Presetacion.

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Hola soy Ángela, pero la mayoría me llama Angie, resido actualmente en Italia.

Soy niñera de dos pequeños Laura y simón, niños muy lindos e increíbles, esta es mi historia y el cómo fue que me enamore de un piloto de la f1. Pues bien empecemos por el principio.

Después de una semana dura de trabajo como niñera, por fin dio la noche poder descansar y dormir que es lo que más amamos en esta vida creo y comer, comer es felicidad pura, pero bueno no nos saltemos, me acosté en la cama y prendí el televisor, me dispuse a ver deportes me encanta el futbol y amo al Real Madrid y estaban jugando la final contra el Liverpool increíble, ganaron obviamente campeones de la 14 copa de Europa, mi celebrity crush o mi amor platónico siempre fue Marco Asencio y CR7 obvio. Luego del partido me quede dormida, al día siguiente era mi día de descanso, y acostumbro a salir por las calles a caminar y conocer más sobre el país de Italia su cultura e idioma.

Me bañe y me despedí de Sofía mi jefa, la mama de los niños, pase por la pista de fiorano caminando había entreno de los monoplazas de Ferrari, no conocía bien ese deporte, pero sabía que Ferrari era una de las escuderías más importantes dentro de la categoría al igual que red Bull, mercedes y demás. Vi que los pilotos estaban por terminar su entreno y tenía hambre así que me dirigí a comprar algo de comer e ir a algún restáurate a comer algo delicioso.

Llegue al restaurante Osteria Emiliana, que para mí es uno de los mejores restaurantes de la región, me encantan los platillos que sirven. Pedí un desayuno completo, y desayune delicioso, luego de responder mensajes de mi familia saludándome desde Guatemala, de mi madre de mi hermano de mis tíos siempre estoy agradecida por esos bellos mensajes, al terminar me levante pague la cuenta me dirigí a una biblioteca tenia estudiar más el idioma ya que no podía hablar muy bien más lo entendía, más o menos jajá bueno si entendía la mayoría, mi tarde se fue ahí eran aproximadamente las 4 de la tarde y ya tenía hambre así que me pare me coloque mis audífonos y camine por las calles hermosas de maranello, había mucho frio así que me compre un café, iba tan contenta con mi café caliente que nunca imagine lo que estaba a punto de pasar,

Al doblar una esquina casi desolada pero no peligrosa, o eso pensaba, cabe decir que peligrosa para mí no, sino para mi café, jajaja y ahora cuento el porqué, les dije doble la esquina y camine cinco pasos y alguien tropezó con migo y mi hermoso café haciendo que el mismo se derramara enzima de mí, brinque de dolor estaba muy caliente y ahora estaba quemando mi cuerpo, la persona me hablo en italiano era obvio no, y dentro de lo que entendí se disculpó con migo por a verme tirado el café encima, al levantar la vista vi que no era cualquier persona, era,,,,,,,,,, no lo podía creer, era Charles Leclerc un piloto de la fórmula 1 y piloto de Ferrari, no lo podía creer me ayudo a secarme la ropa lo cual fue imposible, al enfriarse la ropa mojada empiezas a sentir un frio descomunal, empecé a temblar por lo mismo y él se acercó a su auto y saco una sudadera de color rojo, y me la dio, y al mismo tiempo me dijo -deberías quitarte la ropa mojada y ponerte esta sudadera para que no sientas frio-. Pero estaba en medio de la calle, no podía hacer eso, así que negué con la cabeza, me dijo -sube al auto y te cubriré la ventana- acepte porque en verdad tenia frio subí al lujoso auto y me quite la ropa mojada y solo quede con la sudadera.

Baje del auto y me dijo que me veía bien- te ves muy bien y otra vez lo siento- me dijo que me podía quedar con la sudadera y cuando dijo eso me derretí por dentro yo con una sudadera de charles leclerc no lo podía creer, en ese momento mi sueño se terminó, pues llego Andrea el amigo de charls y le dijo que era hora de irse, me saludo por supuesto, Charls le explico lo que había pasado, y Andrea le dijo, porque no la invitas al padoock para que te perdone por haberle quemado con el café, charls asintió con la cabeza y Andrea me pidió el celular para poder llamarme, la invitación era para el Gran Prix de Monza obviamente, que sería en una semana exactamente acepte, charls se ofreció a llevarme a casa y acepte no podía creer todo lo que me estaba pasando como a mí en toda Italia, pero quién diría que gracias a ese café conocería al gran amor de mi vida y que ese sería el comienzo de una linda historia de amor.

Charles Leclerc (Amor por Acciente )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora