Capitulo 2: El número uno, Part 2

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Capítulo 2: El número uno, Part 2

Los bomberos con la ayuda de héroes como, Mosquito, Fastpass y Toolshed, ayudaban a reducir las intensas llamas amenazando con envolver por completo toda la ciudad. Por suerte, pudieron controlar la ferocidad de estas con los grandes chorros de agua que caían desde el cielo por parte de los helicópteros que eran dirigidos por HumanKite. Esto ayudó a disminuir el nivel de daño hacia las casas y los negocios de los habitantes que vitoreaban las acciones de los superhéroes a una distancia alejada.

En las calles todavía se podía ver a policías despertando a las pocas personas que se encontraban escapando del fuego, algunas de ellas heridas siendo ayudadas por los paramédicos, esto fue el caso de Call Girl. La chica llevaba todavía en su hombro al Coon hasta que una paramédica se acercó a ayudarla llevando al regordete héroe hacia una camilla para tratar sus heridas. Call Girl se alejó del lugar cuando vio que el Coon estaba siendo tratado. La heroína sacó varios dispositivos que portaba para hacer uso de su poder, y tratar de localizar a una persona en particular esperando que se encontrara cerca. 

En otro punto del pueblo, se había formado una reciente pila de robots destruidos que tal parece iría en aumento. SuperGuy continuaba dando varios golpes sin ningún problema a las máquinas de Caos, pero cada golpe que daba el héroe se volvía más "suave" que el anterior. Quizás por las múltiples fotografías que le tomaban por cada mínima acción que hacía, o quizás por el ferviente calor se hacía más intenso provocando la irritabilidad del joven chico junto con su nula concentración en el combate.

—¡Cómo pueden ver televidentes!—dijo un reportero que sabrá de dónde salió. Señalando al héroe, quien al verlos les hizo su mítica seña ofensiva ante la cámara—. ¡Tal parece que SuperGuy se encuentra en aprietos a nada de ser derrotado por las máquinas del vil Caos!

—¡Hola público de CNN, soy yo de nuevo, Aaron Brown! –—exclamó el conocido reportero con una ferviente sonrisa cambiando su semblante cuando escuchó lo dicho por su competencia—. Diciéndoles que no presten atención a la palabrería barata de ese inepto. ¡Claramente habla pura mierda!

Los camarógrafos de ambos reporteros sudaron frío mientras se miraban entre sí con miedo apartando sus cámaras de ellos.

—¡¿A quién llamas inepto, imbécil?! —refuto encabronado el otro periodista dándole un empujón al que lo insultó.

—¡Al inepto que dice mierdas de nuestros héroes! —respondió el periodista de CNN devolviéndole el empujón iniciando una pelea entre ambos a pesar de que no era el momento—. ¿Crees que no me di cuenta para que canal de chismes trabajas?

Por fortuna ambos camarógrafos se encontraban grabando la pelea entre SuperGuy y las máquinas ignorando lo que hacían sus colegas fuera de cámaras.

Mediante el lente de la cámara se podía notar a un SuperGuy cansado a causa de los constantes flashes dirigidos a él que lo dejaban ciego por unos segundos. Sumándole el sofocante calor que hacía cada vez más, y que cada vez que derrotaba a un grupo entero de robots aparecía otro nuevo. Si no fuera peor, la reciente trifulca de esos imbéciles periodistas no le ayudaba en nada aumentando cada vez más su malestar al tener que soportar todo eso a sus cortos 17 años, y si seguía así, mandaría a todos a la mierda.

—¡¿Pueden callarse de una puta vez?! —grito SuperGuy con una mirada fulminante a los reporteros que dejaron de pelear al escucharlo. Y luego, centrar su vista hacia los fotógrafos que no dejaban ni por un segundo tomarle fotos—. ¡¿Y ustedes dejen de apuntarme con esas cosas a mi jodido rostro?!

El lugar se quedó en silencio después de las demandas de SuperGuy que no sirvieron de nada, porque los fotógrafos volvieron hacer su trabajo al instante al ver el rostro de incredulidad del héroe. Para ese punto, SuperGuy estaba pensando en cambiarse de bando o dejarles todo el trabajo a sus compañeros mientras él se iba, las dos opciones sonaban tentadoras. Lastima que tuvo que salir de sus pensamientos, cuando una voz un tanto infantil resonó por todo el lugar, que apareció con un gigante robot a través de las llamas siendo manejado por el mismísimo Profesor Caos, acompañado de un puñado de sus estúpidas máquinas que se dirigían hacia SuperGuy.

SuperGuy | Creek | SPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora