Pov _____
Esta noche es Halloween y siempre que lo es salgo con Alex a pedir dulces, es una tradición entre ella y yo, ir padre e hija cada noche de Halloween y es día de buscar un disfraz para mi pequeña.
Yo no me disfrazaba, en primer lugar porque soy un adulto, y en segundo lugar porque Alex jamás me lo pidió debido a lo pequeña que era.
Alex: Papi quiero este.
Hasta ahora.
Hoy no fui a trabajar debido a que es fin de semana, y durante el desayuno Alex me sorprendió el que me lo pidiera. Quería que Mina y yo la acompañemos a pedir dulces, y no sólo eso, sino que además quería que ambos nos disfracemos.
Obviamente ni ella ni yo quisimos, pero la pequeña termino por convencernos y ahora henos aquí en una tienda de disfraces en busca del suyo y posteriormente del nuestro.
Mina: Entonces hay que buscar uno de tu talla Alex, porque ese esta enorme.
Mina sale de entre las repisas de ropa y esboza una amplia sonrisa al ver a Alex.
___: Es cierto, ese disfraz es enorme.
Cuando hemos encontrado el traje de su talla nos dirigimos a la caja, donde una mujer de aproximadamente cuarenta años se encuentra recibiendo los pagos por los disfraces.
Mina: Hola, buen día, queremos este disfraz por favor.
Meto mi mano dentro de mi chaqueta para poder sacar mi billetera y pagar el disfraz, pero antes de poder hacerlo Mina ya ha sacado la cantidad exacta de su cartera con un adorno de parís que lleva en el frente, rodeado de brillos y mucho color. Es como si hubiesen pintado la torre Eiffel en esa cartera rectangular.
Mina: Yo lo pago.
Dice girando su rostro hacia mí, y antes de que pueda protestar le entrega el dinero a la cajera y se gira hacia mí de nueva cuenta.
Mina: Y no lo hago por lo retorcido que estás pensando o que puedas llegar a pensar, lo hago porque quiero hacerlo, porque quiero dárselo a Alex.
Eso me hace callar.
Es increíble como las mujeres siempre tienen las palabras correctas para hacer callar o hablar a una persona, y esta vez Mina ha hecho lo primero.
La cajera le entrega el disfraz después de meterlo en una bolsa y Mina de nueva cuenta le dedica una sonrisa encantadora a esa mujer.
Mina le desea un buen día antes de salir los tres de la tienda, Alex corre a la salida, pienso por un momento que quiere irse por su cuenta así que avanzo hasta ella y cuando estoy a punto de tomarle la mano ella toma la mano de Mina y ambas comienzan a caminar delante de mí, dejándome atrás.
Sé que no debería molestarme, pero no puedo evitar sentir ciertos celos, sin embargo, trato de reprimir ese sentimiento caminando más de prisa hasta ponerme a la par con ellos, encontrándome al lado de Mina.
___: ¿Siempre eres así?
Esa pregunta se me escapa sin siquiera pensarla y tanto ella como yo nos quedamos atónitos
¿Idiota que has dicho?
Mina: ¿A qué te refieres con exactitud?
Cuestiona frunciendo el ceño mientras me observa. Al hacerlo sus ojos se encuentran con los míos y por primera vez me doy cuenta de su color. Son de un marrón intenso y podría perderme en ellos por horas.
No es que haya sido tan tonto y no me haya dado cuenta de su color, pero jamás me detuve a verlos de cerca, hasta hoy.
___: ¿Siempre vas repartiendo felicidad y buenos deseos a todo el mundo sin excepción? ¿A pesar de que muchas personas sean groseras?
La segunda pregunta es más por mí que por cualquier otra persona, y supongo que lo ha entendido muy bien.
