••Capítulo V••

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Capítulo V.

Salí de la universidad agarrada de la mano de Jeon luego de aceptar ir a ese lugar especial que antes me había mencionado, me sorprendió que no nos dijeran nada por salir así sin más mientras aún había clases por dar pero claro me acordé de Jungkook tiene un tipo de pase VIP para todo. Cuando llegamos a su vehículo el cual era una Yamaha MT-125 de color negra mate, esa moto a decir verdad era un tanto impresionante y lo digo porque no era capaz de subir a ella.

- Dana vamos, no te pasará nada -Insistía de nuevo mientras se acomodaba en el asiento- Te prometo que tendré cuidado ¿Si?
- Jungkook jamás he subido a una moto y la verdad creo que ahora sé porque -Me acerqué un poco más al vehículo y lo miré-
- Para todo hay una primera vez, ven aquí -Rodeó con uno de sus brazos mi cintura ya que la tenía a su alcance y depositó un suave beso en mís labios- No dejaré que te pase nada malo.

Asentí ante sus palabras, comencé a subirme en la moto con un notorio nerviosismo y en cuanto estuve en ella Jungkook me ofreció su casco para que me sintiera más segura, me puse este ajustandolo a mi cabeza para luego abrazar rápidamente la cintura del azabache en cuanto este encendió el motor del vehículo y aceleró pero sin llegar a moverse del lugar aunque segundos después quitó el seguro para así poder conducir. Al principio tenía los ojos cerrados con fuerza pero a medida que iba pasando el tiempo los abrí lentamente viendo los edificios pasar por nuestro lado con algo de velocidad además de los coches y personas que habían en la calle. Nos alejamos por completo de la ciudad llegando a un bosque por el cual Jungkook siguió un pequeño camino algo escondido que había allí, al poco tiempo llegamos a un claro del bosque en el cual había un lago con agua casi cristalina, los árboles tenía las hojas tan verdes como la hierba que había bajo nosotros, ese lugar era precioso.
Jungkook dejó la moto a un lado del lugar, bajó de ella y abrazó mi cintura con sus brazos para hacer que enredara mis piernas en su cintura y con mis brazos rodeara su cuello, él quitó el casco que aún llevaba puesto regalandome una sonrisa demasiado bonita mientras caminaba hacia el lado cerca de la orilla del lago. Me tumbó en el suelo el cual estaba acolchado por la hierba y se posicionó sobre mi sin llegar a hechar todo su peso en mí.

- Este lugar es precioso Jungkook -Digo en un murmullo intentando no romper esa tranquilidad del momento-
- Es al lugar que vengo cuando me siento mal o necesito alejarme todo por unas horas -Sonrió de nuevo y fue dejando besos por toda mi mejilla-

Entonces en ese momento una duda vino a mi mente y ahora que estábamos así creo que es el momento perfecto para preguntarle aquella duda que no dejaba en paz mi mente.

- Jungkook, ¿Porque tus ojos cambian de un marrón oscuro a un azul intenso? -Acaricie su mejilla y este al instante me miró-
- Pues verás... No sé mucho sobre ello pero, mís padres me dijeron que nací con un tipo de enfermedad en los ojos... -Aclaró su garganta y siguió- Cuando estoy enojado, triste o muy feliz estos cambian de color, sé que es difícil de creer pero ni yo sé cómo esto pasa.
- Oh... Entiendo, tal vez tu enfermedad sea algo parecido a la heterocromia, sé que no es una enfermedad pero tal vez derive de eso -Sonrio levemente y dejo un beso en sus labios- Te quedan bien los ojos azules, me gustaría verlos más a menudo.
- Tal vez si los veas más a menudo lobita -Una pequeña risa salió de su garganta y yo lo miré confusa- Es un buen apodo para tí, eres muy peleona.
- ¿Eso crees? Y aún no me has visto en combate lobito -Hice énfasis en la última palabra con cierto tono de burla-

𝐍𝐚𝐫𝐫𝐚 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤.

Cuando escuché aquel sobrenombre por mi mente pasó en decirle la verdad, claro que lo haría poco a poco pero aún no quería estropear todo esto, debía sentirme seguro al cien por cien de todo lo que estaba pasando por mi cabeza en estos momentos y simplemente sonreí ampliamente.

··±El no es lo que parece±··Donde viven las historias. Descúbrelo ahora