°𝙿𝚊 𝚚𝚞𝚎 𝚎𝚜𝚌𝚘𝚗𝚍𝚎𝚛𝚕𝚘 !!° Jlaudio

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¿Te molesta si me siento acá? -preguntó una figura borrosa- 

Ehm... no creo, siéntate -respondí nervioso-

Sabí? me gusta caleta como tocas el bajo, eres como una maquina que más encima canta -sonrió- 

De verdad pensai' así? -sonreí como tonto- gracias, también me gusta mucho como tocas la guitarra, tus manos cuando pasan de traste en traste es tan bello -lo miré asombrado por lo que dije- osea, no me refiero a que seas bello, osea si lo eres pero...puta la wea, mejor me callo.

Jorge no me des explicaciones, se a lo que te refieres y no me molesta que seas sincero.

¿No? es que no quiero que creas que se me da vuelta el paraguas o algo pero no se como decirte que pienso de ti.

Así esta bien, no tienes que decir mucho al respecto -vuelve a sonreír- se te nota en la cara. 

Mierda, perdón.

Se me acerca lentamente y siento tu respiración en mi cara. Lo miro a lo ojos y me sonríe una tercera vez, esa sonrisa hacía que mi estomago se revolviera. 

Claudio, yo no se que hacer -me alejé- es que yo..

Sentí como sus labios se separan y cerré mis ojos fuertemente. Esperé a que me besara y cuando por fin iba sentir sus labios pasó algo.

¿Claudio? -miré a mi alrededor- Cresta, fue un sueño otra vez -me senté en la cama- ¿Que chucha está pasando? ese weon me tiene mal.

¡Uy, al Jorge le gusta un weon! -dijo desde la cama de arriba-

Marco que andai' sapeando maricón -me levanté y le pegué en la pierna- 

El único maricón aquí eri' tu po Jorge -se rió y se cubrió con las sabanas- 

Cállate pendejo y no hables weas que no sabi' -Volví a acostarme- 

Me acomodé para volver a dormir y poder seguir con el sueño en donde estaba pero lamentablemente no pude hacerlo. Desperté con el desagradable ruido de mi hermano gritando el por que yo seguía durmiendo. Como pude me levanté y me preparé para ir al liceo. 

Iba de camino al liceo hasta que una voz familiar me llamó para que me detuviese. 

Jorge espérame, caminai' rápido cuando queri ctm -trotó para alcanzarme y se detuvo para tomar aire- 

Buena po Miguel -le di una palmada en la espalda- Y eso que tu eri' patas largas. 

¿Y esa alegría? Si vo siempre andai' amargado -se ríe y me toma del hombro- 

No pasa nada, hoy día desayuné en la casa así que yo cacho que es por eso.

Bueno, si eso es lo que me quieres hacer creer ta' bien entonces -se estira mientras bosteza y comienza a caminar- Ya apúrate weon que capaz que el Claudio nos está esperando y nosotros aquí como las viejas comadreando.

¿El Claudio? ¿Por qué nos estaría esperando? -caminé junto a el-

Porque en eso quedamos la otra vez po. Hay que pasarlo a buscar si porque parece que ayer salió y debe de estar durmiendo todavía. 

Sera po, vamos entonces. 

Caminamos relajados mientras nos poníamos al día hasta que llegamos a la casa de Claudio. Tocamos el timbre, golpeábamos la puerta pero nada que salía.

¡¡CLAUDIO ALEJANDRO VAMOS A LLEGAR TARDE POR TU CULPA!! -gritó con todas sus fuerzas- 

Vai a despertar a toda la cuadra si gritai' así po aweonao -le di un golpe en la nuca-