Tú eres hermana de Saori y siempre te llevaste bien con todos y eso fue lo que te condenó...
°•Actualizaciones lentas•°
°•Créditos a Masami Kuramada por los personajes•°
°•Esta historia puede contener•°
♡Acoso
♡Escenas s3xual3s
♡Lenguaje ofensivo
♡M...
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Mientras tanto Ikki estaba contigo en todo momento aunque tu no lo querias, Ikki, sabiendo tu fascinación por las flores te llevo a un jardín de flores en la isla, el había hecho el jardín plantando y cuidando las flores sólo para ti. Observó tu mirada perdida y una melancolía que no podía descifrar.
—Te llevaré a un lugar que te gustará —𝐝𝐢𝐣𝐨 𝐈𝐤𝐤𝐢, 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧𝐚 𝐯𝐨𝐳 𝐞𝐱𝐭𝐫𝐚𝐧̃𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐬𝐮𝐚𝐯𝐞.
Te tomó de la mano y te guio a través de los pasillos oscuros de la fortaleza. Al salir, te encontraste con un hermoso campo lleno de flores de todos los colores.
Ikki te observó en silencio, estudiando tu reacción. Por un momento, pareció olvidar su odio y su sed de venganza, permitiendo que la belleza del lugar lo envolviera.Ikki se marchó.
En el presente, Hyoga llegó al campo de flores y te vio jugando con las flores.
—¿T/N?
Al escuchar su nombre, volteaste y viste a Hyoga.
—¡Hyoga! —𝐞𝐱𝐜𝐥𝐚𝐦𝐚𝐬𝐭𝐞, 𝐜𝐨𝐧 𝐚𝐥𝐞𝐠𝐫𝐢́𝐚.
Hyoga corrió hacia ti y te abrazó con fuerza.
—Qué alivio que estés bien... ese maldito de Ikki verá.
—Hyoga, tranquilo, Ikki no me ha hecho nada —𝐝𝐢𝐣𝐢𝐬𝐭𝐞, 𝐭𝐫𝐚𝐭𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐝𝐞 𝐜𝐚𝐥𝐦𝐚𝐫𝐥𝐨.
El momento fue interrumpido por la voz de Ikki.
—T/N, ¿qué haces con Hyoga? Sin mal no recuerdo, viniste para ver este jardín, no para hablar con un estúpido.
—¿Cómo me llamaste, maldito infeliz?
—Te llamé como lo que eres: un estúpido.
Hyoga, enfurecido, atacó a Ikki. La batalla fue feroz, pero Ikki, con su poder superior, logró vencer a Hyoga, dejándolo gravemente herido o muerto.
—Escucha, T/N, si te sirve de consuelo, Hyoga logró congelarme el brazo... ahora volverás a tu cuarto y no saldrás hasta que yo te lo ordene. ¿Entendido?
—Pero, Ikki...
—Pero nada. Es tu castigo por desobedecer mis órdenes —𝐜𝐡𝐚𝐬𝐪𝐮𝐞𝐨́ 𝐥𝐨𝐬 𝐝𝐞𝐝𝐨𝐬, 𝐲 𝐮𝐧 𝐂𝐚𝐛𝐚𝐥𝐥𝐞𝐫𝐨 𝐍𝐞𝐠𝐫𝐨 𝐚𝐩𝐚𝐫𝐞𝐜𝐢𝐨́ . —Llévala a su cuarto y no dejes que salga sin mi autorización. ¿Entendido?
Mientras tanto, en otra parte de la isla, Shun caminaba, pensando en ti.
—T/N, te prometo que después de que esto acabe, nos casaremos y formaremos una familia —𝐝𝐢𝐣𝐨, 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧 𝐬𝐨𝐧𝐫𝐨𝐣𝐨 . —Qué patético —dijo una voz desde las sombras.
Shun se puso a la defensiva.
—¿Quién eres?
—Soy el Caballero de Andrómeda Negro —𝐫𝐞𝐬𝐩𝐨𝐧𝐝𝐢𝐨́ 𝐥𝐚 𝐟𝐢𝐠𝐮𝐫𝐚.