hold this hunger down | sunki

one

—¿Te sientes satisfecho con él, Sunoo hyung? —Ni-ki le pregunta, rompiendo el silencio en la habitación, y Sunoo no está seguro de si sería capaz de responder al más joven incluso si no lo estuviera mirando como si fuera su próximo postre en el menú.

Ha estado viniendo más a menudo para entrometerse en la sesión de estudio de Sunoo con Heeseung estos días. Al principio, Sunoo no le prestó atención; Heeseung le había dicho que el interés de Ni-ki hacia él disminuiría después de unos días, como un niño pequeño atraído por un juguete nuevo. Aparentemente, cada nuevo amigo que Heeseung traía a su casa tenía que lidiar con el excéntrico comportamiento de su hermano menor.

—Si no tienes nada mejor que hacer, por favor no me molestes. —Le dice al chico sin levantar la vista de su trabajo. Estudiar para los exámenes finales siempre es duro, pero Sunoo está decidido a meterse en la cabeza las lecturas de todo un semestre antes de poder disfrutar como se debe de las vacaciones de invierno con su novio. Aún así, no ha tenido un descanso adecuado últimamente. Entre hacer malabarismos con la universidad y su trabajo de medio tiempo, dormir para él se ha convertido en un mito. Desafortunadamente, trabajar con cuatro horas de sueño haría que su cuerpo se colapsara internamente de forma lenta pero segura, razón por la cual pidió la ayuda de Heeseung para que lo instruyera en su tiempo libre. Es como matar dos pájaros de un tiro: pasa el tan necesario tiempo de calidad con su novio y tiene un tutor personal a la vez.

La mayor parte del tiempo lo pasan así, trabajando codo a codo en sus respectivas tareas o haciendo juntos los deberes de la universidad. No es tan malo como Sunoo pensó que sería... bueno, más o menos. A veces, especialmente las noches en las que están solos, Sunoo se la chupa a su novio debajo de la mesa de estudio. Pero siempre se detienen una vez que Heeseung se libera, aparentemente satisfecho con una mamada apresurada y sin remordimientos por el hecho de que Sunoo se queda con una dolorosa erección que no tiene más remedio que tratar a solas en el baño.

En realidad, ni siquiera puede quejarse. Sunoo ya le está pidiendo demasiado a Heeseung, teniendo en cuenta que su novio es un estudiante de último año ocupado en terminar la recta final de su vida universitaria. El mes que viene, Heeseung se habría ido a la facultad de Derecho, vestido con un traje de rayas, aprovechando la oportunidad de las pasantías como el chico de oro que todos dicen que es. Mientras tanto, Sunoo seguiría en la universidad, corriendo para ir sus clases a las 8 am y trabajando horas extras en la tienda de conveniencia cercana solo para poder pagar el alquiler. Estarían a leguas de diferencia, no sólo en distancia sino también en el estado de sus vidas.

Es evidente, al menos para Sunoo, que Heeseung sólo accedió a su acuerdo actual porque se había sentido bastante culpable por no prestarle atención. Otra posible razón por la que finalmente llevó a Sunoo a su apartamento después de dos años de noviazgo.

Heeseung había evadido el tema de su casa y todo lo relacionado con ella a lo largo de su relación. Sunoo pensó que quizá solo se estaban tomando las cosas con calma, ya que la primera vez que le había preguntado a Heeseung si podía quedarse a dormir, el mayor le dijo que no. Pero las semanas se convirtieron en meses, que a su vez se convirtieron en años, y Sunoo ha sido testigo de cómo los amigos de Heeseung iban y venían a su apartamento sin él. No quería sospechar nada de Heeseung, pero Sunoo tampoco podía soportar el rechazo que seguía recibiendo. Así que confrontó al mayor sobre el asunto y descubrió que Heeseung no estaba tratando de ocultarle nada. En cambio, lo que trataba era ocultar a Sunoo de su compañero de casa, su hermano menor, para ser exactos.

Tomó la primera visita de Sunoo a la casa para entender por qué.

Heeseung había ido al baño, dejando a su novio solo en la sala de estar cuando Sunoo conoció a Ni-ki. Estaba sentado en el suelo, entre el gran sofá y la mesa de centro, cuando escuchó la puerta abrirse desde el fondo del pasillo. Sunoo levanta la mirada justo cuando los pasos pesados se escuchan cerca y capta la imagen borrosa de alguien corriendo desde la puerta principal. Como si sintiera un par de ojos sobre él, la persona se detiene y retrocede lentamente hasta mirar a Sunoo en el piso. Parpadea como un búho ante la figura de Sunoo antes de esbozar una sonrisa de Cheshire.