Tres Hombres, Una Guerra. Ricardo Alcaraz x Alex Turner x Jonny Sins.

Mentiras Y Compromisos

Ricardo camina hacia el palacio, después de encontrarse con su amantes, la oscuridad de la noche lo envuelve, al igual que el miedo y la preocupación. Se quedo dormido y llegar hasta la mañana alertaria a su padre, como le explicaría algo así a su padre que excusa pondría, por el momento el solo podía esperar que no lo notará y lo confundiera con otra noche de fiesta y sangré; el llego al palacio y se infiltró en su propio cuarto, sin pasar de ser percibo por sus guardias, ellos le contaron inmediatamente a al rey. Ricardo, se recuesta en su cama y toma un libro lee hasta quedarse dormido, estaba ciertamente cansado, despeinado, con la ropa desordenada, sin su chaqueta y sin su corbata. Los guardias habrían notado ese pues fue mandado a llamar por uno de sus sirvientes - príncipe, el rey exije su presencia - Ricardo casi dormido le pregunta donde - en su alcoba - responde el sirviente para después hacer una referencia e irse. El camina hacia donde le fue indicado y allí se encuentra con su padre, el estaba enfadado, - ¡¿Donde Fuiste?! - -en un clima tan tenso como este tu sales del palacio toda la noche- Ricardo contesta - pero padre... - sin dejarlo terminar el rey dice - qué imagen le daremos a nuestros rivales si el heredero es así, si quieres desaparecer hazlo, pero después de la boda de tu hermana- Ricardo entre llanto contesto - osea que esto es por un asunto de estado y no por que te preocupes por mi, pues ¿sabes que? salí a ver a una chica- El rey comenzó a escuchar más atentamente el siempre sospecho de la orientación sexual de su hijo, pero si eso era cierto al menos tendría un problema resuelto - Quiero conocerla, traela al compromiso de tu hermana- Ricardo al sentirse abrumado por las mentiras solo asintió con la cabeza y salió de la habitación después de hacer una reverencia.

El salió del palacio y camino por el pueblo; llego hasta la plaza pública, allí comenzó a mirar a su alrededor, tenía que encontrar a una chica que aceptara participar en ese farsa, pero ninguna mujer decente accedería algo así, eso le dio una idea y llego hasta un callejón conocido como el lugar de las rameras, el se acercó a una y le propuso un trato - te pagaré tu peso en oro si haces algo por mi - ella intrigada le pregunto, con un tono coqueto - ¿que sería ese favor, mi señor? - el réplica - te lo diré en un lugar más privado - La llevo hasta el mismo bosque donde se encontraba con su amado y le dijo - necesito que finjar ser mi amante, te pagaré bien solo quiero que mi padre no sospeche- ella le pegunto por cuanto y el le dijo que solo serian algunos meses- ella ante tal pago acepto, El le dio un adelanto para que se compre un vestido costoso y joyas para ese día.

El día llego Ricardo estaba en el pasillo cercano al salón y allí encontró a su hermana con una expresión de tristeza - ¿qué tienes? No estas feliz por tu compromiso- ella lo volteo a ver con ojos llorosos - no quiero casarme - el se sorprende ante sus palabras - El me dobla la edad ¡¡No Quiero Ser Su Esposa!!-  Ella comenzó a llorar, El solo la abrazo y le dijo - es por el reino- con una vos suave. Las horas pasaron y la fiesta comenzó era un un elegante baile, Ricardo fue a traer a su supuesta novia, Era una hermosa pelirroja con un vestido radiante, juntos entraron a la fiesta, fueron presentados como es debido y robando la mirada de todos. Su supuesta historia, dirían que se conocieron en alguna fiesta, qué su belleza y delicadeza cautivo al príncipe, quien iniciaría una relación con ella; ella diría que era huérfana y nunca conoció a sus padres, pero que le habían heredado una pequeña fortuna. Las mentiras seguirian hasta que no pudiera sostenerse más, Ricardo prefería vivir en una mentira que enfrentar al mundo, el mentiría con tal de no luchar por su amor.