G I A N N A J H A L E S S I
La blanca tela se siente suave entre mis dedos.
El algodón que hemos escogido es un sueño contra la piel, y lo confirmo cuando se amolda con facilidad alrededor de la figura del maniquí. Monique, mi asistente personal, sonríe mientras continúa pasándome las agujas y los alfileres para conectar las partes de la tela que necesitan el resto de las perlas. Una por una son cosidas para crear el específico patrón que dará la ilusión de una mariposa. Colocar una en el lugar incorrecto causará que tengamos que volver a empezar desde cero con otra tela completamente nueva. Así que me limpio el sudor de la frente, me subo las mangas del overol de trabajo, y continúo poniendo las perlas en el espacio marcado por las agujas una por una.
Siento los ojos de mi madre carcomiendo mi cuerpo de arriba a abajo. No me gusta que me observen trabajar ya que eso solo me hace dudar del diseño, pero ya que es mi mamá, no puedo pedirle que se vaya. Al ser quien da el visto bueno a todos los diseños que saldrán en la nueva colección de verano, tiene que admirar el trabajo de todas las costureras para que ni un solo detalle esté fuera de lugar.
Le agradezco a Monique en voz baja cuando me ofrece un vaso de agua.
Cuando fui a la universidad para estudiar diseño de modas, no pensé que terminaría con mi madre vigilándome como un halcón durante mis creaciones. Ahora que es mi jefa, no me queda más que obedecer durante las horas de trabajo. Aunque me desquito un poco en la casa al comentarle que uno que otro de sus diseños no es tan fácil de hacer como lo propone durante las juntas antes de cada lanzamiento.
La colección de verano para los vestidos de novia se aproxima en menos de dos meses y todavía tenemos más de la mitad de diseños por hacer. Estos seis meses hemos trabajado sin parar en el taller, en perfeccionar cada uno de los ligeros y casi invisibles errores que solo los profesionales podrían apreciar desde lejos. Ya que todo el mundo de la moda estará en el desfile de lanzamiento, mamá se encuentra mucho más exigente que nunca.
El nombre de nuestra familia está de por medio.
Y, como cada año, tenemos que demostrar que por algo somos los mejores.
—Este vestido es el más hermoso de esta colección. —Monique aplaude con euforia cuando me alejo unos cuantos pasos para apreciar las perlas sobre la tela —. Los críticos van a amar este diseño, señorita Kabakov.
—Dios te escuche, Monique. —Le ofrezco una sonrisa y choco las palmas con ella —. No puedo esperar a que Kaia Thalía lo vea. ¡Le va a encantar!
—Nada de mostrar los diseños antes de tiempo. —Mamá me ofrece una sonrisa cuando le miro con los ojos entrecerrados —. Pero puedo hacer una excepción por Thali.
—Una lástima que no quiera modelar. Se vería preciosa en este vestido —admito con las manos juntas.
Kaia Thalía es mi mejor amiga desde que tenemos pañales debido a que nuestros padres se conocen desde niños. Su padre y el mío tienen la amistad más sólida que he visto en dos personas y puede que se acerque un poco a la nuestra si estamos hablando de unidad. Mientras que yo estudié diseño para continuar en el negocio familiar, mi mejor amiga ahora trabaja en el acuario de la bahía debido a que se graduó con honores de la universidad con una carrera en biología marina. Es asombroso verla presentar a los animales en el acuario. Se emociona cada vez que voy a...
¡Joder! ¡Kaia Thalía!
—¡¿Qué hora es?! —Tomo mi móvil. Mis ojos salen de su lugar al ver la hora —. ¡Joder! ¡Ya estoy tarde!
—¿A dónde vas con tanta prisa? —Mamá ríe.
Me quito el overol de trabajo a la velocidad de la luz —. ¡Le prometí a Thali que iría a ver su presentación de ballenas en el acuario! ¡Es importante!
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Hasta el Infinito (2023)
RomanceTrilogía Lux in Tenebris (I) A pesar de los años llenos de fama y dinero, Taehyung siempre ha pensado en aquella niña de ojos azules que robó su corazón desde el primer momento en que la vio. Nunca dejó de amarla a lo lejos. Regresar a casa después...