Un Lindo Sueño

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—¡El ganador de la octava ronda del ragnarok es… el hijo de la luz que una vez más ilumino a la humanidad, Nikola Tesla! —gritó a todo pulmón Heimdall.

Sentía el cuerpo de mi einherjar demasiado debilitado, sabía que en cualquier momento ya no aguantaría más y se desplomaría. Así que deshice el volundr, y lo recargué contra mi cuerpo, él me volteo a ver sorprendido mientras apoyaba su cuerpo en mí. Le sonreí orgullosa por lo que los dos habíamos conseguido, esta era nuestra victoria, él me regreso la sonrisa.

Una sonrisa tan resplandeciente, una sonrisa que él solo podía dar.

—Aunque la lucha ya termino, aun sigues apoyándome —sus palabras salieron cansadas, lo sentía en cada respiración y ligero movimiento de su cuerpo.

—Jamás dejare de hacerlo —empecé a caminar con él apoyado en mí, la armadura había desaparecido, solo mantenía sus pantalones puestos y estaban desgarrados y llenos de sangre al igual que él. —Tengo que llevarle a la enfermería, está muy mal herido.

—Usted también debería ir, lamento tanto haberla dejado en ese estado señorita Göndul —bajo su rostro, ¿acaso estaba preocupado por mí? Mi corazón brinco de alegría y sentí mi cara arder —sé que pedí su permiso para trabajar contigo, pero no me refería a maltratarla o algo así.

—En primer lugar, creo que podría llamarme solo por mi nombre, si es que usted me permite llamarlo igual —me miró de nuevo a la cara —después de todo, compartimos una sola alma y luchamos juntos.

—Por supuesto señori… digo, Göndul, me va a costar algo llamarla solo así —volvió a sonreír.

—Con el tiempo te acostumbraras… Nikola —pronuncié su nombre tan lento y suave, saboreando la primera vez que lo decía, vi su cara enrojecer y le regale una ligera sonrisa —y, en segundo lugar, creo que tus palabras exactas fueron “¿me permites trabajar con tu cuerpo?”

Si de por sí ya estaba sonrojado, ahora su cara estaba totalmente roja, incluso hasta las orejas, pero fue lo más tierno que pude haber visto. Sabía que cuando lo había dicho, no quería decirlo con doble intención, pero me era imposible no malinterpretar su propuesta. Reí divertida por cómo estaba tartamudeando, intentando explicar sus palabras. Hasta que por fin pudo conseguir calmarse.

—Bueno, yo también recuerdo lo que me contestó —lo mire con calma esperando a que siguiera hablando —“si quieres tomar mi cuerpo, no me opondré a ti” —mi corazón golpeo fuerte mi pecho, aun así, me mantuve serena.

—Sí lo dije y no me arrepiento —nos detuvimos un segundo por el pasillo, ya casi llegando a la enfermería —Nikola, en ese momento no solo te entregue mi cuerpo —me plantee decidida enfrente de él, era ahora o nunca —te entregué todo de mí, alma, corazón, confianza, todo de mí era tuyo, así como tú eras mío. No imagino haber elegido a otro compañero que no seas tú.

Contemple todo de él, era un hombre hermoso, maravilloso, amaba sus ojos llenos de confianza y asombro, un asombro que jamás había visto en alguien más, las comisuras de sus labios fueron tiradas hacia arriba, obsequiándome esa sonrisa que tanto lo caracterizaba. Podría haber seguido ahí, plantada frente a él, admirando al hombre que era mi compañero.

Pero todo se acabó.

Todo dio vueltas a mi alrededor, empecé a perder el equilibrio, escuche su voz llamándome pero era tan lejana, mi pecho dolió de una forma que nunca había experimentado, el aire me abandonó, intentaba respirar pero me era imposible y empecé a sentir mi cuerpo tan débil, mi vista se nubló hasta que todo fue oscuridad total.

Ya no sentía absolutamente nada.


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Solté un quejido por una presión que sentía en el pecho, un dolor recorrió mi brazo izquierdo y sentía los parpados tan pesados que no creía poder abrir mis ojos. Solté de nuevo un quejido por la presión que algo o alguien ejercía en mí, pero también sentí un tacto suave y tibio en mi mano izquierda, aquel que me había dolido. Hice de nuevo un esfuerzo y esta vez logré abrir mis ojos, aun veía todo borroso, pero podía distinguir siluetas aquí y allá. De pronto la presión desapareció y pude respirar con más normalidad, parpadeé mejor y mi vista fue enfocando gradualmente.

—¡Hermana Göndul nos diste un susto de muerte! —escuche esa voz tan familiar, esos lloriqueos solo los podía hacer una hermana.

—Göll por favor, no llores tan fuerte, también me duele la cabeza —le pedí muy suavemente.

—Sabía que mi pequeña hermana Göndul saldría de esto —mire a mi izquierda y ahí estaba Brunildha sosteniendo mi mano y del lado derecho Göll quien lloraba intentando no hacer tanto ruido —te desvaneciste por completo, estabas en un estado criticó, la pelea dreno casi por completo tu fuerza vital y las enfermeras te dieron tratamiento para que pudieras recuperarte lo más pronto posible.

—Entiendo, gracias por informarme Nee-sama —recorrí con la vista la pequeña habitación, pero no había rastros de mi compañero —¿Dónde está el doctor Tesla?

Mis hermanas no me contestaron, solo intercambiaron miradas y Göll comenzó de nuevo a llorar.

—Göndul —me llamó seria Brunildha —estuviste dormida dos días, el señor Tesla también está hospitalizado… se encuentra en un coma inducido, las vibraciones que hacia Belcebú lastimaron algunos órganos internos, está en una capsula y están intentando que sus órganos se regeneren —no hice expresión alguna ni dije nada, solo desvié la mirada sin querer verlas.

—¿Podrían dejarme sola? —vi de reojo que Göll quería replicar —quiero estar sola —les ordené más fuerte.

Nee-sama soltó mi mano y se llevo con ella a Göll, no necesitaba que me dijeran nada más, tampoco era como si lo deseara. Esto era mi culpa, si hubiera tenido mas fuerza, si tan solo hubiera creado un escudo más fuerte, él no habría recibido los impactos casi directos y estaría bien. Jamás había experimentado un sentimiento tan horrendo, me encogí como un bebé y en mi soledad lloré. Llore tan fuerte intentando sacar ese horrible sentimiento de mí, me abrace a mi misma intentando darme consuelo y pensando que él saldría adelante, que él jamás se iba a rendir.

Estuve toda la tarde sola, no podía pensar en alguien más que no fuera él, así que por la noche me decidí a ir a verlo. Revisé habitación por habitación hasta que por fin pude dar con él. Era cierto estaba dentro de una capsula y con oxígeno, parecía como si estuviera dormido, tan tranquilo, me pegué al cristal para intentar verlo mejor, una necesidad que quemaba mis manos me pedía con desesperación tocarlo, pero era imposible, así que me senté en la silla que estaba al lado y puse mis dos manos pegadas al cristal. No me movería de ahí hasta que él abriera sus ojos.

Pasaron tres largos días más, todos los días venían las enfermeras y checaban su progreso, yo solo me iba para asearme y regresaba enseguida con él. Lo visito su hermano, sus colegas, mis hermanas y otros einherjars. Pero yo me mantenía al margen, solo quería que él despertara.

Antes de que me acomodara en un pequeño sofá por la noche, un grupo de enfermeras regreso y drenaron la capsula, para después con un tipo de vapor que salió dentro de la cúpula, ir secando todo el cuerpo de él, para terminar, retirando el cristal y dejarlo solo con el oxígeno. Trajeron una cama y entre 4 enfermeras pasaron su cuerpo a la cama, llevándose la capsula con ellas y tan rápido como llegaron, se volvieron a ir sin decir nada.

Desistí de dormir esta noche en el sofá, así que tome la silla y la pegue a su cama, mis manos picaron ansiosas por sentirlo de nuevo, así que me senté y tome una de sus manos entre las mías, acariciando con mucha tranquilidad la suya. Me incliné hacia él, la tonta mascarilla aun tapaba la mitad de su rostro, pero era mucho mejor que verlo a través de un cristal. Besé su mejilla, bajé a su pecho y deposité otro casto beso sobre su corazón, para dar el ultimo beso sobre la mano que sostenía entre las mías.

—Despierta, por favor —lancé mi súplica al vacío.

No hubo respuesta ni movimiento, pero muy en el fondo, mi alma se removió y sabía que él me había oído. Me recargué sobre su colchón y aun tomando su mano pude dormir, después de tanto pude sentir paz.

Sentía que alguien apretaba mi mano con fuerza al mismo tiempo que la acariciaba, sabía que había amanecido por la luz que había en la habitación. Otro fuerte apretón en mi mano me hizo dar un respingo fuerte hacia atrás y ver al culpable de esa acción. Ahí estaban esos hermosos ojos azules mirándome, por fin había despertado.
Me lancé sobre él y lo abracé despacio, había querido abrazarlo con toda mi fuerza, pero sabía que aun estaba débil. No quería llorar, pero mis sentimientos me sobrepasaron y termine tirando lagrimas sobre su pecho y cuello. No quería separarme de Nikola nunca más.

—Perdóname Nikolá, es mi culpa que estes así, si hubiera reforzado la armadura tu no hubieras pasado por esto —mis lagrimas salían sin control, jamás había demostrado mis sentimientos ante nadie.

—Göndul —su grave y rasposa voz me sobresaltó, me separé y ya se había sacado la máscara de oxígeno, intente volver a colocarla sobre su rostro, pero me sujeto débilmente —necesito decirte algo.

—Aun estas débil, por favor sigué reposando —pero el volvió a detenerme.

—No pude contestarte aquel día —me quedé quieta, esperando el resto —yo tampoco hubiera elegido a otra compañera que no fueras tú, no hubiera logrado la victoria si no fuera por ti, así que no te lamentes. En mi vida siempre hui de las mujeres, nunca supe como interactuar con ellas, pero tu eres tan diferente, desde la primera vez que te vi nunca tuve nervios, es como si estuviéramos predestinados a estar juntos —soltó mi mano que sostiene la máscara de oxígeno, se estaba volviendo a quedar dormido —queda entonces demostrado que soy tuyo y tú eres mía.

Y volvió a quedarse dormido tan profundamente, le coloqué su máscara y salí a buscar una enfermera, lo revisaron y al parecer todo estaba perfecto con él, el peligro había pasado, ahora solo necesitaba reposo y cuidados. Volví a quedarme a su lado, sostuve una de sus manos y entrelacé nuestros dedos como aquel día que habíamos hecho el völundr, jamás me volvería a separar de él.

Y esperaba que él tampoco se alejara de mí.


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Vengo a dejar mi pequeño granito para este shipp espero les guste, hace muchísimo tiempo no escribo y creo que estoy algo oxidada. Espero ir mejorando más. Si te gustó apoyamé con una estrellita y comentando, el siguiente one-shot está listo y es uno muy HOT.
Así que voten y muchas gracias por leerme.

|• Tesla x Göndul •|《SNV》/+18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora