SECRET [F4 THAILAND] | Ren

Capítulo VI

Al día siguiente desperté e inmediatamente empecé a hacer mis cosas, después de arreglarme y demás decidí ir en uno de mis autos al instituto, para ser más específicos, uno negro.

Cuándo llegué decidí ir al salón de música y relajarme allí, al llegar la hora del receso decidí encontrarme con los chicos finalmente. Al verme me estuvieron preguntando que dónde había estado y ese tipo de cosas así que simplemente les dije que había tenido cosas que hacer y no me había quedado tiempo por lo que dicidieron dejar el tema allí.

Mientras íbamos caminando por el área de la cafetería por así decirlo, iba hablando con Ren sobre diferentes cosas cuando de repente vimos que se habían detenido así que me asomé por la espalda de Thyme para ver a una chica a punto de llorar.

-¿Es esta tu forma de acercarte a un chico? - fue cuando ví que a la chica se la había caído la comida en los zapatos de Thyme.

- Thyme - se le quebró la voz a aquella chica -, lo siento mucho. No quería hacerlo, te limpiaré los zapatos o compraré un par nuevo.

-¿Comprar un par nuevo? ¿Sabes cuáles son estos? - sentí que Ren me tomaba la mano para calmarme - Estos están hechos a medida en París - Thyme señaló sus zapatos - ¿Puedes comprarlos?.

-Thyme, ten cuidado con ella, es linda - recalcó MJ.

-Thyme, quiero compensarte. Haré lo que sea necesario siempre que me perdones - dijo aquella chica.

-¿Lo que sea necesario? ¿Que sería eso?.

Las voces de los estudiantes empezaron a decir:

-Ella puede limpiar tus zapatos ahora.

-O lamerlos.

Hasta que de repente la chica que había visto que estaba sentada junto con la chica del ahora problema golpeó la mesa y se paró.

-Creo que es demasiado - la voz de aquella chica se escuchó.

-¿Que acabas de decir? - preguntó Thyme.

-Dije, creo que es demasiado. Puedes ver qué mi amiga no quería hacerlo - dijo aquella chica - ¿No puedes perdonar la? Por favor perdónala.

-¿Te atreves a darme órdenes? - preguntó sorprendido.

-No es así... - su voz se cortó al ver la mirada que Thyme le daba.

-Seguro. Perdono a tú amiga, según tú orden.

Después de eso sentí que había tenido suficiente por lo que decidí irme rápidamente a hacer las cosas que tenía por hacer en la empresa.

De igual manera me encargaría de mantener a Thyme en línea recta.