cero

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Sentía mi pulso en mi garganta, cómo mi corazón estaba a punto de explotar, pero me sentía feliz, tan feliz.

Sus labios se posaban en los míos, danzando suavemente, se sentía tibio y cálido, también podía sentir sus manos temblar en mi cintura. Me sentía pleno, amado, cómo jamás me he sentido. Estaba besando a mí, ahora, esposo.

Nos separamos del beso, ninguno de los dos podía quitar esa sonrisa tonta; por fin somos esposos.

–Amar siempre ha sido tu fuerte, mi dulce panque. –me alzó por la cintura, girando sobre sí.

Aplausos, flashes, chillidos, llantos, chiflidos; todo era color amarillo.

Así como mi amor por Changbin.

–Amarte es mi fuerte.

Ikigai; ChangLixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora