Kunigami One-shots

#2

Escenario

Yandere! Kunigami x ______

Soñé algo similar y tenía que escribirlo. Lo imagino como el tipo de Yandere que es suavecito y comprensivo, nadie puede hacerme cambiar de opinión (solo lo que pasa en el manga pero fingiré que eso no existe)

⚠️NO hay ningún tipo de gore o abuso físico y/o sexual.

⚠️Síndrome de Estocolmo, más o menos.

⚠️Ataque de pánico (no tanta descripción).

POV Omnisciente

Llevaba uno, no, dos meses con dos semanas y tres días de estar encerrada en la misma habitación sin nada que hacer. El reloj marcaba las 5:33pm, Rensuke llegaría en cualquier momento.

La idea de verlo le traía emociones confusas. Por una parte, necesitaba tener contacto con alguna persona, sin importar quién fuera; pero tampoco podía ignorar que esa misma persona que añoraba era quien le había quitado su vida anterior.

"Pero no te ha hecho daño" le decía una parte de su mente, esa misma parte que ya quería escuchar la puerta abrirse y sentir de nuevo la calidez de su abrazo. "Que patético, das lástima" era la otra parte, esa que todavía deseaba encontrar alguna oportunidad de escapar aún sabiendo lo que había pasado la última vez.

Esa vez había dejado la puerta de la habitación sin llave, las ventanas de la sala se abrían desde adentro. Saltó por la ventana y en cuanto cruzó el portón una alarma empezó a sonar. Ese día se dió cuenta de que tenía un chip en alguna parte del cuerpo, información dada por Rensuke, aunque no había dicho dónde.

5:47pm, la puerta se abrió.

—Lo siento por venir tarde, el partido tardó un poco más de lo esperado porque llegamos a penales...— comenzó a contar su día, como siempre. —De seguro tienes hambre, así que traje esto— mostró una bolsa con el logo del restaurante favorito de la chica. —No tienes que quedarte en silencio...

—Ah, sí, lo siento— cerró ambos puños en un intento por controlar sus nervios. ¿Estaba feliz de verlo o por qué sentía su corazón latir más rápido de lo normal? —Gracias...— murmuró agarrando la bolsa y sentándose en una pequeña mesa con dos sillas al lado de la cama.

El aroma de la comida le recordaba a varias ocasiones, en especial una hace tres meses cuando había ido a ese mismo restaurante, con la misma persona que tenía enfrente ahora mismo. Quizá, de nunca haber aceptado esa cita seguiría siendo libre...

—¿Te sientes mejor?— preguntó Rensuke, refiriéndose al dolor de cabeza que ella le había dicho que tenía esa mañana.

—Sí...— murmuró. De reojo miró la mano del chico acercarse a su cara y contuvo la respiración.

—¿Segura?— tocó su frente en busca de alguna fiebre, pero su temperatura estaba normal. —Bien. Me alegro.

—Hm...— de repente la comida era difícil de masticar, imposible de tragar. Sentía ganas de vomitar, su respiración comenzaba a volverse irregular, no lograba enfocar la mirada.

—______— le habló Rensuke, sabiendo que estaba por tener una crisis. —Vamos afuera— se levantó de su silla y con facilidad cargó a la (t/c/p) hasta el patio donde había una hamaca lo suficientemente grande para los dos.

Rensuke esperó pacientemente. Se recostó en la hamaca, abrazándola con delicadeza con un brazo y acariciando su cabello con la otra mano. No tenía idea qué la había hecho frustrarse tanto en esa ocasión o por qué estaba llorando tanto, así que se quedó en silencio hasta que ella decidiera si quería decirle o no.

—Lo siento— la escuchó decir después de un rato. —No sé qué me pasa...— mintió. Claro que lo sabía. De estar encerrada más tiempo acabaría volviéndose loca. Había recordado tantas cosas de su vida hace tres meses y no había sabido procesar sus emociones.

—Está bien. No te preocupes— le aseguró Rensuke dándole un suave beso en la cabeza. —¿Quieres dormir?— no recibió respuesta, pero ya la sabía de todas formas. Después de esas "pequeñas" crisis siempre quedaba agotada.

Ya estaba atardeciendo, así que apreció la forma en que esos últimos rayos anaranjados iluminaron el rostro de la (t/c/p). Podía jurar que nunca había visto algo más hermoso en toda su vida.

Mentiría si dijera que no se sentía culpable. Sabía perfectamente cómo ______ había cambiado en el poco tiempo que llevaban juntos, pero tampoco podía permitir que fuera de otra forma. No sabiendo todos los riesgos del exterior. ¿Qué tal si alguien intentaba hacerle daño cuando estuviera sola en la calle? ¿Si hubiera un accidente? No podría arriesgarse a esa pequeña posibilidad, no cuando no conocía las intenciones de todas esas otras personas cercanas a ella, o incluso desconocidas.

—No te preocupes, ______, te acostumbrarás. Me lo agradecerás luego...— aseguró, a ella y a sí mismo, para luego abrazarla un poco más fuerte. —Vas a estar bien, confía en mí.

Quiero escribir algo usando a Kunigami del manga, pero no logro capturar por completo su personalidad. Agradezco ideas, headcanons o lo que sea 😿💞