𝐒𝐓𝐀𝐘 ══ Leandro Paredes

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MAIALEN ORTIZ ⎗ ⦗the night goes on⦘

Le pagué al señor que estaba esperando a que vuelva de la nube de pedo en la que me dejó Lean. Él cual de hecho, seguía acá, agarrándome del antebrazo.
Me estiro para agarrar el baso de plástico he irme de ahí rápido, porque lo último que quería era cruzarme con él.

━Hey, banca un cacho‐dijo atrás mio, volviéndome a tener el brazo-¿A donde vas?.-

━Por donde vine-reí incomoda, intentando sonar lo más normal y que no note mis nervios-¿Me soltas?.-

━Boluda, estoy acá-se acerca para no tener que gritar tanto-Podes no hacer que no pasa nada.-

La re puta madre, ¿dónde está Luciana ahora? Seguramente me diría que corra y salga del país, no se algo, ella me ayudaría en esta situación tan incomoda.

━¿Podemos... No se, hablar?-volvió a hablar él

━Mmm-lo miré con cara de que me ponía en un compromiso-La verdad es que estoy con mis amigos, no los quiero dejar solos.-mentí.-

━Un rato nomas-insistió de nuevo.-

Y la verdad es que quería irme con él a la parte que el quisiera, cuando él quiera, pero la situación me estaba matando, ayuda Luciana, ¿Dios, estás?
Dudosa le seguí negando con la cabeza para que pare de insistir. Creo que Leandro sabía que estaba callando de nuevo en su labia

Pero llegó mi ángel de la guarda

━¿Qué pasa acá?-agarró mi brazo Lucca.-¿Te está molestando este gato?.-

━No, no, tranqui igual-me quité de su lado, poniéndome casi en medio para que no se ponga más tensa la situación.-

━Bueno, vamos-volvió a hablar Lucca.-

━Toca pa'lla, que está conmigo ahora-dijo Lean haciendo montoncito.-

Antes de lo esperado, los dos ya se estaban encarando, como si en cualquier momento la fina línea de paciencia que les quedaba pudiera romperse con tan solo respirar.
Al toque alejé a Lucca, agradeciéndole por intentar ayudar, pero que yo podía sola y que conocía al otro pelotudo. Lucca subió las escaleras del VIP pateando, sintiéndose un poco humillado por no decirle de más al de mechas rubias.
Mientras tanto, Lean y yo íbamos saliendo del boliche, en direccion a donde tenía estacionado su auto. Quedándonos ahí apollados.

Ninguno de los dos daba el primer paso para hablar, todo muy incómodo. No sabía sí quería reír de la incomodidad o llorar de tenerlo en frente después de años.

━¿Te pinta ir a dar una vuelta?-Preguntó.

[...]

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