Capítulo 1

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Era alrededor del mediodía en Corea, había un clima agradable, había sol y el cielo estaba completamente despejado. Por las calles de corea se podía observar a un chico demasiado alto para su edad, caminando, bueno en realidad iba corriendo como si fuese el fin del mundo, ¿A donde iba? Fácil. Ala casa de hobbit o al menos así es como el le decía. Estaba corriendo demasiado rápido a si que no tardo en llegar y cuando lo hizo abrió la puerta de golpe, haciendo que todos los que estaban adentro se le quedarán viendo.


–¡llegue!—grito para que todo mundo lo escuchara—llevo corriendo como unas 15 cuadras sin parar, corrí lo más rápido que pude—dijo mientras tomaba una bocanada de aire, sintiendo paz cuando el aire porfin llegó a sus pulmones—ahora dime anano, porque demonios me llamaste para que viniera.

–ah si, es que los chicos y yo estábamos muy aburridos entonces decidimos que sería buena idea jugar juegos de mesa, y pues te llame para que vinieras—respondió hobin con toda la tranquilidad del mundo.
...

–¿¡es enserio!? me hicistes correr 15 putas cuadras, solo para que me digas que van a jugar un maldito juego de mesa!?

Taehoon estaba que mataba a hobin por hacerlo correr tanto

–¡hola taehoon!—saludo eul.

–por fin. Tardabas demasiado, crei que se nos haría de noche esperandote—reprochó jiksae.

–¿hola? Yo también estoy aquí—les hablo ricitos de oro(Rumi)

Pero taehoon no le presto ni la más mínima atención a ninguno de ellos. Si no a aquel chico que se encontraba en la esquina de la sala con la mirada baja, sabia perfectamente quien era, y no estaba nada feliz con la presencia de aquel chico. Así que rápidamente se dirigió hasta donde este estaba sentado, para después agarrarlo con una mano al cuello de su sudadera mientras lo sacudía bruscamente.

–hobit, quiero que me expliques qué demonios esta haciendo este tipo aquí—alzo la voz sin soltar al pobre chico de su agarre.

–¡yo te explico!—le respondió inmediatamente eul—verás...cuando fuimos ala tienda de pasada ya que íbamos ala casa de hobin, nos encontramos con yeonwoo así que decidimos traerlo con nosotros!—hablo felizmente.

–LARGO—le dijo seriamente al chico.

–¡pero taehoon!—se quejó el rubio—yeonwoo ¡es una buena persona! Es muy agradable y aparte no puedes sacarlo así como así No te ha hecho nada.

Inmediatamente snnaper guardo silencio y miro para otro lado, cuando la mirada de muerte de taehoon se hizo presente.

–Me importa una mierda si no ha hecho nada. No me cae bien, así que no lo quiero aquí.

–taehoon—hobin iba a hablar pero el chico de lentes lo interrumpió.

–No, el tiene razón. Yo no tengo nada que hacer aquí, así que gracias por su invitación pero tengo que irme. Aparte tengo mucha tarea que terminar—decía mientras agarraba su mochila, para después salir de la casa de hobin no sin antes despedirse de ellos.

La casa de hobin se quedó en total silencio, ninguno decía una sola palabra, cada uno parecía entretenerse viendo el piso. Hasta que taehoon decidió romper el silencio.

–entonces, vamos a jugar o no carajo, corrí demasiado como para nadamas ver el piso

–¡ah si!—dijo hobin casi gritando—le dije a los chicos que trajeran juegos de mesa, así que puedes escoger uno para jugar

–quiero jugar turista mundial

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—Nono taehoon ahora debes de pagarme por caer en una de mis propiedades

—tsk maldita sea, eres un tramposo hobbit—dijo bastante enojado, para después voltear la mesa donde se encontraba el juego. Haciendo que todo cayera y se revolviera—me largo de aquí, malditos tramposos.

Todos en la Sala, se estaban quejando, pues tendrían que acomodar todo de nuevo por culpa de taehoon para poder jugar. Aunque al nombrado no le importó en lo más mínimo, pues había perdido todos sus terrenos y dinero en el juego.

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Las calles de Corea se volvían extremadamente frías en la tarde, cuando el sol ya estaba casi desaparecido.

El aire golpeaba su cara, haciendo revolotear su larga cabellera mientras sus ojos se encontraban cerrados para disfrutar del momento. esos eran de los pocos momentos donde sentía paz, aunque no le duro mucho ya que chocó contra alguien, haciendo que el contrario cayera contra el pavimento.

–Fijate por donde vas idiota—habló el más alto para luego fijarse contra quien había chocado, llevándose una no tan linda sorpresa—¿¡otra vez tu!? Dios tengo una suerte de mierda el día de hoy—hablaba sin dejar de mirarlo con odio

–pero que amable eres taehoon—le contestó yeonwoo con un poco de enojo

–maldita sea, solo lárgate de aquí, desaparece o lo que tu quieras hacer pero vete

—bueno, te concederé ese favor—contestó mientras se levantaba del suelo pavimentado para marcharse de ahí, dejando sólo a taehoon en medio de las calles frías

—tsk, maldito sumiso—se dijo el más el alto para si mismo—como lo odio...











Buenasss he decidido hacer esta historia porque se me hizo interesante este ship jajsjjssj

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𝙾𝚝𝚛𝚊 𝚟𝚎𝚣 𝚝𝚞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora