas orgulloso de mi. Estube haciendo cosas malas, pero ayudame. Quiero saber que pasa conmigo...- sollozaba mientras sostenia la foto de su madre que siempre llevaba a todos lados. -Estoy intentandolo, me alejé de ese lugar hostil, y me siento tan solo. Al menos esa mujer...- refiriendose a la madrastra. -...y la mocosa estaban a mi alrededor...- se rió de si mismo al pensar que era algo bueno. -Que tonto... Pero bueno. Pensé que junto a el, encontraria lo que llamabas felicidad...-

Lloró un rato mas y volvio a su tienda. Cocinó un sobre de ramen y luego se metió a la tienda. Mañana seria un nuevo dia.

Cuando abrio los ojos y salió, pudo ver los hermoso que era amanecer en ese lugar. Nunca lo habia intentado. Pero ahora entendia por que su padre solia ir de campaña con sus amigos cuando apenas el era un niño. Extrañaba que le contara sus aventuras.

-Aaah...- suspiró. -Bueno, creo que deberia bajar al pueblo por algunas cosas para el almuerzo...- se preparó y comenzó a caminar por las calles cercanas. Poco mas de 25 minutos encontró las primeras tiendas del pueblo. Olfateaba el aroma de las especias y pudo notar que las personas se amontonaban para comprar pescado fresco. -Oiga, es realmente fresco?- le dijo a un hombre de cabello largo que estaba ahí...-

-Claro que si! La tia Jun siempre tiene sus productos frescos...- dijo este viendolo. -No eres de por aqui...- dijo viendolo.

-Ah! No, acabo de llegar de Seul. Estoy teniendo unas mini vacasiones.-

-Pues, bienvenido. Soy Jihoon, Kim Jihoon...-

-Park Jimin...- el chico le sonrio amablemente. -Tu vives aqui?-

-Oh, no! Yo solo vengo en temporada a ayudar a mi tia...- dijo y cuando vio a la mujer intentando levantar algo el solo corrió y tomo las cosas. -Tia Jun, dejame encargarme de eso...-

-Ya dejame en paz! Crees que estoy tan vieja como para no ocuparme de eso?- dijo golpeando al hombre.

Jimin se rió de eso y se quedo a comprar algunas cosas.

-Llevaré estas... Y estas...- elegia algunas almejas y abadejos. Tambien busco pulpos pero no los encontró. -Pulpo no tiene?-

-Los tengo en el otro puesto... Jihoon, lleva al chico hasta allá y dale 2 pulpos... Iran por mi cuenta...-

-Claro!- respondio.

-No, como cree. Voy a pagarlo...-

-Estas rechazando un regalo de una anciana muchacho?- Jimin sonrió y ella tambien lo hizo...-

-Gracias Tia Jun...- dijo Jimin y se reverencio.

-Ven, es por aqui...- Jihoon lo guió. -Le caiste bien...- dijo llevando las bolsas de Jimin.

-Por que lo dices?-

-A la tia Jun no le agradan los citadinos, de hecho los hecha pronto. Pero por alguna razon a ti te regalo 2 de sus pulpos, y pobre de ti que no vuelvas a aceptar un regalo de su parte...- dijo sonriendo.

Jimin imaginó el gesto de la mujer con algo que recordaba de su madre. Nunca podia recibir un NO cuando se trataba de alimentar a su pequeño hijo.

-Esta bien. Concervaré el consejo...-

-Entonces... Cuanto tiempo te quedas?-

-Una semana... Luego debo regresar a Seul. Un amigo me conseguirá un nuevo puesto de trabajo...-

-Que pasó con el anterior trabajo?...- preguntó y Jimin cambió su semblante. -Oh! Disculpa, creo que no debi preguntar eso...-

-No, esta bien. Se trataba de un jefe algo estresante. Ya sabes, traeme esto, lleva aquello...-

-Entiendo... Bueno... Espero lo pases bien. Estas en la colina In verdad?-

-Asi es. Ven cuando quieras, te invitaré un café, hago el mejor café instantaneo...-

-De verdad? No me lo perderia por nada. Aqui tienes...- le dio los pulpos y regresó a ayudar a otras ansianas. -Nos vemos luego!- dijo saludandolo.

Jimin se sintió comodo con el y luego ya con mejor humor volvió a su tienda de campaña. Comenzóa cocinar y recibió una llamada desconocida.

-Diga?-

-Jimin soy yo... Escuchame no me cort...-

-Mierda! Estaba de tan buen humor...- dijo.

Suga estaba intentando comunicarse, pero antes de que diga algo le cortó. Aun no terminaba de cocinar y se sintió enojado, pateó la caserola y volcó el caldo. Aun no ponia las almejas ni pulpos. Pero ya no tenia caldo.

-Parece que ese pulpo no va a hervir...- dijo alguien detras de el.

-Jihoon... Que...-

-Todos terminaron de trabajar, y como tengo tiempo libre, vine por ese café instantaneo...-

Jimin sonrio para no mostrarse tenso por la llamada de Suga y lo invito a pasar.

-Sientate por favor. Disculpa por este desastre...-

-Debe haber sido alguien muy estresante, y la culpa lo pagó el sabroso caldo. Olia bien de hecho...-

-Ahora tendré que hacer el pulpo frito... Que dices?-

-Solo si me dejas hacerlo por ti. Soy muy bueno cocinando pulpo frito...-

-De acuerdo...-

-Ya verás!-

Suga fue varias veces al departamento de Jimin. Queria disculparse una vez mas. Toco timbre muchas veces. Volvio por la noche y al dia siguiente, pero Jimin no atendia ni sus llamadas ni la puerta.

-Disculpe...- dijo el guardia del edificio. -Note que siempre vuelve a la misma puerta. El chico que vive ahi está de vacasiones...-

-Eh? Y sabe a donde fue?- pregunto.

-La verdad no, pero supongo que a alguna montaña, vi que compró muchas cosas de acampe, incluso botas para andar. Seguro debe estar en el monte Namsang. Es un buen lugar para despejarse...- dijo muy animado el hombre.

-Gracias...- dijo y se marchó. Se quedó pensando en lo ultimo que le dijo ese guardia. "...un buen lugar para despejarse..." -Despejarse de que?, De mi?- negó y se subió al auto. Algo cansado de no poder dormir se ducho y se recostó. Dio mil vueltas en su cama y buscó sonmiferos para dormirse, los observó un momento. -Que crees Jimin... Aqui me tienes, todo estresado, no duermo, estoy tras tu lindo rostro... Y por que?... Haha, por que decidiste ignorarme una vez mas...-

30 minutos despues conducia al monte Namsang, golpeaba ansioso el volante mientras se dirigia hacia su hermoso sumiso.