La plus belle rose des neiges

Nuit d'hiver

Era una fría noche en Francia, caía nieve sin cesar sobre todo el lugar. Una dama de cabellera blanca se adentraba a duras penas a un bosque.

- Espera, por favor! Tengo cosas que explicar!

La chica tenía la respiración agitada, las mejillas rojas del frio pero estaba decidida a seguir a aquel hombre de largos cabellos rubios. Más no pudo seguir y cayó sobre la nieve, en tan poco tiempo ya estaba cubierta de hielo, su piel pálida estaba ligeramente rosada y azulada. Lo último que vio fue la sombra del hombre que perseguía del cual estaba profundamente enamorada

[...]

- ¡Señorita Elizabeth! Es hora de despertar, su madre espera por usted en el comedor

- En un momento voy, Diane

La albina se levantó de su cama, era un día como otro, frío, nublado y lleno de nieve. Sería un día como cualquier otro, clases de ballet, literatura, violín, filosofía y Pintura. Era lo que su madre le daba como obligación de todos los días hasta que ella llegará a casarse y no dudaba en que su madre la obligaría a hacerlo. ya tenía 21 años, en cualquier momento le hablaría de los jóvenes solteros del pueblo.

Bajo al comedor, ahi vio a su madre con pilas de libretas y un periodico en mano, era normal verla así ya que es una gran diseñadora de modas y de interiores. Siempre estaba ocupada con sus diseños, modelos, eventos y en convencer a su testa dura hija en ser su modelo

- Buenos días madre ¿hoy también me llevarás a de modelo?

- Hoy no cariño, la señorita Beliaun te dará clases extra de literatura debido a que Nerobasta no podrá estar para tu clase de ballet

- Que felicidad - dijo sarcástica, cosa que no pasó por alto la mayor -

- Elizabeth deja ese sarcasmo, son las 7 apenas y ya tienes ese mal humor, desayuna que tienes actividades

- ¿Cuando vas a dejar de recordarme lo que hago todos los días? Es molesto

- Si no te lo recuerdo lo olvidas y terminas vagando por toda la casa

- Es aburrido hacer lo mismo todos los días... me gustaría hacer más cosas y no tener lo mismo todo el tiempo

- Entonces ven conmigo al trabajo, puedes ser modelo, ayudarme con los diseños o aun mejor ser mi asistente para que aprendas de mi

- Mamá, quiero elegir algo por mi misma, no quiero algo que venga de ti o que tu estés en ello... siento que no tiene chiste hacerlo

- Entonces empieza tu carrera como bailarina de ballet, el dueño del teatro me hablo para darte una oferta de trabajo, me encantaria verte en unas de las presentaciones de ballet

- Tampoco quiero eso, solo me obligaste a estudiar ballet para que resalte entre las hijas de tus amigas

- Eso no es cierto, desde niña te llamo la atención el ballet y yo te di todo mi apoyo dándote las clases privadas

- Cuando era niña solamente lo dije porque quería salir de casa y sigo queriendo salir, siempre me tienes encerrada aquí... después empezaste a presumir que estudiaba ballet porque te dio celos que una de las señoras dijo que su hija se iría a Inglaterra

- Elizabeth, sabes muy bien que no puedes salir, allá fuera hay traficantes o violadores... no puedo permitir que te suceda algo y mucho menos ahora que está ese grupo de vándalos

- ¿Que grupo? La señorita Diane no me ha dicho nada de algo así

- Son hombres y mujeres que se dedican a la trata de blancas... no recuerdo el nombre pero corres mucho peligro afuera

- ¿Y que hay de ti? También podrían hacerte algo

- Lo se, pero tengo trabajo que hacer y por eso contrate guardias en la casa, en el trabajo y que estén conmigo... no te preocupes, estaré bien

- Entiendo... desayunare en la biblioteca, voy a estudiar antes de que llegue Merlin

La joven tomó su comida y camino a la biblioteca de su hogar, estaba hundida en sus pensamientos sobre esa información de lo que sucede fuera de los muros de su casa... Tan terrible es la gente o que tan mal estaba el mundo como para llegar a realizar tales cosas.
Paso toda la mañana encerrada en la biblioteca estudiando y teniendo sus clases, cuando se libro de sus tutores salió al jardín.
Al menos pintar si le gustaba, se estaba dedicando a ilustrar el bosque cercano en cada estación.
Cuando estaba anocheciendo empezó a guardar su material pero sintió que estaba siendo observada, no eran los guardias de su madre, si no alguien del exterior. No vio quien era pero si vio como algo oscuro se adentró al bosque, concluyó que tal vez era un animal ya que seguido entraban conejos, ratones o zorros buscando comida.
Ya entrada la noche, en su habitación sintió esa mirada otra vez, se acercó a la ventana para verificar quien la observaba y estaba otra vez esa figura negra entre los árboles, no lo podía ver bien debido a la nieve que caía

- ¿Quien podría estar afuera a estas horas? Hace demasiado frío esta noche... espero que no esté pasando por tanto frío sea lo que sea...

Cerró las cortinas y se acurruco entre las cobijas mientras observaba el techo, su conciencia no la dejaba dormir... ¿Quien será ese ser? ¿Es un animal? o ¿Es una persona? ¿Por qué está afuera? ¿Por qué la mira a ella? ¿Sera uno de esos secuestradores? ¿Es ella la siguiente víctima?
Agitó la cabeza para quitar esas dudas de su mente, debería estar durmiendo y no haciendo preguntas absurdas. Tardo mucho en conciliar el sueño, mientras la criatura de afuera terminaba de dibujar en la libreta y se alejaba del lugar con una sonrisa.

- Es una linda chica... a el le gustara conocerla