Chapter II

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Hola! Lamento profundamente la tardanza. La historia dio un giro distinto a lo que tenía planeado originalmente, así que al parecer habrá un capítulo más para poder darle un cierre que me deje satisfecha ♥

Se agradece todo voto, comentario y suscripción ♥

(Recomiendo releer la última parte del capítulo anterior para refrescar un poco la memoria antes de comenzar este, ya que hay un pequeño retroceso en el tiempo n.n!)

Continuamos con esto:

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DISTANCE

II

Minji's POV

Hanni Pham se ha convertido en mi mejor amiga, o al menos en mi amiga de mayor confianza, desde que estamos juntas en este grupo. Recuerdo que la primera vez que la vi pensé que era menor que yo. Su aspecto pequeño, frágil y adorable me hizo pensarlo, y me sorprendí enormemente al descubrir que teníamos la misma edad. No tardé mucho en darme cuenta de que lo que sí tenía sentido era su forma de pensar. Era muy madura y objetiva al momento de decir lo que pensaba, a pesar de que aún parecía dejarse llevar por la ilusión de estar cumpliendo sus más grandes fantasías. Dicha madurez parecía venir de las experiencias que en su corta edad ya había tenido que cursar, por haberse distanciado de su familia, debiendo de aprender todo un idioma nuevo para poder subsistir, nada que le hubiesen enseñado en la escuela, y alcanzar esas metas que se había impuesto.

Aprender un nuevo idioma y dejar sus países o ciudades es algo que muchos idols hacen, sí, pero no por ello no sentí admiración hacia su valentía cuando la conocí. Yo también había viajado de intercambio y me vi forzada a mejorar mi nivel de inglés si quería que mi estadía en Canadá fuese productiva, y si realmente esperaba no decepcionar a nadie, y eso me impulsó. No fue fácil, así que podía hacerme la idea de lo que Hanni sentía. Quizás fue aquello lo que me llevó a acercarme a ella desde un principio, o el hecho de saber que tenía mi edad. Pero lo cierto es que desde un principio sentí el impulso de hablarle.

Así nos conocimos. Nos acercamos, nos apoyamos mutuamente, y en algún momento llegó un punto en el que nada más nos separó. Incluso llegué a descubrir que lo que la motivó a audicionar fue un video mío. Por eso, llegamos a pensar que nuestro encuentro fue cosa del destino, y que debíamos debutar juntas. Así lo hicimos, y me mal-acostumbré a su presencia en mi día a día. Quizás demasiado.

Las puntas de mis dedos parecían tener un imán hacia ella todo el tiempo. Cuando la perdía de vista, algo muy común por su estatura, se activaba en mí una especie de radar interno busca-Hannies que comenzaba a registrar los alrededores hasta ver su frente asomarse entre la multitud, y la mayoría de las veces ella también me buscaba a mí hasta encontrarme.

Diría que, quizás, siento un extraño impulso por protegerla, pero la verdad es que es ella la que hace más por mí.

Nuestra querida y detallista Hanni. A veces adorable como una niña, y otras veces tan madura que parece ser mayor de lo que realmente es. La encargada de tranquilizar las aguas en el grupo. La que mantiene la armonía todo el tiempo. La que se adecúa fácilmente a toda situación y contexto, y asume roles que en ocasiones no debería. La que cuida de todas a su manera, incluso dejándose de lado a sí misma muchas veces.

Por mi parte, suelo velar por el bienestar de todas intentando ser quien mantiene la mente fría la mayoría de las veces, y la organización, para evitar el caos. Pero, en cambio, soy bastante torpe en lo que a expresarme se refiere. Nunca he sido alguien que demuestre las cosas con palabras, sino más bien con acciones, y no me refiero a ese cliché de hacer cosas que demuestren la preocupación y el interés en un sentido romántico, sino a algo más directo: El contacto físico. Aunque a la vista de muchos puedo parecer fría y distante, soy bastante de piel y me gusta expresar así el cariño por quienes me importan. En ocasiones sí puedo ser más detallista, y por lo mismo le regalé unos anillos a juego a todas, pero por algún motivo solo nosotras dos acabamos usándolos y se convirtieron en un símbolo de nuestra amistad. A Hanni le encantan los regalos.

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