Witness...testigo....
Una palabra, un apellido y una condena.
Peculiaridad, que es lo primero que piensan cuando conocen a Kaira.Ella tenía claro que la mala suerte le seguía por doquier y a veces culpaba a su apellido, por estar en el lugar equivoc...
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Calamidad...
Aprisionando una almohada y mordiéndose una uña con ansiedad, Kaira no quitaba la vista de su teléfono yacente sobre su cama.
-Ya han pasado 7 días. Y nada-
¿Se habrá olvidado?
Ella salta de su cama para caminar de un lado a otro sin dejar la manía de morder su uña.
-¿Y si se murió?-
-No, no creo. Habría salido en las noticias-
-De seguro huyó-
-Es lo más lógico, después de todo es un criminal-
También use mis métodos para investigar a ese hombre o todo lo que Internet me puede ofrecer.
Todo apuntaba a Bonten.
Esa asociación criminal mafiosa, y si, palideci al enterarme, tenía mil y un preguntas para hacerle a ese hombre. No podía dejar a la ligera sabiendo el riesgo enorme que puedo tomar y si mi familia pueda involucrarse.
Por favor... solo llama
Rendida ella da media vuelta para ir a cenar cuando su teléfono vibra.
Ante su reacción se da la vuelta sus pies tropiezan haciendo caerse de rodillas pero aún así estiró su mano para tomarlo y seguido contestar.
-¿Hola?-
-Hola Kaira. Soy Chifuyu-
-Oh..Hola Chifuyu, no esperaba tu llamada a esta hora- dice tratando de ocultar su decepción
-Se que es mal momento pero era necesario-
-¿Paso algo?-
-Surgio un imprevisto y...¡Takemichi aléjate de la barra!-grito
Parece que esta acompañado
-El punto es que mañana no podré ir a abrir la veterinaria y sinceramente no confío en Kazutora ya que perdió las llaves, y por eso instale una llave electrónica. ¿Podrías ir temprano y abrir el negocio?- de nuevo se oía apenado
-No tengo ningún problema. Supongo que iré más temprano-
-Te debo una Kaira, te enviaré el código por mensaje. Muchas gracias-
-Ya te dije que no tienes que agradecer- pone los ojos en blanco
-Tienes razón, no te quito más tiempo. Descansa Kaira-
-Tu también jefe- cuelga el teléfono y lo vuelve a lanzar a su cama.
Será otra noche de insomnio
-Kaira- su hermano aparece en el marco de su puerta -¿No cenaras?-
-Si. Dame un minu-ella se sorprende cuando sus ojos se clavan en la marca violacea en el pómulo que era casi tapado por las hebras del cabello de su hermano. Se acerca precipitadamente, lo toma de la barbilla haciéndolo girar a un lado, cosa que sorprende a Kiro
