03

8.7K 518 186
                                    

El trabajo estaba avanzando correctamente. Spreen, al parecer, sabía más de lo que aparentaba. y eso en cierto modo es bueno. Spreen siempre se esmera en sorprender a las personas o eso creo, porque de alguna u otra manera siempre lo consigue.

Es una especie de caja sexy de sorpresas.

Digo...Supongo

La investigación estaba realizada. todo el marco teórico estaba concreto y correcto. aunque, claro..¿Por qué no habría de estarlo si yo lo hice? No es por ser egocéntrico o esas mamadas, pero estoy seguro que este trabajo no contiene ningún error como de costumbre, o al menos mi parte

Spreen se encargo de la decoración. es decir de colorear, transcribiry decorar las cartulinas o cómo el prefiere definirlo:

"El diseño gráfico y visual del trabajo" pues "La presentación es un elemento muy importante para cualquier trabajo" y "Quien lo hace debe tener una mente y creatividad ilimitada" y eso "Me abrirá miles de puertas, pues nadie se resiste ante mi talento".

Claro, además del útil resumen de media cuartilla que Spreen logró hacer. Sí, lo admito, fue bueno. pero que siga trabajando como decorador en nuestra relación, yo soy el listo.

— Sprin tengo hambre, aliméntame.

Spreen se estiró sobre la mesa del comedor haciendo que el sonido de unos cuantos huesos en su cuerpo se escuchara y resonara. Me levanté de la silla y caminé a la cocina.

— Hay pizza en el horno. Sé que te debo atender yo por ser mi casa, pero... Estás como en tu casa Gafas.

— Claro... Aprovechemos que Juanito y su innegable talento culinario y habilidad gastronómica ¿Me viste cara de refrigerador o qué?— Me quejé, mientras sacaba del horno los pedazos de pizza y los ponía a calentar en el microondas.

— Seguramente usar el microondas requiere mucha experiencia. y en realidad ahora te veo como un gran pedazo de carne humana — Dijo.

Reí al igual que el

— Si esperas que te diga "ven y cómeme", tu espera será eterna— Bromeé.

— No mientas... No podes negarte. soy irresistible.

Reí.

— Soy un pedazo de carne difícil.

— Y eso es mejor.

— Aveces me das miedo— Le dije. Saqué el plato con seis trozos (de los que seguramente yo comeria cuatro) regrese al comedor y puse el plato en la mesa, sobre los cuadernos y libros.

— ¿Te doy miedo cuándo tengo hambre?— Tomó un pedazo de pizza y le dio una mordida amplia.

— Un poco.

Dije haciendo lo mismo.

— Pero si vos sos la bestia al comer, yo no— Se quejó.

— Sientes envidia porque yo sé cocinar— Tomé otra porción de pizza.

— Usar el micro no cuenta como cocinar.

— ¡Sí cuenta!

— No.

— ¡Sí!

— No, porque...

— iYa!— interrumpí.

Cuando menos me di cuenta el plato ya estaba vacío (y solo comí tres)

— ¿Ya le dijiste a tu vieja que te quedarás a dormir?

— Sí, le mande un mensaje— Contesté restándole importancia al asunto.

Spreen asintió mientras ocultaba una sonrisa que apareció en las comisuras de sus labios.

— Creo que ya es tiempo de... Decir mi secreto— Dijo con voz determinada.

Alcé ambas cejas con sorpresa y lo miré atentamente.

— ¿Cómo?— Pregunté. Spreen se encogió de hombros.

— Si te vas a quedar a dormir, tenes que saberlo— Dijo.

Lo observe con curiosidad ¿Qué tiene que ver su secreto con que me quede a dormir esta noche?

— Ya dime, anda— Le pedí.

— Tengo problemas nocturnos, Juan—

Sonreí, no es tan grave ¿Porqué lo hace parecer como si fuera tan importante?

— Tranquilo, yo también ronco y lanzo patadas. — solté una carcajada

— No, no ese tipo de problemas, tengo un trastorno...extraño. — Trato de explicar.

¿Trastorno?

— ¿De que trata?— Cuestione con mis cejas fruncidas y una expresión de confusión en mi rostro.

Spreen solo sonrió

— Padezco de sexonmia...—

— ¿Que es eso, se come?— Bromeé

Spreen volvió a reír.

— ¿Seguro que querés quedarte a dormir conmigo?— Cuestionó con un tono pícaro

— Si supiera que es eso, ¿tendría que no estarlo?

— Definitivamente.

— No puede ser tan malo, Sprin. He dormido con mi hermano y sus patas apestan bien ojete, ¿que puede ser peor?— Pregunte a Spreen con una sonrisa burlona y un aire confiado.

No creo que Spreen tenga algo peor que eso, además, dormiremos en habitaciones separadas. Seguramente quiere asustarme diciendo que es sonámbulo y asesina dormido, o que hay fantasmas en su casa. Ya saben, sus mamadas de siempre.

— Tengo sexo inconscientemente mientras duermo, sin importar con quien.

𝐬𝐞𝐱𝐨𝐦𝐧𝐢𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora