El fuego antes de los cristales rotos

14.-¿QUE HICISTE?

"¿Qué hiciste Hannibal?" susurre para mí misma "¿Qué hiciste?"

Tomé un taxi a la casa del doctor, estaba tan confundida, no entendía que era lo que estaba pasando, en ningún momento me había dicho que planeaba hacer algo como esto, nada tenía sentido.

"¿Hannibal?" le llame tan pronto como abrí la puerta "¿Hannibal?" corrí a la cocina y lo encontré sentado en la barra con una botella de vino a la mitad y una copa en la mano.

"Bella..." él extendió su mano en mi dirección y fijo sus ojos en mí "Ven aquí cariño..."

Cualquier otra persona diría que solo se veía un poco cansado, pero yo sabía que era algo más profundo que simple fatiga, Hannibal estaba genuinamente consternado por algo, por alguien y me dolía verlo en ese estado.

Tomé su mano y me acerque a él en silencio, sabía que nunca pediría verbalmente por confort o consuelo, el doctor Lecter era demasiado propio como para verse débil frente a alguien más, era momentos como este que me recordaban que al final del día Hannibal si era humano y no esta deidad inalcanzable como todos lo veían.

"Has estado bebiendo..." dije con obviedad mientras lo abrazaba "No es muy común para ti beber más de una copa de vino durante la cena"

"Lo se... Pero me pareció apropiado para la ocasión"

"¿Qué hiciste Hannibal?"

Se tomó un momento antes de responder, era casi como si de verdad estuviera arrepentido de sus acciones "Lo que tenía que hacer"

"Si realmente era lo que tenías que hacer entonces porque estas tan triste"

"Es raro..." dijo recargando su cabeza en mi pecho "De alguna manera... Lo extraño, no contemplé eso en mis planes"

"Hannibal sientes algo por ese hombre, es obvio, pero creo que ahora que no está por fin te das cuenta de la magnitud de tus sentimientos por él"

Me dolía verlo así pero estaba molesta con él, de verdad no quería empatizar con el doctor en ese momento, lo único que atine a hacer fue tomar la copa que él aun sostenía en su mano y llevarla al fregadero donde vacié su contenido.

"Estas enfadada"

Aquello no había sido una pregunta, era una afirmación, por más neutral que yo pareciera Hannibal tenía la habilidad de leerme como a un libro, después de todo el tiempo que pasamos juntos no había sido en vano.

"Mataste a la zorra esa y metiste a la cárcel al hombre con él estas obsesionado, todo sin decirme nada"

"No debías de saber lo que ocurría en ese momento"

"¿Y creíste que sería mejor si me enteraba por alguien más?" volví a la barra y tome la botella "¿Pensaste en cómo me haría sentir?" di un par de pasos en dirección al fregadero pero me quede a medio camino.

"Lo siento..."

La botella resbalo de mis manos y cayó al suelo quebrándose al hacer contacto con este.

"Cuando termines de llorar porque tus acciones tienen consecuencias puedes limpiar eso..."