Capítulo Único

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¿Ir a la escuela sólo para ver a una persona? Que cosa tan absurda. ¿Por qué llevarías únicamente tu atención a una persona en particular en lugar de estudiar al pensar en tu futuro? Eso sin duda era la manera más fácil de arruinarse. Imposible que alguien se dedique a hacer eso.

Al menos eso es lo que pensaría alguien mentalmente estable y maduro, pero como Luca Balsa es un pendejo, lanza su futuro a la borda solo por el mismo chico: Edgar Valden.

¿Y podrían culparlo? El pintor era una completa belleza a la vista de cualquiera junto con su gracia y tranquila personalidad frente a todos. Aunque Balsa sabía más que nadie como era en verdad, pues desde el momento en que lo vió se acercó a él con tal de volverse amigos cercanos y... No terminó intacto.

Realmente fue complicado conseguir su confianza pero después de todo lo logró, y aunque no formaba parte de su grupo central de amigos, estaba más que contento con poder tener parte de su tiempo como si fuesen amigos de toda la vida.

La forma en la que hablaba, caminaba y mucho más le fascinaba, sin mencionar el dulce trato que le daba cuando estaban solos y no se molestaba.

La manera en la que se apasionaba por el arte, miraba todo tan atentamente con esos hermosos ojos que lo volvían loco, se arreglaba y portaba tal boina junto con su pequeña coleta

Con eso y más tenía suficiente para mirar embobado al chico a lo lejos mientras este de vez en cuando volteaba a verle y le dirigía una que otra vez una pequeña y poco notable sonrisa.

Esto solo lo mantenía suspirando enamorado en la cafetería hasta que Andrew se sentó en frente suyo con algo de molestia, pues este llevaba un buen rato hablándole y siendo ignorado; así tapándole la vista al castaño.

-Oh no, tú no eres lo que me gusta, Andy. Ya tengo mis ojos centrados en alguien más.

Apartó un poco al albino y siguió sonriendo como un idiota hasta que su rostro recibió un fuerte golpe por parte de un gran y grueso libro, lo que le hizo molestarse y levantarse para pelear con su amigo.

Comenzaron a pelear en voz alta, así llamando la atención de todos en la cafetería -incluyendo Valden- mientras Victor trataba de calmarlos.

Estando a nada de llegar a los gritos, Andrew sujetó al inventor de la camisa para comenzar a zarandearlo y reprenderlo por su falta de respeto.

El castaño sólo se sentía mareado y molesto, pero cualquier sentimiento negativo se fue en un instante apenas volvió a mirar esos brillantes ojos puestos en él.

-Oh Andy~... Qué lindo es el amor.

Habló de la nada el inventor, por lo que rápidamente fue soltado al Andrew estar procesando la situación, lo que causó que todos dejaran de mirar gracias a la falta de drama.

Ambos chicos simplemente se sentaron a su lado al notar que algo realmente estaba mal con el chico, ya que llevaban años con él y nunca antes lo habían visto de tal forma. Sin mencionar que ya llevaba cerca de un año que Balsa se iba perdiendo en sus pensamientos.

Preocupados comenzaron a susurrar entre ellos buscando el bienestar de su amigo hasta que lo escucharon suspirar mientras veía a un punto fijo.

Siguiendo su mirada se pudieron dar cuenta de que observaba únicamente a Edgar, así dejándolos en shock por unos segundos considerando que sólo veían a Valden gritándole a su amigo.

A nada de soltar lágrimas por el posible masoquismo de Luca, se dispusieron a buscar algo más con tal de obtener su atención pero todo fue inútil.

Deprimido por tal situación, Andrew ocultó su rostro en sus brazos apoyados sobre la mesa con el rubio consolandolo con pequeñas palmaditas en la espalda y un rostro afligido.

Staring -edluca OneShot-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora