BAD PARENTS [TERMINADA]

SEIS

𝑂𝑐ℎ𝑜 𝐻𝑎𝑟𝑔𝑟𝑒𝑒𝑣𝑒𝑠

Apenas abría los ojos y ya tenía la mejor vistas de todas, Cinco con bebé al lado, el menor tenía abrazado su peluche mientras que Cinco leía al diario y de vez en cuando volteaba a verlo cada que el pequeño pedía atención de él.

Bebé noto que ya había abierto mis ojos así que se me acercó, instantáneamente cerré los ojos fingiendo seguir durmiendo pero ya era tarde el ya me había visto.

— Mmma — balbuceaba mientras colocaba sus manitas en mi rostro — Mmma.

Escuché la risa de Cinco — Es inútil ya te descubrió — se burlo y abrí lo ojos, el pequeño recostó en mi pecho dándome a entender lo que quería — no quiere recibirme el biberón, así que no hay de otra.

Acaricié su carita y subí mi pijama para sacar mi pecho, el al instante se pegó a mí y empezó a alimentarse. Yo estaba algo asustada pues la última vez que lo alimente me mordió y no fue muy lindo.

Cinco me miraba enternecido, era increíble como el bebé se pegaba a mí,  era como si quisiera tenerme más cerca, sentir mi calor maternal.

Cinco estaba en la ducha mientras yo me encargaba de vestir al pequeño, hoy por primera vez saldríamos y era algo que emocionaba muchísimo.

Cinco salió de la ducha con sus pantalones ya puestos pero con el torso desnudo. El sonrió al ver cómo batallaba tratando de ponerle ropa de vestir al bebé pues hasta el momento solo se la pasaba en pijama.

— Vamos pequeño, saldremos y no puedes estar con la pijama puesta — suplicaba mientras ellos reían al ver cómo luchaba colocándole los zapatos.

— Lo ves, siempre te he dicho que si lo acostumbras a usar pijama todo el día luego no querrá usar otra cosa — se burlo Cinco.

— No puedes culparme, siempre estamos en casa y la pijama es cómoda — me defendí.

Negó riendo y dijo — ve a vestirte yo me encargo de él — señaló a bebé y yo sonreí agradecida.

Rápidamente fui a cambiarme antes de que Cinco cambiará de opinión y tuviera yo que encargarme de bebé.

Ya listos salimos por las calles, el pequeño miraba todo encantado y le sonreía a cada persona que pasaba por su lado, Cinco obviamente miraba más que orgulloso la situación ya que todo el que pasaba lo felicitaba por tener un bebé tan hermoso.

Claro, como si no hubiera sido yo la que lo tuvo 9 meses dentro de ella.

Olvidando todo eso decidimos ir a un parque de diversiones y paseamos por algunas atracciones, el pequeño disfrutaba de su primera salida, no me lo decía pero lo notaba en su sonrisa.

Cuando estaba por atardecer Cinco y yo nos sentamos en una de las bancas del parque para dar un descanso de tanto ajetreo. Compramos unos helados y tanto mi esposo como yo  le dábamos un poco a bebé de vez en cuando para que probará el sabor del helado.

Era una tarde maravillosa.

— Buenas tardes — saludo un amigable anciano — les gustaría tomarse una foto — Señaló su cámara la cual tenía colgada en el cuello.

Me emocioné y al instante respondí — Sí, claro — Cinco me miró confuso y yo solo tome al bebé en brazos y me acerque a él para ser fotografiados.

El señor hacía muecas para que el bebé mirara a la cámara y el lo hacía con una gran sonrisa.

— Señor, le importaría sonreír un poco, su bebé y su esposa lucen muy felices — hablo el anciano para Cinco.

El arrugó las cejas y le di una leve patada en la pantorrilla — Sonríe un poco — insistí mirándolo mal, el bebé frunció el ceño y balbuceó como si el también le reclamará a su padre por no sonreír.

A mi esposo se le escapó una sonrisa al igual que a mí, nuestra risa contagio al bebé y en un corto instante sentimos la luz del flash de la cámara.

— WOW, déjenme decirles que enserio son un bella familia — halagó y saco su libreta — dentro de dos días ya habré revelado la fotografía, me pueden encontrar en ese pequeño puesto de allá — señaló un rincón al lado de la rueda de la fortuna — me pueden decir cómo es que se llaman, necesito sus datos para guardar la fotografía — pidió amable — Hoy es 27 de mayo de 1970 y usted es el Señor?

— Aidan — completo mi esposo y el fotógrafo me miró a mí.

— Y la señora?

— ___ — respondí con una sonrisa

— Y el pequeño — señaló a bebé y yo quedé callada — ¿Cuál es el nombre del pequeño? — insistió.

Cinco y yo nos miramos nerviosos, por un instante sentí que Cinco conectó su mirada con el pequeño y con una sonrisa lo dijo.

— Adán — contesto Cinco — el pequeño es Adán Hargreeves — habló y poco a poco las lágrimas se acumularon en mis ojos.

El fotógrafo anotó el nombre y se despidió, yo abrace fuerte a mi esposo. Se que no ponerle nombre al bebé fue decisión de ambos pero el que él lo haya hecho, que llamará a nuestro bebé con el nombre que a ambos nos gustaba y con nuestro apellido me hacía enormemente feliz.

El miró la emoción en mi rostro y quito mis rebeldes lágrimas que salieron sin mi permiso. Me escondí en su pecho viendo cómo nuestro hijo caía de sueño después de tan hermoso día.

— Amor — llame a Cinco — no quiero volver a casa.

— Lo sé — dijo él.

— No es justo que la vida nos haga esto — solloce y el me abrazo más fuerte — no quiero perder a nuestro bebé.

— Yo tampoco... Pero tenemos qué — levanto mi rostro para verme a los ojos — Si queremos que crezca feliz debemos aceptar que no lo hará con nosotros — concluyó y dejo un beso en mi frente.

Esta salida fue una despedida, está noche era nuestra última noche con nuestro hijo, ya no sabríamos más de él y nos dolía en el alma tener que dejarlo.

Pero como dijo Cinco la única forma que este bebé crezca en un lugar feliz y normal era lejos de nosotros.

Lejos de sus padres, que aunque lo aman mucho no podían tenerlo con ellos.

Hola putizorras 😘

Capitulo difícil.

No me salió tan bien el drama pero se intentó.

Las ano 💕