くあtろ

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— Bien, el director nos dio autorización para poder interrogarlos, así que habla y di todo lo que sabes

Bakugou: ¿Y por qué debería hacerlo?

— Los ataques han sido demasiado frecuentes las últimas semanas, y no es la primera vez que pongo una condena a alguien de esta academia, así que habla o créeme que será peor para ti, y más te vale no mentirnos porque si lo haces lo sabré

El menor bufo chasqueando la lengua para así terminar por hablar

Bakugou: hace unos días escuche que un grupo de alumnos de la clase C estaban hablando sobre matar a uno de la otra clase porque la chica que le gustaba lo rechazo por él, no sé quiénes eran, fue cerca de los casilleros, exactamente hace tres días, hay cámaras en los pasillos así que pueden pedir que se las muestren

— Bien, gracias por tu colaboración, Kaito acompañalo a su salón de clases y trae al siguiente

Kaito: Si jueza Satō – salió de la habitación dejando a la mujer sola –

— Cueste lo que cueste, voy a encontrar a los hijos de perra que lo hicieron... Malditos

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Habían pasado unas cuantas horas, había terminado con los estudiantes de primer grado por lo que estaba leyendo los expedientes de cada uno en la sala de maestros que tenía la institución hasta que escuche que alguien abrió la puerta por lo que alze la mirada dejando ver aquel profesor con el cual tuve el placer de conversar y escuchar sus quejas hacia mis sentencias

— ¿Que hace aquí?

Aizawa: bueno, es la sala de maestros y aparte no haz salido de aquí desde hace tres horas

— solo estoy leyendo los expedientes de sus alumnos, vaya que hoy en día los jóvenes tienen las cartas de conducta muy sucias

Aizawa: ¿Acaso tú no hacías travesuras en la escuela?

— no quería dormir afuera, así que no, nunca lo hacía, solo iba a estudiar y a ser la mejor de mi generación

Aizawa: ¿Tus padres te exigían mucho?

La chica se quedó callada ante aquella pregunta tragando saliva mirando a un punto fijo

— Solo quería que fuera alguien en la vida, eso es todo... – respondió sin alguna expresión levantándose para tomar otra carpeta, al tomar una otra se cayó al suelo a lo que cuando se agachó para recogerla una mano más grande que la suya lo hizo entregandosela –

Aizawa: No te quedes tan tarde, sé que es un caso importante pero también debes descansar, nos vemos mañana señorita Satō – Dicho aquello salió de la sala de maestros dejando a una joven con un pequeño sonrojo en su rostro a lo que inmediatamente negó –

TRIBUNAL DE MENORES | MHA | ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora