Capitulo 17

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-¿Tu nombre no es Ian?- pregunte desconcertada.

-Es un sobrenombre, solo mi abuela y mi hermana mayor me dicen así, mi verdadero nombre es: Dorian Steve Rosell Ferrer-. Confeso él, mientras sus enormes ojos cafés no se desviaban ni un segundo de mi rostro.

-¿Cómo es posible que tengas el mismo apellido de tu abuela?-, le cuestione.

-Vaya, eres la primera que se percata de eso en los primeros cinco minutos,"muy impresionante", debo admitir-.

Pues veamos, mi padre el mayor entre sus cinco hermanos;"mis tíos", el primer hijo de Ana, realmente nunca conoció a su padre, él la abandono mucho antes de que mi padre naciera, y en consecuencia a esto, mi padre solo lleva un apellido, el apellido Rosell, el mismo de mi abuela.

-Oh, eso tiene mucha mas lógica ahora- le dije sonriendo.

-¡Espera, espera!,¿Entonces quien era el señor que estaba en la clínica contigo y Ana?- dije alterada.

Ian soltó una pequeña risa por lo bajo, mientras con una mano se acomodaba el cabello, sus expresiones y todo en él lo hacían ver tan jodidamente varonil, en tanto prosiguió hablando:

-Se puede decir que él es "el amor de la vida de Ana", es el padre de mis tíos, "Antonio" podría ser mi abuelo, pero pues, literalmente no lo es-, explico Ian.

Él continuaba con su mirada clavada en mi, sus ojos cafés me intimidaban, tanto así, que por un momento opte por guardar silencio, mientras le daba la espalda a Ian, en eso, trate de concentrarme solo en los arboles y en respirar profundamente ya que no podía restaurar mi estabilidad si él seguía mirándome de tal forma.

-Veo que aun no logras reponerte del todo, ¿Qué te parece si damos un pequeño paseo?- propuso mientras se ponía de nuevo al frente de mi.

-*Es como si este chico me leyera la mente, llega a ser bastante aterrador*-, pensé.

-Eh, creo que no es muy buena idea...- Balbucee.

-Vamos no seas aburrida, garantizo que no sera un paseo muy largo, o ¿Es que tienes miedo?.

-¿De que tendría miedo?-, le refute frunciendo un poco el ceño.

-No lo se, ¿Tal vez de mi?-, dijo mientras se daba aires de victoria con tal respuesta.

-Ni que tuvieras tal suerte, no por ahora galán- le conteste desafiándolo.

Ambos sonreímos, es como si, de alguna forma extraña nos conociéramos desde tiempo atrás, no se podría decir que nos simpatizábamos del todo, pero había algo en él que lograba captar mi atención.

Después de aceptar ir con él, lo seguí hasta un extremo del parque, allí me alargo un casco, -"Al parecer Ian tiene buen gusto si hablamos de motos"-,me dije a mi misma, pero lo que es inevitable de negar, era que en cierto modo él tenia razón. Evidentemente sentía algo de miedo, pero no sabia exactamente el por qué.

-¿A donde se supone que iremos Ian?- le pregunte incrédula.

-Eso depende, ¿A donde quieres ir?, y otra cosa, deja de llamarme "Ian", ya te dije que solo mi hermana mayor y Ana me pueden decir así-. su voz sonaba con algo de irritación.

-"Rosell ", suena a rosas, justo lo que necesitas, te sienta bien, ¿no crees?-, le dije agraciada.

-No puedo esperar menos viniendo de una persona de tu tipo, ¿Tienes que hacer esa clase de chistes con mi apellido?,¿Podría esto sonar mas gay?-,por su tono de voz parecía que esta vez le hizo gracia mi comentario.

Eres parte de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora