Tentacle Locker/ Dekubowl/ Omegaverse

Chapter 6

— ¿Cómo puedes tener el cuerpo ideal para un Omega masculino, Izuku? Te tengo envidia. Tienes las medidas perfectas.

   El peliverde se sonrojo ante tal comentario que le dijo la modista de la familia Yaoyorozu. La madre de su amiga lo había invitado a un día de compras.

   A lo lejos de aquella amitad extraña, una Omega juzgaba su propio cuerpo, no tenía sobrepeso, era delgada. Recibía halagos de su cuerpo de vez en cuando, pero a ella nunca le había gustado su propio cuerpo. Negó con la cabeza y dejo aquellos pensamientos, debía de seguir adelante con su vida. Salió de la tienda saludando a la empleada que estaba en el frente.

   La vida de esa Omega no era ni buena ni mala, solo una vida. Ella había sufrido pero decidía ignorar su realidad, nunca tuvo fuerzas para actuar en contra de quienes le hicieron daño.

   Caminando recordó a la amistad que vio en aquella tienda, desearía tener una así. Nego otra vez para despejar esas ideas y siguió su camino. Su cobardía y miedo la trajeron hacía aquí y ella aceptaba eso. Prefiriendo ignorar todo a su alrededor para tratar de no hacerse más daño. Disociar y alejarse de los demás era su forma de rechazar su realidad, en donde lamentablemente abusaron de ella a corta edad.

  Mientras tanto Kumiko contemplaba la belleza del menor. Para ella, el pecoso era algo inalcanzable.

   El día de compras había terminado cerca de las 7pm. Izuku estaba exhausto, creía que no podría dar un paso más. Pero en cuanto llego a su residencia, grata fue su sorpresa ver el lío que ocasionaron la gran parte de sus compañeros. Decidió no lidirar con ello e irse a dormir sin comer algo.

   A la mañana siguiente, se despertó temprano e hizo un desayuno decente para todos sus compañeros. Ellos estaban encantados con su comida de mañana.

   El día transcurrió normal, ahora el tenía una nueva vida donde los alfas y algunos betas lo encerraban y hacían lo que ellos querían con su cuerpo. Hasta había veces que apenas salía de un lugar y ya lo agarraba otro. Lo iban a volver un adicto.

  En la tarde no tuvieron clases, por lo que aprovecho para pasar una tarde con sus amigas.

— Zuzu, tu piel es muy suave, ya veo porque tienes a tantos chicos a tus pies. — Mina habló con entusiasmo, realmente la piel de su amigo era suave.

— No es para tanto, pero bueno... es hora de hablar de cosas serías chicas. — Su cara reflejaba su seriedad.

— Tienes razón, Izuku. Debemos de hablar de ESO. — La voz de Ochako sonaba muy sería. Las demás solo asintieron.

   El ambiente en la habitación se volvió serio, se miraban los uno a los otros. Hasta que Momo habló.

— Mi padre sigue diciendo lo mismo, una y otra y otra vez.

— Lo suponía, es igual que al resto de Alfas. — Algo que Izuku iba a admitir y gritar con todas sus fuerzas es que los Alfas siempre buscan algo de él, usualmente para tener encuentros carnales.

— Pero, ¿qué hacemos? Necesitamos esa cantidad urgentemente. — Toru estaba por entrar en un ataque de nervios.

— Lo sabemos, pero no podemos entregarle al padre Yaomomo a nuestro Midoriya en bandeja de plata. Debemos de pensar otra manera. — Jiro estaba totalmente en contra de dejar a Izuku con el padre de su novia por 5 segundos.

— ¿Y qué hay de mi madre? — Momo había encontrado una solución. — A mi madre siempre le gusta ayudar y más si es ayudar a quiénes lo necesitan. Tal vez y solo tal vez, ella pueda darnos lo que necesitamos.

— ¿Cómo que "tal vez"? — Tsuyu, quien había permanecido callada, preguntó aquello. — No se supone que tu madre, además de ser modelo, ¿no maneja una empresa multinacional?