Love me harder

46 2 0
                                    

Dan me ve a los ojos como si le fuera la vida en ello y poco a poco como si temiera que si lo hace muy rápido yo me rompiera acerca su rostro al mio hasta que nuestros labios se tocan en un leve rose que me revuelve todo el cuerpo, se acerca más y nuestros labios se apresan el uno al otro completamente, posa sus manos en mi cintura al mismo tiempo que yo las pongo en sus cabellos suaves como si estuviéramos sincronizados. El beso que al principio fue suave lindo y tierno se va tornando apasionado y salvaje. Dan me recarga sobre la puerta y mientras nos seguimos besando yo saco la llave de la casa de el bolsillo trasero de mi short, a tientas busco la cerradura y meto la llave en ella, suavemente abro la puerta y jalo a Dan para que nos metamos dentro de la casa y justo cuando Dan me estaba subiendo la camisa para quitármela  nos paramos en seco al oír la voz de mi hermana Rachel:

-¡Por dios búsquense un hotel!

Apenados nos apartamos mientras yo regrese la camisa a su lugar, ambos jadeábamos, teníamos las mejillas encendidas y evitábamos vernos a los ojos. Estaba claro que nuestro pequeño momento de pasión se había acabado y Dan hizo ademan de irse y sin poder detenerlas nuevamente las lagrimas volvieron a inundar mis ojos.

-Bueno, supongo que este es el adiós, si seguimos en contacto ambos vamos  a  sufrir asi que pienso que lo mejor es que ya no nos veamos, te quiero Leah , adiós.-y después de un leve beso en la mejilla seguido por uno en la frente se dio vuelta  para no regresar mas.

 Mis fuerzas flaquearon y caí de rodillas en las duras rocas de la entrada, no me importo el dolor que me causo esto, mi mente solo pensaba en el hecho de que acababa de perder a otra de las personas más importantes de mi vida. Mi hermana corrió a pararme y yo me deje hacer, me llevo hasta la sala principal y me sentó en un mullido sofá color hueso.

Sin saber que decir, Rachel me abrazo y comenzó a balancearme mientras tarareaba una canción tranquilizante, dicho acto pareció surtir efecto en mi ya que aunque no del todo el llanto ceso. La cabeza comenzó a martillarme y el dolor de las rodillas era punzante.

Como en todas las ocasiones me las que me sentía triste y derrotada mi hermana me preparo té de manzanilla, me dio la taza y se sentó a mi lado, saco su celular y comenzó a escribir algo que no alcance a ver, instantes después sonó el tono de un mensaje recibido en mi celular, lo saque y vi que era uno de mi hermana.

-¿Quieres hablar sobre lo que ocurrió?- Decía el mensaje. Pensé un instante en mi respuesta y escribí.

-Creo que sí, es mejor desahogarse que quedarse con el sentimiento ¿no crees?.-escribí como respuesta.

Rachel comenzó a hablar:

-Vale, ¿Qué fue todo eso? Un momento entran a la casa y parece que se van a comer vivos y después tu rompes en llanto, no comprendo que fue lo que paso.

Le explique lo ocurrido con todo lujo de detalles desde que Dan llego el parque hasta cuando ella interrumpió nuestro ataque de pasión.

-Vaya, ¿asi que se va?.

-Si, en realidad su padre tenía esos planes desde hace 4 meses pero luego sucedió lo de mama y papa y Dan logro convencerlo de que yo lo necesitaba aquí y su padre lo pospuso por un tiempo, pero se le acabo la paciencia y cree que soy lo suficientemente madura para sobrellevar la situación, dime Rachel  ¿En qué cabeza cabe semejante idea?.

-En realidad, Leah, el padre de dan no está muy equivocado, has reaccionado mejor a la situación de lo que pensaba, claro que estuviste inconsolable por un tiempo pero ¿quién no hiba a estar asi ante tal situación? Yo, estoy muy orgullosa por la manera en que lo llevas.

-Pero todo fue gracias a ti y a Dan, sin su ayuda yo hubiera estado acabada, Rache , estoy muy cansada, creo que me iré a descansar.

-Bueno, ve, mas tarde iré a ver como estas, aparte tenemos que hablar de algo.

Me pare del sillón y subí por las escaleras, normalmente las subía corriendo y saltando de dos en dos escalones pero esta vez incluso tuve que agarrarme del barandal de mármol.


        Al llegar al final de la escalera del segundo piso doble a la izquierda para                   dirigirme a mi cuarto, una vez dentro me tumbe en la cama totalmente agotada, y dormí.

POWERSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora