Entre nosotras: ¿aún hay algo de amor? (Juliantina AU)- Adaptación

11.- La despedida

POV Valentina

Aeropuerto Benjamín Matienzo – Tucumán, Argentina...

Domingo 15 de diciembre de 2019, al mediodía...

Anda Valen, ve corriendo. Nosotras te alcanzamos luego. Me decía Taylor y yo prácticamente me había lanzado del auto, nunca me había sentido tan religiosa como en este momento, que rogaba que Juliana siguiera aquí en Tucumán. La distancia de la capital al aeropuerto eran mínimo 40 minutos y ya se acercaban las 14hs.

Sentí que alguien tiraba de mi brazo de forma brusca y de inmediato me di la media vuelta y era Nayeli que me miraba furiosa:

¿Qué haces aquí?, ¿vienes a seguir jodiéndole la vida? Sus ojos estaban enfundados en un rojo ardiente, su cuerpo estaba tenso y tenía toda la intención de querer golpearme y no la culpaba por ello, yo también quería hacerlo.

No tengo que darte ningún tipo de explicaciones a ti, se las debo a una persona y esa es Juliana. Deja de jugar a ser su abogaba defensora porque no lo necesita. Estaba más rabiosa aun, me estaba quitando tiempo valioso para ir al encuentro de Juliana.

Tú no vas a ir a ningún lado, eres la última persona a quien quiere ver. Ya la dañaste lo suficiente como para que sigas aquí. Eres una perra maldita que solo piensa en sí misma y mereces todo el odio que ella siente por ti, todavía me cuesta creer que alguna vez ella puso sus ojos en ti. Sus palabras golpearon como el infierno. Pero no me iba a desenfocar de lo que realmente me importaba, hoy todo era sobre Juliana, tenía que verla, aunque sea por última vez.

Tú puedes pensar lo que quieras de mí, no me interesas. Siempre supe que la querías más allá que una buena amiga y nunca vas a admitir tu derrota, incluso después de tantos años, siempre me odiaste y ahora lo dejas más claro aún. No te lo voy a dejar fácil con Juliana, nunca Nayeli. Con tu permiso, solo necesito hablar con una persona y esa no eres tú. Me estaba por ir cuando prácticamente ejerció presión en mi brazo y no vi venir la bofetada que me había propinado con todas sus fuerzas, comencé a sobarme de forma lenta, dolía tantísimo.

Te mereces esto y más, no voy a perderla, esta vez no. Sus ojos estaban inyectados de odio, bronca y rencor. Sin duda esta no era Nayeli, o por lo menos no la que había conocido alguna vez.

En ese instante llegaban a toda prisa Taylor y Francesca, que me miraban preocupadas. Habían notado la discusión y al instante sus ojos se posaron sobre mi mejilla colorada:

¿Ey tu pero que te pasa?, ¿estás loca? Le decía Francesca empujando a una Nayeli desconcertada. Real que antes había parecido como poseída.

¡Esta pelea no es tuya, no te adjudiques algo en lo cual no tienes nada que ver! Francesca estaba sacada y Taylor solo acariciaba mi mejilla.

Yo me meto todo lo que se me da la gana, Juliana me importa y esta basura va a pagar todo lo que le está haciendo sufrir. No toleraba un segundo más aquí, ya no quería seguir perdiendo el tiempo y me fui corriendo directo a la puerta giratoria que indicaba la entrada al recinto. Y muy lejano se escuchaban gritos y reproches provenientes de la escena que estaba montando Nayeli, digna de una telenovela de bajo presupuesto. Y no iba a seguir siendo participe de eso, yo no era así. Nunca le habría levantado la mano.

Mi mirada se posaba en cada rincón, lo bueno de este sitio es que solo tenía un piso y no era muy espacioso. Estaba desesperada, casi al borde del colapso, a lo lejos había visto una cara familiar y pude respirar un poco más aliviada. Estaban Charlie y Nick, abrazando a Juliana conjuntamente. Mis pies tomaron vida propia y sin pensarlo me fui acercando cada vez más y más a ellos.

El único que se había percatado de mi presencia había sido Charlie, hicimos contacto visual, su miraba era indescifrable, no podía leer en ella lo que trataba de decirme, solamente me hizo una señal para que "interrumpiera la escena":

¿Juls?. Fue lo único que me salió sin titubear, ni un segundo había pasado y ella fue asomando su cabeza, ya que la contextura de Nick no le permitía verme.

¿Tú?, ¡PERO QUE DEMONIOS! Me decía Nick más sorprendido que el resto por mi inoportuna irrupción.

Valentina, ¿qué es lo que quieres? ¿No te fue suficiente la humillación de anoche? Su voz era impasible, demostraba un inmenso rencor y mi corazón dolía a cada microsegundo.

¿Podemos hablar un segundo? Casi que le suplicaba con solo mirarla.

No Valentina ella no va a hablar contigo ni ahora ni nunca. Me respondía Nick, fulminándome.

Nick anda, deja que hablen, ven conmigo. Vamos a comprarle un agua mineral a July. Charlie era neutral, siempre nos habíamos llevado bien, tengo gratos recuerdos de algunas juntadas compartidas cuando éramos un cuarteto inseparable.

¿Tú quieres hablar con ella July? Le preguntaba a una estática pelinegra, que no omitía palabra y solo asentía.

Voy a estar en el kiosco, cualquier cosa solo grita y estoy aquí contigo. ¡Te amo princesa! Y le dio un sonoro beso en su frente y ambos se marcharon sin siquiera mirarme.

Tu dirás Valentina. Sonaba cortante y escueta, no muy diferente que en los mensajes.

Yo emm, perdóname. Por favor perdóname, no tengo palabras ni como excusarme porque de verdad lo siento con todo mi corazón. Quise agarrar su mano, pero logro esquivarme y sin darme cuenta la había apoyado en mi mejilla maltrecha. Sentir su toque una vez más se sentía jodidamente increíble, era tan suave.

¿Qué te paso? Sonaba preocupada y genuina.

Nada no te preocupes de verdad, un accidente casero. Y vi que sus ojos posaron sobre mi anillo y quito su mano de inmediato, y la ausencia de su toque me estaba costando un mundo.

No hay nada que perdonar Valentina, no te preocupes. Puedes ir tranquila a vivir tu vida y yo seguir con la mía siendo una "mujerzuela". ¡¡Oh!! Claro es una buena definición hacia mi persona, no podría ser más acertada con mi estilo de vida, según la recatada señorita Valentina "Perfecta" Carvajal, próxima a ser una señora. Te mereces ser feliz Valentina y en buena hora que nos hayamos separado, tú y yo nunca hubiéramos funcionado. Quería morirme, yo había provocado todo este dolor en ella.

No, no, de verdad no es lo que pienso de ti. Estaba enojada, yo lo siento tanto Juls, perdóname por arruinarnos. Por decir palabras que te lastimaron. Por herir tus sentimientos, los de tu hija y por hablar de tu mamá sin siquiera saber lo que estaba pasando realmente...ella solo poso un dedo en mis labios y me hizo callar de inmediato.

No vas a volver a lastimarme Valentina y espero que esta vez sea la última que nos vemos cara a cara, porque tú y yo estamos mejor lejos de la otra. Todo el amor que alguna vez sentí por ti se esfumo, porque así tú lo quisiste. Llegue a un punto de mi vida donde tenerte a ti en ella no es lo que quiero. Tú me destruiste de muchas maneras, pero lo bueno de esto es que aprendí a amarme a mí primero. Necesito sumar y que me sumen Valentina y tú no haces ni lo uno ni lo otro. Hasta aquí llegue contigo. Que tengas buena vida y un feliz matrimonio y esto si es una despedida definitiva. Me había dejado sin palabras, la había roto y no quedaba ni un resquicio de algún tipo de sentimientos de Juliana hacia mi persona, esta vez la había perdido para siempre.

Se fue lo más lejos posible y en mi campo de visión malditamente borrosa, solo la vi acercarse a Nayeli que se miraba triunfante y ambas juntaron sus labios en un pequeño beso y mi mundo se había venido abajo completamente.

Taylor me abrazo desde la espalda y solo el llanto estaba siendo mi mejor amigo justo ahora. "No habría nunca más un tú y yo hasta viejitas"...

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By mambajeed