"Los Bourgeois no tienen sucesor al trono, sólo tienen a una mujer."
Con ese estandarte, los Agreste le robaron el trono a los Bourgeois dejando en el trono al perfecto e imponente Adrien; aquel que Chloe juró desde su infancia, sería su mejor amigo...
¿Has tenido esa idea de que por más que te internes en una persona, simplemente no tocas fondo? Entre más la conoces, más desconocido te resulta; entre más capas desenvuelves, más misterios te va revelando.
Júpiter no tiene una superficie sólida. Nunca pisaras en él, y si es que sobrevives a todos esos niveles de tormentas y caos puro, no encontrarás más que un espacio gaseoso en su interior.
Navega, navega, navega sin parar, navega hasta que no puedas más; pero entiende, pequeña Chloe, hay seres que por muy imponentes a la vista de todos sean, simplemente no tienen nada en su interior.
Quizás sólo sean ese mar de tormentas que aparentan.
O quizás todas esas personas sean soles fallidos también.
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—¡¿Es en serio?!— gritó Audrey contra su hija.— ¡La única razón por la que las dos seguimos vivas y llevamos este nivel de vida, es él! ¡¿No lo entiendes?! — Estaba totalmente fuera de sí. La ex princesa volteó de reojo hacia su guardia, Luka, a quien habían enviado para que evitara cualquier catástrofe que pudiera ocurrir si a Audrey se le zafaba un tornillo.
—Al parecer a ti se te está olvidando que él nos arrebató a mi padre.— respondió con una risa sarcástica.
Audrey contestó con una risa aún más sonora si era posible y se acercó más a ella.
Luka no pudo evitar dar un paso en frente tomando cualquier precaución.
—Ya te lo dije, maldita mocosa. Tu padre jamás habría sido derrocado si hubiera tenido un heredero fuerte.— Su rostro estaba a unos centímetros del de su hija, lo suficiente para ver con claridad el desprecio y repudio con el que la observaba.
El mismo guardia se preguntaba si alguna vez esa mujer de verdad quiso a su hija, si le emocionó cargarla en brazos cuando era una bebe; porque la manera de verla ahora sólo decía que desde el primer instante en el que ella respiró, su madre la detestó.
Al final la mujer inhaló profundo y simplemente volteó para otro lado entregándole una carta, o más bien, una invitación. Claro, su madre nunca visitaría su alcoba sin una buena razón, ni siquiera para sólo amedrentarla.
—Va a haber un baile de máscaras pronto. Todos sabemos que el joven rey ascendió al trono sin una reina que lo acompañe, así que ha abierto este evento a todas las mujeres en edad de matrimonio y sangre noble ¿Sabes lo que significa?— enunciaba con toda la seriedad del mundo Audrey.
Luka en verdad se estaba aguantando la risa ¿En serio la mujer creía que el rey tomaría como esposa a la mujer a la que le robaron el trono? Era estúpido, no había necesidad. De querer hacer eso, los Agreste hubieran casado a Adrien directamente con Chloe sin necesidad de arrebatarle el trono y así ambas familias ascenderían a la corona.
Pero bueno, Audrey nunca fue la más lista.
Chloe sí soltó una risa sonora.
—No puedo creerlo.— dijo aún entre risas.— ¿En serio crees que él me invitaría a un baile para ser su esposa? Ja, ahora sí has perdido la cabeza. Tu amado rey está demasiado ocupado en hacer feliz a su pueblo ¿Qué pensarían si se casará con sangre sucia como yo?
