❥Mɪ Hᴇʀᴍᴏsᴏ Oᴍᴇɢᴀ Cᴏɴᴇᴊᴏ Pᴇʟɪʀʀᴏᴊᴏ┊𝗜𝗼𝗥𝗶𝗸𝘂

Capítulo 1 "Instinto de supervivencia"

Y así ya han pasado 4 semanas en las que Iori escapaba de su hogar con la excusa de su hermano era muy ruidoso, vaya que era una buena excusa así podía ir a ver al hermoso híbrido omega conejito, era hermoso que mas de una ocasión caía en su instinto de matar a ese comestible conejito rojo pero podía controlarse. 

Pero algo cambio esta vez, en esta ocasión estaba en su forma de lobo mirando al hermoso omega trasformado en un conejito que tanto amaba, esta vez  su instinto asesino le gano cuando el conejito se dio cuenta de su presencia, ceso todo movimiento, en un instante el conejito se lanzo hacia la maleza del bosque, Iori no despegaba la mirada de la esponjosa colita del conejito que lo hipnotizó en su carrera por querer atraparlo.

Las ramas bajas golpeaban su rostro, pero aun así no se detenía, iba a atrapar a ese conejito a como diera lugar, sus ojos gris cían tenían en la mira a la pequeña bolita de pelos que huía del el. Era mucho mas pequeño que el y por lo que veía mas ágil y podía evitar mas fácilmente los diversos obstáculos de la maleza del bosque, pero Iori era mas grande y fuerte por lo que rompía todo lo que se interpusiera en su camino.

En su persecución el pequeño conejito callo en una apertura escuchando así un chillido de pánico y desesperación del pequeño cuando se enredo en la raíz de un árbol, Iori bajo la velocidad de su carrera y observo a su alrededor para asustar aun mas al conejito, con los colmillos al descubierto y un gruido escapo de su garganta.

MIO

Dando vueltas seguía torturando al pequeño conejito que chillaba asustado, pero de un momento a otro los chillidos del pequeño se dejaron de escuchar ahora escuchando así sollozos provenientes del lugar en el que se encontraba anteriormente el conejito, abriendo los ojos como platos al ver al conejito en su forma semi humana pero aun así poseía rasgos de conejo. Su cabello era rojo que enmarcando su hermoso rostro. El chico tenía la piel blanca y tersa, sus ojos rojos casi dando un dorado, llenos de luz y alegría, tan hermosos como si de hermosas joyas se trataran, su rostro era perfecto con rasgos tiernos y dulces. Y al verlo más de cerca a los ojos lo supo, era el, el era su compañero e vida, su destinado, SU OMEGA, ¡por fin lo había encontrado! Mientras tanto la colita esponjosa del pequeño se movia mientras luchaba por liberarse del resto de la raíz, y el lobo se sonrojó debajo de su pelaje.

Y otra oleada de olor lo golpeó como un ladrillo y su corazón vacilo.

De un momento a otro un zorro  blanco y un zorro rojo llegaron al rescate del conejito poniéndose en modo de ataque listos para atacar en cualquier momento, el chico parecía conocer a esos dos, el zorro blanco vio fijamente al pelirrojo entendiendo este que devía hacer un resplandor cubrío al chico volviéndolo en el hermoso conejito, el zorro rojo ayudo al conejito para liberarse de las molestas plantas ayudandole a escapar quedando el zorro blanco con el lobo, Iori no pudo hacer nada mas mirar al conejito escapar con el zorro rojo después de asegurarse de que el conejito se fuera el zorro blanco se fue a la misma dirección que los otros dos. Iori se transformo en su forma de hombre lobo viendo hacia la dirección que se fueron esos tres quedando estupefacto. 

"Ya arruine la maldita cadena alimenticia" se quejo el lobo cayendo sentado de la impresión.

Pensando esta vez lo hermoso que era el chico que se ocultaba detrás de ese conejito lo  hizo pensar nuevamente en lo que acababa de hacer.

──¡ACABO DE ARRUNAR LA MALDITA CADENA ALIMENTICIA! ──grito Iori a los cuatro