● One Shots ● StrayKids

◽⛓ChangSung pt2⛓◽

《Policía》

Changbin《Top》

Jisung《Bottom》

+18

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Como Jisung esperaba, a la noche siguiente, Changbin apareció afuera de su puerta, vestía con una musculosa al cuerpo, un pantalón tiro alto color gris y sus encantadoras botas.

Le sorprendió que le trajera una rosa, y un juguito en caja, aceptó los obsequios gustosos y le dejó pasar.

Le avergonzó un poco su hogar, era un verdadero 2x2, tenía un colchón en el suelo, protegido del contacto directo con cartones, un armario, y luego estaba la cocina, el baño y una ventana.

Simple y pobre.

—Espero...Te sientas como en casa—Dijo inseguro. El mayor ingresó y lo observó todo, detrás suyo Jisung cerró la puerta con seguro.

—¿Cómo te encuentras?—Volteó a verlo con una media sonrisa.

—Uh...Pues bien, aunque tengo algunos hematomas curándose...

—¿Puedo verlos?—Preguntó mientras se acercaba, Han se puso nervioso al instante.

—A-Ah... Bueno, pero están en lugares algo...Uh...

—¿Lugares algo "Uh"?—Ladeó si cabeza. El menor hizo un puchero.

—Tengo uno en mi espalda baja, otro en mi estómago, y otro en mi muslo derecho—Bajó su mirada avergonzado.

—¿Eso te parecen lugares comprometedores?—Rió, el chico iba a quejarse, pero un corto beso en sus labios lo dejó sin palabras.—Muestrame...—Asintió algo shockeado aún.

El mayor se alejó y él con pena tomó su remera y se la quitó, dejó que el oficial le viera, y luego le dio la espalda.

—Son grandes, pero por suerte ya casi no se ven—Sonrió.

—El de mi pierna es más grande, es el que más me dolió...

—Muéstrame—Por un momento creyó que no se lo pediría, pero al parecer le gustaba ver.

Respiró profundo y se bajó el pantalón lentamente, quedando así solo en bóxer, se dio la vuelta y le enseñó el gran hematoma sanando en su muslo.

Changbin hizo una mueca.

—Ya entiendo porque me dices que es el que más te dolió...—Jisung asintió.

Quedaron en silencio un momento, el mayor observó su cuerpo de arriba a abajo, mientras el menor apretaba su brazo producto de los nervios.

Entonces Changbin se preguntó por qué no de vestía.

—Mhm...—Lo vio rascarse el cuello y luego mirar a otro lado.

Entonces lo entendió.

Sonrió divertido y se acercó él, lo sujetó de la cintura y lo pegó a su pecho. Jisung lo miró demasiado sorprendido, mientras sus mejillas y orejas se tornaban rojas.

—¿Hy-Hyung?

—¿La cama es cómoda?

—¿U-Uh? Bueno...Algo...—Rió nervioso y tímido.

Changbin sonrió satisfecho.

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Sus dedos entraba y salían con cuidado, su mano libre dejaba caricias en su cabello, y le regalaba halagos y apoyo con palabras.

Jisung tenía sus ojos cerrados, abrazaba su almohada y escondía su rostro en ella. Pequeñas lágrimas caían por sus mejillas, mientras dejaba escapar bajos gemidos.

Poco a poco, los movimientos de los dígitos del mayor dentro de su interior comenzaron a volverse rápidos y profundos, junto a eso; cuando sintió que ya estaba más acostumbrado, decidió sumar un tercer dígito.

Un agudo gemido lo recibió.

—¿Todo bien, pequeño?—Fue respondido por descontrolados gemidos y lloriqueos.

Sacó sus dedos, una sensación de vacío fue lo que sintió el menor, quien se quejó molesto.

—Ya, enseguida, no te pongas así—Dijo divertido.

Se bajó el pantalón y su ropa interior, sacó un preservativo de su bolsillo y lo abrió, se lo colocó en su hombria y la llevó a su entrada. Han se removió ansioso.

Hasta el momento le estaba gustando tener algo dentro, le daba muchísimo placer, y era algo totalmente nuevo para él.

Con cuidado se fue introduciendo en él, cuando lo metió completamente decidió esperar unos segundos a que el pobre chico se acostumbrara al tamaño.

—¿Estás bien?—Preguntó preocupado, dejó caricias reconfortantes en su espalda.

—E-Es muy grande...—Susurró y clavó sus uñas en la almohada.

—Dime cuando te sientas listo—Pasó sus caricias a su cabello y luego a su cuello. También repartió algunos besos por toda su espalda.

—A-Ahm...Hazlo—Pidió tímido, mientras se arqueaba.

Seo jadeó encantado.

Sin dudarlo, comenzó a embestirlo, primero fue lento, pero no soporto mucho y aceleró el ritmo. Pronto tuvo a Jisung gritando y gimiendo.

Le temblaban las piernas, si cabello estaba hecho un desastre, lágrimas empapaban sus mejillas, y se sentía que en cualquier momento llegaría su orgasmo.

Changbin repentinamente volvió sus penetraciones profundas pero lentas, haciendo gemir encantado al menor.

Decidió darlo vuelta para verlo, y al observar su rostro no logró evitar pensar que era lo más hermoso que pudo ver.

Se acercó y unió sus labios en un necesitado beso, sus lenguas jugaron entre si, y las embestidas volvieron a ser bruscas y rápidas, provocando que soltaran gemidos entre el beso.

Jisung se tensó y se aferró a sus brazos, llegando a su orgasmo, sus paredes se cerraron, e hicieron a Changbin gemir, logrando así que también llegará a su limita y se corriera dentro del condón.

Se separaron del beso y unieron sus frentes, se quedaron allí varios segundos mientras se dedicaban a recomponerse.

—¿Te gustó?

—U-Ujum...

—¿Salgo?—Volvió a asentir. Con cuidado salió de él y se fijó de que lo haya lastimado.—¿Quieres darte un baño?

—Prefiero descansar...—Dio un bostezo y sonrió tímido, Changbin le devolvió la sonrisa y se levantó, se acomodó su ropa y su cabello.

—¿Puedo darme un baño?

—S-Si, te espero

Asintió y se fue, cerró la puerta al entrar y observó el baño.

Se veía muy pobre, estaba el retrete, una canilla y el calefón, hizo una mueca y se acercó para prenderlo. Esperó unos minutos hasta que estuvo lo suficientemente caliente y se desvistió.

Luego de su baño salió con una toalla en su cadera.

—Oye, Sung, te ocupé lo último de shampoo, mañana te traigo...—Se detuvo al encontrarlo dormido.

Sonrió.

Se acercó y se sentó a su lado, tomó su mano y dejó un beso en ella, escuchando un quejido por parte de Jisung, rió y acarició su mano.

Creo que le gustaba demasiado el chico.