Three

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Me di cuenta que la razón por la que siempre trato de mantenerme tan ocupada como puedo todo el tiempo es para que mi mente no sea capaz de escapar a lugares oscuros, y le resulte imposible arrástrame a ellos, obligándome a parar mi vida y estancarme en el hoyo en el cual tantas veces me he visto hundida, pero del cual aún más veces he podido salir, con cicatrices y moretones que demuestran cada batalla perdida pero a su vez, guerras ganadas, contra mi misma y contra el mundo.

-¿Pao? ¿Ya casi?-La voz de Cesar me sacó de mis pensamientos.

-Si, ya voy.-Grite.

El agua caliente corría por mi cuerpo, solo deje que me relajara y trataba de mantener mi mente en blanco; termine de bañarme y salí de la regadera. Comencé a cambiarme, estaba usando unos jeans azules y una camiseta oversized de Taylor Swift. Abrí la puerta del baño mientras secaba mi cabello con una toalla.

-Dale, se nos va a hacer tarde.-Comenzó a apurarme.

-Ya lo sé, genio.-cepille mi cabello y comencé a maquillarme lo más rápido que podía mientras sonaba mi nariz cada dos minutos.

-Siendo nuestro último examen de este término, te puedes dar treinta minutos de tu vida para ir con el médico.-Insistió mientras me esperaba apoyado en el marco de la puerta.

-Cállate. Estoy lista.-Tome mi mochila y pase de largo hacia la puerta.-Ya nos vamos ma, te amo.-Grite mientras bajaba las escaleras.

-Suerte hija, te amo.-Después de que Cesar se despidiera también, cerré la puerta y camine a mi camioneta.

-¿Me sigues?- pregunté mientras él se subía a su carro.

-Siempre.-rodé los ojos y subí a mi camioneta.

Conecte mi celular y comenzó a soñar "Anti-Hero" de Taylor  Swift. Comencé a manejar repasando en mi cabeza conceptos que estudie durante dos semanas, sintiéndome completamente en blanco y sentí mi corazón acelerándose y mis manos comenzando a temblar, hice mi mejor esfuerzo por mantener la cordura mientras manejaba y gracias al universo el camino no era muy largo, entre al estacionamiento de la universidad, seguida por César y apagué el motor, quedándome sentada por unos segundos, poco después lo vi aparecer en mi ventana por lo que baje el vidrio.

-Hey, te irá bien, estoy seguro de eso, respira.- Hice lo que me dijo pero no ayudó mucho.

-Perdóname.- Dije mientras sacaba un cigarro de mi bolsa y comenzaba a fumar, di la primera calada y sentí automáticamente como mi cuerpo se relajaba, vi la expresión de Cesar, una mezcla entre decepción y entendimiento.

Terminé de fumar a los pocos minutos, me puse gel antibacterial en las manos, rocié perfume en mi camioneta y en mi cuerpo y por último, puse una menta en mi boca, haciendo todo lo posible por no llegar a mi examen apestando a cigarro.

-Vámonos.- Fue todo lo que dijo Cesar y puso su brazo sobre mis hombros.

Cabe recalcar que aunque mi ansiedad estaba al tope, la razón por este ataque en específico fue la discusión que tuve con mi mamá ayer, el simple hecho de hablar de mi papá me pone así, me pondría peor el hablar directamente con el. Llegamos al examen y nos separamos, no sin antes que él me diera un beso en la mejilla, susurrando un "buena suerte" en mi oído, después saludé a Karla con la mano y le deseé buena suerte también.

El examen fue más sencillo de lo que esperaba y fui la primera en terminar, salí del examen y mandé un mensaje al grupo donde estamos los tres, diciéndoles que los esperaría en mi camioneta. Me senté en el capó y saqué otro cigarro, esperando terminármelo antes de que mis amigos regresaran, nunca fui adicta pero es un hábito que desprecio con todo mi ser, pero es mucho mejor que los hábitos que tenía anteriormente para calmar mi ansiedad. Como esperaba, di la última calada del cigarro y mis amigos aún no regresaban, por lo que decidí comenzar a subir historias a mi Instagram, comencé a grabar con la cámara frontal.

•Destiny•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora