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En un hermoso jardín de flores almorzaban la segunda concubina del emperador junto a su hijo, era algo normal que hacían juntos debido a la poca atención que les daba el emperador, las comidas familiares no eran comunes.

Madre e hijo hablaban alegremente entre ellos, siendo el hijo quien más hablaba en realidad sobre lo que había hecho esos últimos días, mientras su madre escuchaba con una sonrisa las anécdotas de su hijo. El palacio en donde vivían no era tan lujoso o grande como el de la primera concubina o el palacio imperial, pero para ella y su hijo era más que suficiente, con un jardín hermoso al cual adoraban ir seguido para cualquier cosa, almorzar, hablar o solamente tener un momento de paz con hermosas flores a su alrededor.

Madre, te quería consultar algo…

Dijo de repente el más joven, dejando de lado su tono alegre por uno más temeroso y algo desconfiado, el tono que usaba en ocasiones delante de los demás.

Claro que si querido, ¿Es sobre el duque Kritel?

Dijo con un tono tranquilo, dejando por un momento de lado los cubiertos para prestar atención a su hijo, sintiéndose preocupada al ver que este solo asentía temeroso.

Sobre lo sucedido en el baile, Ariana fue demasiado cruel con el y que me este ayudando con la investigación, me hace sentir terrible. Sé que la apariencia es importante para Arbeleza pero eso no justifica lo que hizo y últimamente estuve pensando en-

¿Pedirle disculpas por lo que hizo Ariana? Haveron, no tienes por que hacerlo. Ariana fue quien lo trató de una manera tan cruel, no tu. Sé que te preocupa el como se siente, pero Ariana fue quien le dio demasiada libertad a sus joyas por permitir que trataran de esa manera al duque Kritel y quien puso en peligro el compromiso, pero, tu no tienes por que disculparte con él. Si te hace sentir mejor disculparte por Ariana, está bien, pero no tienes por qué disculparte por otra persona que no quiere hacerlo.

Gracias madre, lamento si te arruiné el almuerzo.

Dijo un poco más animado pero aún temeroso. Su madre sonrió con cariño por la actitud de su hijo, eran tan similares que a veces era como verse en un espejo.

Esta bien querido, para nada me arruinaste el almuerzo, me alegra estar contigo y que me cuentes lo que te preocupa, no tienes por qué guardarte las cosas y menos conmigo.

El joven asintió con una sonrisa antes de que su ánimo regresara y le contara los avances en su investigación a su madre, que soltó una pequeña risa antes de seguir escuchando a su hijo, sintiéndose aliviada de ver a su hijo tan feliz al hablar de algo que amaba hacer.

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Era un día nuevo, un día estresante para el joven duque, faltaban algunos días para otro baile, del cual se había cambiado la fecha por la repentina petición del duque Kritel para romper su matrimonio con la primera princesa, se estaba discutiendo sobre si romperlo o no, algo que se estaba haciendo eterno para el joven duque que quería terminar el compromiso.

Suspiro cansado antes de mirar por un momento la invitación sobre la mesa antes de abrirla y empezar a leer, tomando la decisión de ir.

Camino por varios minutos hasta ver una cabellera familiar por esas semanas, se trataba del segundo príncipe que estaba esperándolo en la entrada del jardín de la segunda concubina, pero parecía reocupado, el caballero de siempre no estaba presente, algo que lo alivió, a veces no soportaba a ese hombre pero tenía curiosidad sobre por qué lo había citado para verse, no era común que lo hiciera si no era para seguir investigando o para comentarle los progresos de la investigación, fue sacado de sus pensamientos al escuchar al joven llamarle.

Duque Kritel, es bueno verlo de nuevo, yo…quería invitarlo a pasar el rato, su hermana me comentó que últimamente estaba cansado y pensé que necesitaba un descanso, su hermana también me pidió que lo alejara de sus responsabilidades unos momentos.

Dijo con una sonrisa amable al igual que su voz al hablar, el pelirrojo tenía un don para calmar a las personas con tan solo hablar, tal vez heredado de su madre, quiso negarse pero algo en su interior le decía que aceptará.

Bueno, tal vez un pequeño descanso no vendría mal.

Dijo devolviendole la sonrisa al pelirrojo, sintiendo otra vez una gran satisfacción cuando la expresión del joven se iluminó, empezando a seguirlo adentrándose cada vez más en el jardín que tenía una gran variedad de flores, todas de colores cálidos le daban un sentimiento de calma al verlas.

Un pequeño descanso no hace daño y menos junto a alguien que te trae calma, aunque no lo sepas.

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Perdí el separador alv
Quería subirlo el 25 pero hasta ahora me digne a terminarlo, no me gusta del todo pero algo es algo, feliz año nuevo.

Si tienen dudas haganlas y con gusto las responderé.

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⏰ Última actualización: Dec 29, 2023 ⏰

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 -'ღ'-𝐇𝐢𝐣𝐨 𝐃𝐞 𝐋𝐚 𝐂𝐨𝐧𝐜𝐮𝐛𝐢𝐧𝐚-'ღ'-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora