🆂🅷🅴'🆂 🅼🅸🅽🅴

~07~

Ahora que sabían que la familia Hale había estado involucrada con Katherine Pierce, todo era confusión y preguntas sin respuesta.

Derek

Aquella noche nos la habíamos pasado buscando información en libros, Internet y un antiguo diario que por alguna razón ella tenía, El diario de Jonathan Gilbert, en donde hablaba de Katherine Pierce, vampiros y unas familias fundadoras de Mistic Falls, nada del otro mundo, fue entonces que levanté la cabeza para ver como iba Audrey solo para apreciar que se había dormido con la mitad del cuerpo en la cama y la otra colgando, ¿Como no se ha roto la espalda?

Dejé mi libro a un lado y me levanté de la silla, acercándome a Audrey para pasar un brazo por su espalda y el otro debajo de sus rodillas, cargándola y dándole la vuelta para que quedara tumbada como una persona normal, la levanté un poco para desdoblar las sabanas y meterla dentro de estas, arropándola, cuando supe que estaría bien me levanté, dispuesto a salir por la ventana cuando una pequeña y fría mano se aferró a mi brazo.

—No te vayas, quédate conmigo, lobito.

—No puedo hacerlo Dreny, Scott o Melissa podrían entrar en cualquier momento.

—Nunca entran a mi habitación, saben que necesito mi espacio.

—Bien, estaré en el sofá.

—No, la cama es suficiente grande para ambos—La miré con una mueca divertida.

—Eres consciente de que te saco cinco años ¿verdad?

—Ni que te estuviera pidiendo que te acostaras conmigo, solo, dormí muy bien esa noche, quiero volver a hacerlo—No tuve de otra que asentir y quitarme los zapatos y la camiseta, abrí las sabanas metiéndome en ellas y seguidamente Audrey se puso sobre mi pecho, aunque creo que fue inconscientemente.

Ella me tenía abrazado por la cintura, con su cabeza en mi pecho, en un raro abrazo, mi mano se puso en su cintura, apegandola más a mi.

—Buenas noches Dreny.

—Buenas noches Lobito—Murmuró para luego quedarse dormida, acción que imité poco después.

Abrí los ojos debido a la luz que entraba por la ventana de la habitación, iba a incorporarme cuando noté que estaba abrazado a mi pelirroja, con uno de mis brazos pasados por su cintura, espera, ¿Mi pelirroja? Que demonios te pasa Derek, le sacas cinco años, es una niña.

—¿Que sucede, lobito?—Su voz me sobresalta, creo que inconscientemente la he apretado contra mi.

—Siento despertarte—murmuré.

—No es nada, solo me asuste, pensé que te había pasado algo.

—¿Que tal dormiste?—Le pregunto cambiando de tema.

—Bien, creo que dormir contigo hace que me sienta tranquila, solo descanso lo suficiente cuando siento tu calor corporal—Sus mejillas se pusieron rosas cuando se dió cuenta de lo que dijo—L-lo siento.

—No te avergüenzes, Dreny—Ambos nos quedamos mirando a los ojos durante unos instantes, quería besarla, ¿Quería hacerlo?, cuando me dí cuenta estaba mirando sus labios y ella los míos, como si ambos nos sintieramos atraídos a besarnos.

—Si vas a besarme...hazlo ya, Hale—Sus palabras me sorprendieron, pero no tarde en unir su boca con la mía, en un beso lento y tierno, sin nada de deseo, ambos labios juntos como si de uno solo se tratara, una de mis manos fue directa a su nuca, asegurándome de que no se alejaría más de lo implicado, ambos tuvimos que separarnos por la falta de aire.

—Tengo que prepárame para el instituto, lobito—Dijo ella en forma de queja.

—Vístete te llevo, te espero abajo, no hay nadie—Salí de la habitación, yendo a la cocina para hacer el desayuno, a los minutos bajó ella, con el pelo mojado debido a la ducha y su ropa holgada.

—Derek, no era necesario.

—Si lo era, siéntate y desayuna, se te hace tarde.

—Ya pareces Stiles—Refunfuñó pero acabó comiendo.

Narrador Omnisciente

El azabache y la pelirroja acababan de llegar a el instituto, la chica se giró, agradeciéndole con un beso en la mejilla.

—Gracias por todo, llámame si descubres algo de Katherine o tu familia.

—Serás la primera en saber, Dreny—La pelirroja asintió con una leve sonrisa, para luego salir del coche y entrar al instituto.

—¿Que hacías bajando del coche de Derek Hale?—El chico Sarcástico apareció hablando de forma histérica.

—Por favor Stiles, no seas como Scott, se lo que hago.

—Es que tu eres muy pequeña para tener novio, Roja, a parte, el te saca cinco años y tres cabezas, ¿te imaginas como sería tener sexo con el? Podría partirte por la mita...—La pelirroja le tapó la boca con la mano.

—No me voy a acostar con el, no me gusta.

—Pero es un hombre lobo, tiene mucha fuerza, ¡podría despedazarte mientras lo hacéis!—El rapado siguió hablando sin escuchar a la pelirroja.

—¡Stiles! No voy a follar con el, y si lo hago, ¡No te tienes que preocupar por mi! El me trata bien, no quiero imaginármelo en la cama—La chica decidió molestar a su amigo un poco.

—¡Audrey por dios!

—Por dios no, por la virgen de los abdominales, recuerda que soy atea—Audrey le guiñó el ojo a su amigo y se fue.

—No no no, ¡Ya hablaremos de esto Señorita!—Escuchó que gritaba el muchacho.

La pelirroja iba caminando extrañamente alegre pero con el rostro totalmente neutro hasta que chocó con alguien, más bien alguien chocó con ella.

—¡Lo siento! Iba distraída, tengo clase de Francés y no la encuentro, apenas llevo una semana aquí—Allison Argent comenzó a despotricar hasta que la pelirroja decidió frenarla.

—Tranquila chica, parece que te va a dar algo.

—Lo siento—Murmuró la pelinegra apenada—Tu eres Audrey ¿No? La mejor amiga de Scott que vive con el.

—Si, soy yo.

—El me habló mucho de ti, apenas hablamos pero se nota que le importas mucho.

—Lo siento no se como responderte a eso, Allison.

—No te conozco y creo que te caigo mal pero eres importante para Scott así que, Hola me llamo Allison Argent.

—Audrey Blackwell—Respondió ella—Y no me caes mal, es mi rostro habitual.

—Oh, genial.

—A mi también me toca Francés.

—¡Perfecto! Vamos—La pelinegra enganchó su brazo con el de la ojiazul.

Que chica tan alegre, estoy segura de que vomita arcoiris.