El Guardian que solo quería paz

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Cuando abrí los ojos lo que me saludo fue un techo de madera con una lampara de techo, girando la cabeza lo que vi fueron cabellos rojos pertenecientes a una mujer desnuda que se apoyaba en mi costado

 Su suave y bello rostro se presionó a mi pecho, la pura sonrisa que tenia en su rostro llena de satisfacción y alegría era alentadora, en mi vida nunca pude tener algo así como un amante, hubo mujeres que querían mi parte inferior pero nunca una que quisiera una relación seria

O mejor dicho, yo no estaba interesado, en mi tiempo, cuando aun estaba vivo nunca tuve la intención de tener una familia, hacia las veces en la que pude dejar de seguir mi camino y simplemente retirarme solo sacudía la cabeza y me iba

Pero ahora mirando a la mujer a mi lado no pude evitar sonreír, la chica era alguien a quien yo elegí para ser mi pareja, pero no era alguien que vive en fantasía, sabia que nuestra relación era algo momentáneo 

En la cena que le hice le dije que después de la graduación podríamos hacer nuestra relación oficial para sus conocidos, a lo que ella reaccionó de una forma que no espere, como la conocía pude notar las señales

Cuando Rias se siente incomoda suele enfocar sus ojos en otra cosa, cuando esta molesta cierra los ojos y adopta una pose de seriedad, etc...

En este caso, ella enfoco sus ojos en la mesa y comió lento y sin el animo que suele tener cuando come mi comida, la prueba más inconfundible fue durante el sexo, ella fue una bestia, más de lo usual, normalmente Rias solo juega con mi miembro un poco antes de quererlo dentro, pero esta vez lo devoro como si fuera su comida favorita, golosa no seria ni cerca para compararlo, duro más de una hora dándome un oral, y después cuando cuando finalmente lo metí en ella no cambio de la posición de montura hasta otra hora

Normalmente ella no es así, si bien le gusta el sexo, no al punto de parecer una ninfómana que es esclava de mi miembro, Rias era más de las chicas que le gusta el romance, no por nada cuando vimos Kimi ni Todoke en mi casa el otro día ella estaba muy atenta y sutilmente estaba molesta cuando la rival se puso insufrible y cuando la relación de ambos se concreto lloro como colegiala en su quince años

Rias a pesar de ser un diablo es como cualquier otro humano de su edad, adora lo dulce, el romance y sobre todo pasar el tiempo con sus amigos, si el yo que masacro a los satanos y el dios de este mundo pudiera ver el resultado final sin duda lo hubiera hecho de buena gana

EMIYA: bueno, es hora

Con delicadeza me escabullí de la cama y deje a Rias descansar, cuando me puse de pie sentí como era más ligero, cosa lógica ya que habían pasado meses desde que me había secado tanto, mirando a Rias me acerque y le di un beso en la frente antes de irme de la habitación para hacer mi rutina diaria

Si bien ya no había necesidad de entrenar mi cuerpo para el combate, años de entrenamiento no se van de la nada, en especial si no hay nada mejor que hacer en tu propia alma aparte de estudiar la historia de cada arma dentro de esta

Como tal mi rutina sigue siendo la misma de siempre, 10 set de 100 flexiones, 10 set de 100 abdominales, 10 set de 100 sentadillas, 5 set de 100 metros planos y finalmente una hora de meditación después de correr 100 kilómetros

O al menos esa era mi rutina en UBW, en este mundo físico con un cuerpo nuevo, tuve que reducir todo a solo 2 set de cada cosa y correr 2 kilómetros y quince minutos de meditación, y aun así, sigo demorando de 2 a 2 y media hora en completarlo, las desventajas de tener un cuerpo físico otra vez

EMIYA: bueno, es mejor a tener que repasar la vida de los héroes pasados

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