Capítulo 3: Un nuevo intento

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Pasaron meses desde la última vez que Rengoku y Akaza se vieron. Rengoku se había sumergido en su trabajo, dedicando todo su tiempo y energía a la caza de demonios. Mientras tanto, Akaza seguía luchando en la guerra contra los cazadores de demonios, tratando de encontrar un propósito en su vida después de haber perdido a Rengoku.

Un día, mientras Rengoku estaba en una misión en solitario, se encontró con un demonio extremadamente poderoso. Rengoku sabía que no podía derrotarlo solo, y estaba a punto de rendirse cuando escuchó una voz que le era familiar. Era la voz de Akaza.

Akaza había venido a ayudarlo. A pesar de todos los riesgos y peligros, Akaza había decidido ayudar a Rengoku, a quien todavía amaba profundamente.

Juntos, Rengoku y Akaza lucharon contra el demonio poderoso. Fue una batalla larga y difícil, pero al final, Rengoku y Akaza lograron derrotarlo juntos.

Después de la batalla, Rengoku y Akaza se quedaron juntos, hablando durante horas. Hablaron sobre todo lo que había sucedido desde la última vez que se vieron, y sobre sus sentimientos el uno hacia el otro. A pesar de todos los obstáculos en su camino, decidieron intentar estar juntos de nuevo.

Fue una decisión peligrosa, y sabían que tendrían que enfrentar muchos riesgos y peligros. Pero decidieron que el amor que sentían el uno por el otro valía la pena arriesgar todo.

En los días y semanas siguientes, Rengoku y Akaza continuaron viéndose en secreto, pero esta vez con una diferencia. Sabían que su amor era peligroso, pero también sabían que era verdadero. Y eso les daba la fuerza y la determinación para enfrentar cualquier obstáculo que se presentara en su camino.


A medida que pasaba el tiempo, Rengoku y Akaza comenzaron a construir una vida juntos en secreto. Aprendieron más el uno del otro y descubrieron nuevas formas de conectarse y de amarse. Aunque sabían que su amor era peligroso, también sabían que era auténtico y que era algo por lo que valía la pena luchar.

Pero su felicidad no duró mucho tiempo. Un día, mientras se encontraban juntos en un lugar apartado, fueron descubiertos por un grupo de cazadores de demonios que habían estado siguiendo a Akaza. Rengoku sabía que su carrera y su vida estaban en peligro, pero no podía soportar la idea de perder a Akaza de nuevo.

Juntos, Rengoku y Akaza lucharon contra los cazadores de demonios, pero esta vez no tuvieron la suerte de salir victoriosos. A pesar de su valentía y habilidad en la lucha, Rengoku fue gravemente herido y Akaza fue capturado y llevado ante la justicia.

Rengoku sabía que tenía que hacer algo para salvar a Akaza. No podía soportar la idea de que su amado fuera condenado a muerte por su amor. Así que decidió hacer algo que sabía que era peligroso y arriesgado: ir en busca de ayuda de otros demonios.

A pesar de todos los riesgos y peligros, Rengoku logró encontrar una alianza con algunos demonios poderosos que estaban dispuestos a ayudarlo a salvar a Akaza. Juntos, planearon una misión de rescate arriesgada y peligrosa.

La misión fue un éxito, y Rengoku logró rescatar a Akaza de su cautiverio. Juntos, huyeron a un lugar seguro y comenzaron una nueva vida juntos en secreto.

A pesar de todo lo que habían pasado, Rengoku y Akaza sabían que su amor era verdadero y que estaban dispuestos a arriesgar todo por estar juntos.

Pero el mundo de los demonios y cazadores de demonios era cruel y sin piedad, y Rengoku y Akaza pronto descubrieron que no podrían esconderse para siempre. Los cazadores de demonios estaban obsesionados con atrapar a Akaza y castigarlo por sus crímenes pasados, y no se detendrían ante nada para lograrlo.

Rengoku y Akaza tuvieron que enfrentar decisiones difíciles. Sabían que no podían seguir huyendo para siempre, pero tampoco querían separarse. Finalmente, tomaron una decisión valiente: presentarse ante las autoridades de los cazadores de demonios y pedir su clemencia.

Fue una apuesta arriesgada, pero Rengoku y Akaza estaban decididos a estar juntos, incluso si eso significaba enfrentar las consecuencias de sus acciones. Se presentaron ante los cazadores de demonios, listos para enfrentar cualquier castigo que se les impusiera.

Para sorpresa de todos, los cazadores de demonios se mostraron dispuestos a escuchar su historia. Escucharon sus argumentos, sus razones y sus sentimientos, y finalmente decidieron darles una oportunidad. No fue fácil, pero después de mucho tiempo y esfuerzo, Rengoku y Akaza lograron encontrar la redención y el perdón.

Finalmente, después de todo lo que habían pasado, Rengoku y Akaza pudieron vivir juntos sin miedo, sabiendo que su amor era verdadero y que habían sido bendecidos con una segunda oportunidad. Aprendieron que el amor verdadero no es fácil, pero que vale la pena luchar por él. Y así, juntos, comenzaron una nueva vida, lista para enfrentar cualquier obstáculo que se les presentara en su camino.



Kimetsu no Yaiba: Rengoku x AkazaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora