06

44 4 0
                                    

Princesa Nymeria. De la casa Velaryon. Heredera al trono de Driftmark. Señora de Driftwood Princesa de Escaños del mar y  Lady de bronce

El trono de madera  y su lucha por el______________________________________

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

El trono de madera  y su lucha por el
______________________________________

Seis años después.

Mi abuela Rhaenys estaba sentada cómodamente en el trono de hierro mientras Baela y yo nos quedamos cada una al lado del trono de madera escuchando las palabras del maestre que decía tener información de nuestro abuelo Corlys el cual había desaparecido.

—Maestre, han pasado casi seis años desde que vi a mi esposo desde la última vez—Mi abuela se mantenía serena ante la situación pero Baela y yo no podíamos ocultar nuestra preocupación por nuestro abuelo—Debo saber... si el ¿vivirá?—continuo hablando

—Llevó a los marineros a una emboscada. A un navío que parecía estar abandonado.—habló tímidamente el maestre—En la batalla su cuello fue cortado por la daga de un corsario y calló por la borda hacia el mar. La herida era severa perdió mucha sangre pero la mayor preocupación es la fiebre que le siguió después  el maestre del barco dijo que se quema por dentro.

Hubo un silencio en la habitación mientras las tres mujeres de la sala tratábamos de asimilar lo que acababa de decir el maestre. Baela y yo volteamos a ver a nuestra abuela sentada en el trono de madera y parecía muy afligida. Nos quedamos en silencio a ver qué decía la reina

—¿Y los cuervos venían de...?—pregunto nuestra abuela.

—Evenfall, princesa.

—Así que llegarán en tres días.

Vaemond se movía inquieto por la sala y yo no podía apartar la mirada de Rhaenys

—Prepárense para recibirlos, maestre kelvyn.

El maestre bajo la cabeza y salió de la sala déjanos solo a nosotras y Vaemond.

—La serpiente marina es fuerte—consolé a mi abuela

—Si

—Sin duda—hablo Vaemond—pero he visto que la  fiebre acaba con hombres  todavía más jóvenes.

—No toleraré parloteo fatalista en mi casa, Vaemond.

—Yo amo a mi hermano.

Volteé los ojos de inmediato, él nunca amó a alguien más que a sí mismo y se atreve a mentir delante del trono de madera

𝖙𝖍𝖊 𝖇𝖑𝖔𝖔𝖉 𝖔𝖋 𝖛𝖆𝖑𝖞𝖗𝖎𝖆Where stories live. Discover now