¿Porque nosotros?

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Un día, mientras caminaban juntos por el parque, algo extraño comenzó a suceder. Podían sentir una energía que los atraía hacia algún lugar. Era como si algo los estuviera llamando. Entonces, un anciano misterioso se acercó a ellos y les explicó que los diamantes habían sido encontrados y que los monstruos estaban regresando. Los héroes debían reunirse y proteger los diamantes para evitar que los monstruos se volvieran más fuertes.

A partir de ese momento, la vida de Dahiana y Thomas cambiaría por completo. Juntos, comenzarían una aventura para encontrar los diamantes y protegerlos de los monstruos peligrosos. 

Pero lo que ninguno de los dos sabía era que eran reencarnaciones de dos antiguos héroes que habían buscado diez diamantes para protegerlos de monstruos peligrosos. Thomas era la reencarnación de aquel héroe que utilizaba una espada con uno de los diamantes incrustado en ella, mientras que Dahiana era la reencarnación de su compañera, Anaís, quien utilizaba un arco y flechas encantadas para matar a los monstruos. Ambos héroes murieron a muy corta edad intentando matar a un enemigo más fuerte que ellos. En el pasado, se decía que las armas de Adam y Anaís habían sido creadas por un misterioso niño blanco como la nieve y con el pelo plateado.

Después del incidente en el parque, Dahiana y Thomas decidieron ir a la biblioteca para investigar sobre los antiguos héroes y sus armas. Una vez allí, comenzaron a buscar información en varios libros, pero parecía que la información que necesitaban era escasa. A pesar de todo, Dahiana se llevó algunos libros a casa, ya que planeaba leerlos para entender más sobre aquellos héroes.

Thomas decidió irse a casa antes que su amiga, ya que necesitaba tomar sus pastillas para la esquizofrenia. Él sabía que no podía arriesgarse a tener alucinaciones o perder el control, especialmente en un momento tan importante como este. Antes de irse, le prometió a Dahiana que seguiría investigando por su cuenta, y que le informaría de cualquier cosa relevante que encontrara.

Dahiana se quedó en la biblioteca un poco más, y continuó leyendo los libros que había llevado. A medida que avanzaba en la lectura, descubrió que los héroes eran reencarnados cada generación, y que ella y Thomas eran los nuevos elegidos para esta tarea. Además, encontró una pista que los llevó a creer que uno de los diamantes estaba en un lugar llamado "La cueva de la luna", ubicada en una montaña cerca de la ciudad.

Con esta información en mente, Dahiana decidió ir a casa para descansar y prepararse para la búsqueda del diamante al día siguiente. Ella sabía que esta tarea no sería fácil, pero estaba decidida a hacer todo lo posible para proteger el diamante y evitar que cayera en las manos equivocadas.

Al día siguiente, Dahiana y Thomas se reunieron temprano para empezar su búsqueda. La montaña donde se encontraba la cueva era empinada y rocosa, lo que hizo que la caminata fuera difícil y agotadora. Sin embargo, los dos amigos estaban decididos a encontrar el diamante.

Después de varias horas de caminar, finalmente llegaron a la entrada de la cueva. La entrada estaba cerrada con una puerta de piedra que parecía no haber sido abierta en años. Thomas intentó abrir la puerta con fuerza, pero no tuvo éxito. Dahiana, quien siempre era más astuta en situaciones como esta, notó un pequeño panel en la pared justo al lado de la puerta.

Ella tocó algunos símbolos en el panel y, para sorpresa de ambos, la puerta se abrió lentamente. Una vez dentro, encontraron una cueva iluminada por cristales brillantes incrustados en las paredes. Sin embargo, también notaron que la cueva estaba llena de trampas peligrosas y monstruos acechando en la oscuridad.

Dahiana y Thomas avanzaron con precaución, evitando las trampas y luchando contra los monstruos con sus armas. La esquizofrenia de Thomas dificultaba su concentración, pero su amigo Dahiana lo ayudaba a mantener la calma y seguir adelante.

Finalmente, encontraron una habitación con un pedestal en el centro. Encima del pedestal había un diamante brillante, que parecía ser uno de los diamantes que estaban buscando. Sin embargo, la habitación estaba protegida por un monstruo enorme y poderoso que no permitiría que nadie se acercara al diamante.

Dahiana y Thomas lucharon valientemente contra el monstruo, utilizando sus habilidades y armas para derrotarlo. Con el monstruo derrotado, finalmente pudieron tomar el diamante y salir de la cueva. Sabían que aún quedaban muchos diamantes por encontrar, pero habían dado el primer paso hacia su misión de protegerlos.

A medida que regresaban a la ciudad, Dahiana y Thomas discutieron lo que habían aprendido en la cueva y lo que necesitaban hacer para encontrar los otros diamantes. Sabían que no sería fácil, pero estaban dispuestos a arriesgarse por su misión y proteger al mundo de los peligros de los monstruos y las personas que buscaban los diamantes para sus propios fines.